Frágil

9- Primera vez

🔞Capítulo +18 🔞

Si te incomoda alguna de estas escenas te pido que porfavor dejes la historia o pases el capítulo.
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Conway condujo hacia su apartamento y entraron a este a tropezones mientras se besaban.

Pararon al llegar a la habitación en la cual Conway se sentó al borde de la cama y Gustabo sobre sobre las piernas de este donde termino de quitar la camisa del mayor y comenzó a bajar con besos por todo su torso hasta llegar a encontrarse con el cinturón que quito rápidamente junto con los pantalones dando a el descubierto la fina tela que cubría el ya abultado miembro de Jack.

Quito los boxers y acomodo sus piernas en el suelo para comenzar a succionar la punta de el miembro y luego bajar y subir su boca por todo el tronco a lo que el moreno respondía soltando leves jadeos y dejaba caer su cabeza hacia atrás cerrando los ojos por el placer, Gustabo comenzó a incrementar la velocidad haciendo que este disfrutara aún más.

Al cabo de un rato soltó un gruñido jadeado al tiempo que se corría en la boca del chico.

-Mierda Gustabo lo siento- dijo apenado y con su respiración algo cortada al ver al menor con la boca llena de sus fluidos.

El rubio solo trago todo lo de su boca y limpio los restos de el miembro de Jack con su lengua.

-No sea suave conmigo super- respondió Gustabo poniendo un tono coqueto a la vez que volvía a subirse a las piernas del hombre y se movía sobre estas para provocarlo.

-Si tú lo pediste luego no te lamentes muñeca- Dijo ya con seguridad tomando la cintura del chico y apegandolo a el.

-Hazme gemir tu nombre toda la maldita noche- le susurró al oído.

Jack dejo a Gustabo sobre la cama para quitarle las prendas de ropa que le quedaban dejándolo totalmente desnudo, se subió sobre el y comenzó a dejar chupetones por el cuello y pecho de este mientras que comenzaba a tocarlo.

Gustabo quiso contener sus gemidos mordiendo su propio labio cosa de la cual se percató Conway.

-J-jack... Que c-cojones haces?- dijo el rubio al no sentir la mano del hombre en su miembro.

-No te contengas conmigo pedazo de anormal-

-Joder solo sigue- respondió desesperado

Gustabo al no tener respuesta alguna solo se impaciento más y estaba apunto de volver hablar cuando fue callado por dos dedos que Conway introdujo en su boca. Sabía lo que significaba eso así que los acepto gustoso y comenzó a lamerlos rápidamente, unos segundos después el mayor saco los dedos de su boca y los introdujo en la entrada del rubio haciéndolo gemir tal y como quería.

Jack era rudo a la hora de tener sexo pero tampoco quería lastimar a Gustabo así que estuvo un rato con los dedos hasta que vio al chico asentir en señal de que estaba listo y con esto empezó a meter su miembro dentro de el haciendo que este apretara las sábanas con fuerza.

Conway se mantuvo quieto para que el interior de el chico se acostumbrara y luego de unos segundos este enrollo las piernas en su cadera dándole paso para que comenzará.

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-Dame m-mas!- gritaba el rubio entre gemidos mientras recibía embestidas en su interior.

Llevaban un rato así y sentía que estaba en el paraíso, no le importaba despertar a todo el edificio con sus gemidos siempre y cuando su novio le siguiera dando de esa manera hasta que sintió como todo su cuerpo se calentaba aun más y el placer le recorrió entero pues Conway había encontrado su punto g y esto motivo al hombre para darle aún más y sin parar.

-J-Jack voy a correrme- Dijo como pudo y levantó un poco el torso para que lo alzará, lo cual el mayor hizo rápidamente.

Se abrazo a el y apretó aún más las piernas enrolladas en la cadera de este pues aún allí Jack le daba embestidas y esto hizo que llegara a su orgasmo, corriendose en el abdomen de ambos mientras que Jack dio su última estocada y se vino casi a la par dentro del chico.

Gustabo se dejó caer rendido en su hombro así que Conway lo recostó en la cama y salió de su interior para luego acostarse a su lado.

-Ha sido la puñetera mejor noche de mi vida- dijo Jack mirando a Gustabo a su lado.

-Y la mía- respondió cansado pero con una sonrisa en la cara.

-Ven acá muñeca- hablo sonriente acercando al rubio a su cuerpo y rodeando su hombro con el brazo.

Gustabo recostó la cabeza sobre el pecho Jack y tomo una de las sábanas con la cual se cubrió junto a el y sintiendo sus ojos cerrarse ambos se quedaron dormidos abrazándose el uno al otro.