33

507 47 3
                                    

No estaba lista para los sentimientos que se despertaban en su interior. Y se sintió asustada, sintió miedo de no ser lo que él esperaba.


—Eres todo lo que siempre he soñado —dijo él como si acabara de leer sus pensamientos. Ella levantó un poco la mirada para encontrarse con su profunda mirada —Eres eso y mucho más...


—¿Crees que esto funcione? —preguntó.
Necesitaba saber si él creía que aquello no era algo pasajero. Taehyung levantó la mano y acarició su rostro, volvió a besar la punta de su nariz.


—Apostaría mi alma a que si...


— Te amo...
—Te amo.
Volvieron a besarse.
Taehyung posó sus manos en la delicada espalda de Jennie y buscó el cierre de su vestido, lo bajó delicadamente. Llevó la boca a su hombro derecho y lo besó delicadamente. Jennie hundió los dedos en sus cabellos. El pequeño tirante del vestido cayó hacia un costado y Taehyung se encargó del otro, la prenda cayó al suelo delicadamente. Ella tenía los ojos cerrados, sabiendo que así sentía todo más intensamente.
Entonces él la levantó en brazos, instintivamente Jennie colocó los brazos alrededor de su cuello y lo miró a los ojos.
Caminó con ella en silencio hasta llegar a un costado de la pequeña casita en donde se encontraba una cama en la que apenas entraba una persona. Jennie la miró y luego volvió la vista a él, iban a estar más que pegados en ese lugar. Acercó su rostro al de él y acarició su masculina mejilla con la nariz, respiró profundamente para llenarse el cuerpo de su aroma.
Taehyung la tendió delicadamente en la cama, que hizo un pequeño crujido ante el nuevo peso que llevaba encima. Ella simplemente lo observó allí parado, él se quitó la camisa y se inclinó sobre ella volviendo a besarla.
Jennie comenzó a recostarse, llevándolo junto a ella. Taehyung se posicionó sobre el delicado cuerpo de ella pero trasladó todo su peso a su brazo derecho, para no llegar a aplastarla. La ropa interior de ella le mojó el pecho y entonces sin dudarlo se alejó un poco y se lo quitó, ella contuvo el aliento y sintió que un suave calor le cubría aquella parte de su anatomía y corría rápidamente hacia sus mejillas. ¿Ahora sentía vergüenza? Luego de haberse comportado tan descaradamente hacía unos cuantos minutos, no se atrevía a mirarlo a los ojos. Sintió que Taehyung le levanta la barbilla con el encanto de su mano.


—No volverás a irte lejos, ¿verdad? —le preguntó.


—No... —murmuró ella.
Él volvió a besarla, tomando hasta la última gota de dulzura de sus labios. Y Jennie sabía, sabía que jamás iba a poder dejarlo, él estaba metido debajo de su piel, en su corazón.
El resto de las ropas que ambos llevaban terminaron silenciosamente en el suelo. Sus corazones latían al mismo ritmo, diciéndose todo sin decir nada.
Entonces Jennie rodeó aquellas fuertes caderas y Taehyung entró en ella, sin dejar de mirarla a los ojos. Ella se aferró a sus hombros y un suave gemido se le escapó de los labios. Notó que él estaba tenso, ¿creía que podía hacerle daño?.


—¿Te provoco dolor? —preguntó él en un gruñido. Lo que más odiaba era saber que podía lastimarla... de la forma que fuera.


—Se siente hermoso —murmuró ella y lo alentó a que se moviera un poco más. Era la gloria, su cuerpo tan pesado encima de ella, su piel tan caliente, sus músculos duros y fluidos —Más, Taehyung. No voy a romperme, no puedes hacerme daño...

Entonces él se enterró en ella. Jennie gimió su nombre y arqueó su cuerpo hacia el suyo. Elemental como respirar, era tenerlo en su interior, jamás había sentido nada como aquello. Y era simplemente suyo.
Cuando comenzó a moverse desenfrenadamente, sus labios encontraron los de ella y metió la lengua en su boca, tuvo el fugaz pensamiento de que nada en su vida volvería a ser lo mismo, jamás. Y luego perdió su cuerpo, que se disparó por encima del borde para caer en una lluvia de estrellas, como si estuviera a cierta distancia oyó a Taehyung rugir, sacudiéndose una vez, y luego otra y otra más y muchas otras veces más.
Él se dejó caer sobre ella pesadamente y Jennie lo acunó con sus brazos para luego besarle la frente que estaba a su alcance. Permanecieron unidos, entrelazados y sus respiraciones continuaron siendo agitadas durante un largo rato. Taehyung levantó la cabeza y la miró a los ojos, se sentía el hombre más afortunado del mundo.
Nada podía salirle mal.

Can you please stay with me? -Taennie- (ADAPTACION)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora