Pétalos de amor | LS

Capítulo 8

—Ah...— jadeó.

Su cuerpo se encuentra caliente y sudoroso, la ropa que tiene puesta solo hace que el calor aumente.

Siente cómo sus pantalones comienzan a mojarse lentamente, haciéndolo sentir incómodo. Llegó sus manos hacia su pantalón con la intención de quitárselo, pero sintió una mano grande sobre las suyas impidiéndole que baje la cremallera. Esto lo hizo sentir enojado.

Metió una de sus manos a su abdomen, sintiendo su piel calienten y sudorosa. Su respiración está entre cortada haciendo que se sientan aún más peor, trata de respirar normalmente pero no lo consigue del todo bien. Subió su mano a la altura de su pezon, ese que tiene una pequeña camelia, al hacerlo su camisa logró subirse un poco. Harry lo miró de reojo, lo tomó de la mano y le bajó la camisa.

No quiere ver su cuerpo.

El omega ha fruncido el ceño. Desprendió sus feromonas para que el alfa se diera cuenta de que se encuentra enojado y confundido, quiere hacerle entender que seguirá tocando su cuerpo hasta que el calor pase. Giró un poco su cabeza para mirar al alfa, él tiene su mirada fija en la carretera, sus labios están apretados con tanta fuerza que han tomado un ligero color blanco, sobre su frente hay unas cuantas gotas de sudor. Está nervioso.

Louis se movió en su asiento, tratando de buscar una posición que le fuera cómoda, por alguna extraña razón terminó con sus pies recordó enfrente, Harry le dedicó una mirada extraña cuando tiró una figura que siempre lleva ahí.

—Harry — su voz apenas llegó a los oídos del nombrando, quien tembló de inmediato. El dulce aroma que desprende el omega hace que lo vuelva loco y a su vez nervioso. Tener a un omega en defeño a su lado es algo nuevo para él, por lo tanto no sabe lo que deben hacer, no sabe cómo cuidar de un omega estando en celo. Lo más probable es que vaya a volverse loco una vez que lleguen a su departamento,— d-duele. Duele mucho. Haz algo para que el dolor se detenga.

—Ya casi llegamos al departamento.

—Harry.

—Trata de resistir el dolor, Louis. Una vez que lleguemos...el dolor se habrá ido —apretó el volante.

—¿Me...ayudarás a aliviar el dolor?

Él nunca ha estado con un omega en celo. Ha tenido sexo con sus antiguas parejas, pero cuando entraban en celo Harry nunca acudía con ellos para ayudarlos. Tiene ese pensar de que, pasar el celo con alguien vaya que lo pone nervioso.

Incluso Harry suele pasar sus celos solos. Son dolorosos pero a aprendido a soportar todo ese dolor que siente. Ha habido varías omegas lindas de su empresa que le piden ayuda durante sus celos, incluso ellas le han dicho que piden ayudarlo a él, siempre se aterroriza cuando le dicen cosas como esas. Perdió la cuenta de cuantos omegas ha despedido debido a esas ofertas que le hacen.

Él tiene dos manos para darse placer a sí mismo, hace tiempo compro un juguete que solo usa cuando está en celo, la primera vez que lo uso se sintió raro, pero fue acostumbrándose a él.

Tiene miedo de lo que vaya a pasar esta noche. Su alfa le está diciendo que tome a ese omega que tiene en su auto, pero Harry piensa que si lo hace, sería como aprovecharse del estado de Louis.

Louis, es un omega que dejó cautivado a Harry desde el primer momento. Su corazón late con fuerza cada vez que lo mira a los ojos y le sonríe de manera tierna. Ama tanto la delicadeza voz del omega, es como si de una ave cantando se tratara. Su belleza es como inigualable, jamás había visto a un omega tan bello como a Louis.

Debe admitir que, en más de una ocasión ha soñado con que toma a Louis con fuerza, pero solo eran sueños que jamás llegarían a cumplirse. En dichos sueños Harry le decía cosas muy sucias a Louis, si él las dice ahora mismo su cara tomaría un tono rosado y moriría de vergüenza.