III

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Pov Blair

Seguía viendo You en Netflix hasta que escuché el timbre, estaba segura de que sería alguno de mis hermanos así que abrí sin mucha importancia, pero ahí me encontré con el ojiverde, con dos pequeñas cajitas me puse muy nerviosa y le dije:

—Hola, me disculpas un momento voy a cambiarme, perdón por cómo me encontraste creí que era alguno de mis hermanos. — Dije con una sonrisa y el asintió tranquilamente, cerré la puerta rápidamente.

Me cambié con lo primero que me encontré en mi maleta, me puse un pantalón negro acampanado y un top negro, deje las sandalias que tenía puesta y me quite mi mascarilla la verdad no tuve tiempo de maquillarme y espero que Charles no notara la cara de cansancio que tenía después de unos 5 minutos volví a abrir la puerta y le di una señal para que pasara, el entró y me dijo:

—Se te ve muy bonito tu outfit, aunque con tu camisón te veías muy tierna. Te traje un pastel de chocolate para darte la bienvenida. —Dijo con la voz un poco nerviosa y temblorosa, lo cual me dio mucha ternura

—Gracias, emm ¿Charles verdad? —quise hacerme la desinteresada, pero no exageradamente —¿Cómo sabes que me gustaba el pastel? Si quieres podemos comer las rebanadas.

—Emm pues fue pura intuición, pero de hecho, las dos eran para ti.

—Pues tienes que saber que soy muy compartida, te doy una. Ven vamos a las mesitas del balcón a charlar y comer.

Después de instalarnos el piloto abrió las cajas y me dio los cubiertos, cuando vi el pastel simplemente no pude, hubo algo en mi que me impidió comérmelo, todas esas calorías y azucares refinadas, sentía que si comía eso iba a engordar y dije:

—Charles, come el pastel tú yo solo te acompaño

—¿Por qué? ¿No tienes hambre?

—Mm no, es que simplemente estoy a dieta

—Mira Blair, para empezar, tienes una figura muy bonita—en ese momento me ruboricé un poco—además yo soy un atleta y eso no quiere decir que ya no puedo comer nada de comida chatarra, recuerda que hay alimentos que también nutren tu alma.

—Eso me alivia un poco, tiene mucho tiempo que alguien no decía algo sobre mi figura, gracias. —dije tomando mi cubierto para llevar un trozo de pastel a mi boca, tenía mucho tiempo que no había probado un pastel de chocolate tan delicioso, vaya se me hacia agua la boca cada que comía, la verdad no mentía si decía que este ha sido el mejor pastel de chocolate que he probado, Charles interrumpió mis pensamientos cuando me dijo:

—¿Qué te trae por aquí Blair? Dijo mirándome a los ojos, vi como sus pupilas al encontrarse con las mías se dilataron ligeramente, espero y las mías no se vieran de la misma forma, y dije:

—Mm es una historia un poco larga, pero estoy para cumplir el sueño de mi padre, quien quería que fuera una fan del deporte que prácticas. Realmente no entiendo nada y siento que voy a estar muy fuera de lugar.

—Pues no es por presumir, pero aquí tienes a uno de los mejores pilotos que compite en Ferrari—dijo con una voz un tanto coqueta—y yo te voy a presentar mañana a todos si es necesario, voy a mover mar y tierra con tal de que te sientas cómoda. —En ese punto de la conversación sentí que me acaloraba y dije:

—Eso no es necesario Charles de verdad, no quiero que te distraigas—dije rápidamente

—Para nada linda, sabes que lo hago con mucho gusto, he de decirte que soy un gran admirador tuyo, incluso fui a uno de tus conciertos de Madison Square el año pasado y tienes una voz muy hermosa.

Love again | Charles LeclercDonde viven las historias. Descúbrelo ahora