#1U LAYHO

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JunMyeon no estaba seguro de qué esperar cuando entró en el dormitorio de Yixing. La habitación olía abrumadoramente a tierra húmeda y al aire después de una tormenta eléctrica, el dulce olor de un omega apenas distinguible. Había una omega femenina desnuda en la cama, siguiendo a Yixing con los ojos. Olía desconcertada, y no era de extrañar: los alfas normalmente no ignoraban a los omegas desnudos cuando estaban en celo. En el momento en que JunMyeon entró en la habitación, Yixing estaba en su espacio personal. Empujó a JunMyeon contra la pared y lo apretujó, un gruñido escapó de su garganta. JunMyeon se volvió dócil y desnudó la garganta, tratando de parecer lo menos amenazante posible. Yixing lo marcó con su olor, frotando su rostro contra el cuello de JunMyeon como un felino grande y peligroso. No era nada inusual, excepto que JunMyeon no estaba acostumbrado a que Yixing estuviera desnudo y excitado mientras hacía esto. Era muy consciente de la polla de Yixing contra su estómago, dura y gruesa. Aunque Yixing no la estaba moliendo contra él, todavía estaba allí. La polla de otro alfa. No fue tan repugnante como probablemente debería haber sido. Antes de que JunMyeon pudiera decidir qué pensar de eso, Yixing lo arrastró hacia la cama. JunMyeon no se resistió y se obligó a ser lo más dócil posible, sabiendo que cualquier iniciativa solo enfurecería a Yixing cuando estaba en el celo. Por el rabillo del ojo, pudo ver a la omega mirándolos con perplejidad mientras Yixing comenzaba a desnudar a JunMyeon con movimientos rápidos y eficientes de sus manos. JunMyeon lo permitió, un poco sorprendido. Todavía no podía creer que Yixing realmente quisiera compartir a la omega con él: los alfas en celo eran extremadamente posesivos. Pero, de nuevo, considerando que Yixing pensaba en él como "sus cosas", tal vez no le importaría que JunMyeon también se follara a la omega. Cuando JunMyeon finalmente estuvo desnudo, Yixing solo lo miró fijamente por un momento, frunciendo el ceño, antes de comenzar a pasar sus manos arriba y abajo por el cuerpo de JunMyeon. Marcándolo con olor. Probablemente... tenía sentido. JunMyeon necesitaba oler como Yixing para que Yixing no lo viera como una amenaza. Yixing fue extremadamente minucioso. Con todas las caricias y toqueteos, probablemente era inevitable que JunMyeon comenzara a ponerse duro. Había pasado un tiempo desde la última vez que había tenido relaciones sexuales, y su celo reciente pasado a solas solo había aumentado su frustración sexual. Su excitación podría haber sido inevitable, pero JunMyeon todavía se sentía avergonzado y más que un poco extraño. Se mordió el labio para evitar gemir cuando las palmas de Yixing acariciaron sus pezones. Mierda. Afortunadamente, Yixing no pareció sentirse ofendido por su erección. Lo miró antes de empujar a JunMyeon a la cama. Con un gruñido, JunMyeon aterrizó de espaldas. Con el corazón latiendo con fuerza, miró a Yixing.
-Siéntate de espaldas a la cabecera -le ordenó el otro alfa con voz entrecortada, mirándolo con el ceño fruncido. Frunciendo el ceño confundido, JunMyeon hizo lo que le dijeron.
Yixing finalmente miró a la omega.
-Acuéstate entre sus piernas, de espaldas a él. La omega - JunMyeon realmente necesitaba averiguar su nombre. -Se movió silenciosamente, asumiendo una posición reclinada contra el pecho de JunMyeon, sus suaves nalgas presionadas contra su erección. JunMyeon se dio cuenta de lo que pretendía hacer sólo cuando Yixing se subió encima de ella, encima de ellos. Mirando el rostro de JunMyeon, Yixing abrió los muslos de la omega. JunMyeon tragó saliva y miró la dura polla de Yixing entre sus piernas. Cuando Yixing finalmente empujó dentro de ella, gimió, su culo rechinando contra la polla de JunMyeon. Los ojos de JunMyeon se desenfocaron. Nunca se había sentido tan raro. El olor de una omega excitada le resultaba familiar, pero la posición en la que se encontraba, de espaldas, con otro alfa en celo acechando sobre él, como si JunMyeon fuera el que estaba siendo jodido, era completamente antinatural para un alfa. Podía sentir cada empuje mientras Yixing la follaba. Fue extraño como el infierno. Y sin embargo... todavía estaba duro. Nunca había estado más excitado en su vida. Su propia excitación en esta extraña situación hizo que JunMyeon se sintiera incómodo, por lo que trató de enfocar su atención en la omega en sus brazos. Acarició sus grandes pechos y su suave estómago, haciendo que sus gemidos crecieran en volumen. Deslizó sus dedos más abajo, jugando con su clítoris. La omega arqueó su cuerpo y la mano de JunMyeon rozó accidentalmente la polla de Yixing. Los músculos de Yixing se tensaron, sus ojos negros parecían casi salvajes mientras miraba a JunMyeon. JunMyeon se sonrojó y apartó la mano.
-No -dijo Yixing.
¿Qué?
-Sigue tocando.
¿Tocando? ¿Se refería al coño de la omega? ¿O... su polla? Lamiendo sus labios, JunMyeon llevó su mano de vuelta y tocó el coño húmedo de la mujer, acariciando alrededor de su abertura, donde estaba estirada alrededor de la gruesa longitud de Yixing. Los ojos de Yixing se pusieron vidriosos, su polla chocando contra la mano de JunMyeon cada vez que se movía. Sus embestidas se volvieron cada vez más duras, el olor de Yixing espeso y abrumador, cada embestida molía el culo de la omega contra la polla de JunMyeon. Sométete, decía el olor de Yixing. Sométete, sométete, sométete. Un gemido confuso salió de la boca de JunMyeon, con la cabeza dando vueltas. Desnudó la garganta y Yixing se lanzó hacia adelante, doblando a la pobre omega por la mitad y hundió los dientes en el cuello de JunMyeon. JunMyeon se sacudió, como electrocutado, y se corrió, su orgasmo lo tomó desprevenido. Yixing dejó escapar un gruñido bajo, sus caderas lo golpearon contra el colchón con la fuerza de sus embestidas. Finalmente, se estremeció y se quedó quieto, gruñendo, con los dientes aún enterrados en el cuello de JunMyeon.
JunMyeon miró al techo aturdido, confundido, avergonzado y enloquecido. Se sintió como si hubiera pasado una pequeña eternidad antes de que Yixing finalmente levantara la cabeza. Se miraron el uno al otro, el aire de incomodidad entre ellos era tan espeso que JunMyeon prácticamente podía saborearlo. La mirada de Yixing estaba más clara de lo que había sido, la bruma del celo desapareció por un momento.
-Lo siento -dijo, sus ojos se movieron rápidamente hacia el cuello de JunMyeon, a la marca de la mordedura que sin duda estaba allí. Si JunMyeon hubiera sido un omega, habría sido un mordisco de apareamiento; el conocimiento flotaba en el aire entre ellos, pesado e incómodo. JunMyeon se encogió de hombros, intentando parecer indiferente.
-No es gran cosa -mintió, tratando de no mostrar lo extraño que era-. Te dejaste llevar un poco -O mucho.
El sonido de un carraspeo les hizo estremecerse. Miraron a la Omega atrapada entre ellos.
-Eres bastante pesado -le dijo a Yixing, su voz suave y educada-. ¿Te importaría...?
-Por supuesto -dijo Yixing, rodando fuera de ella para acostarse de espaldas al lado de JunMyeon.
JunMyeon notó que no la había anudado. No es que necesariamente hubiera esperado que Yixing lo hiciera (anudar era un requisito solo para los alfas Xeus), pero aún así era bueno saber lo considerado que era Yixing. Contrario a la opinión popular, no todos los omegas disfrutaban de ser anudados.
-Perdón por esto -le dijo Yixing, su voz seca e incómoda. Al nebuloso cerebro de JunMyeon le tomó un momento darse
Cuenta de por qué Yixing se estaba disculpando: ninguno de los dos se había molestado en asegurarse de que la omega se corriera. Ella no olía sexualmente frustrada, por lo que probablemente también se había venido, pero el hecho de que él no estuviera seguro era más que un poco vergonzoso. ¿Había estado tan concentrado en Yixing? JunMyeon miró a la mujer tímidamente, pero ella parecía imperturbable, casi aburrida. Cierto. Para ella era solo un trabajo, nada más.
-Está bien -dijo, mirando el reloj-. Esto fue inesperadamente corto, lo cual no es malo -Le dio a Yixing una mirada evaluadora, olfateando delicadamente-. No debería pasar mucho tiempo antes de que termine su celo, señor Zhang. Quizás un coito más sea suficiente -Miró con curiosidad a JunMyeon. -¿Su... el otro alfa se quedará con nosotros el resto de la noche? JunMyeon tragó, repentinamente consciente de lo extraña que era la situación. Estaba desnudo y en la cama con un alfa igualmente desnudo. Apestaba a celo, sexo y feromonas de Yixing. Las feromonas de su marido. Su marido alfa que acababa de hacerle correrse. Por morderle.
-No -dijo JunMyeon, aclarándose un poco la garganta. Se bajó de la cama y buscó su ropa-. Es bastante tarde, iré a mi habitación.
Yixing hizo un movimiento abortado, como si quisiera agarrarlo pero luego se lo pensó mejor. JunMyeon no miró en su dirección y se vistió rápidamente. Una vez que estuvo presentable, murmuró,
-Buenas noches -y salió de la habitación, su rostro enrojecido y el aroma de Yixing todavía se adhería a él. Joder. Vaya mierda.