❀ 𝑀𝑎ℎ𝑖𝑑𝑒𝑣𝑟𝑎𝑛 𝑆𝑢𝑙𝑡𝑎𝑛

ᴜɴᴀ ɢʀᴀɴ ᴠɪᴄᴛᴏʀɪᴀ

Narra Mahidevran

Estaba preparándome pues cenaria con Hatice Sultan, yo la quería mucho pero recientemente había estado con Hürrem y no me hizo la mayor gracia pero cenaria con ella y sus hijos, estaba teniendo un momento difícil su hijo mayor Sultanzade Mehmed estaba un poco enfermo pero lo traería para que conociera a sus primos.

Mahidevran ve a Hatice y enseguida hace reverencia como signo de respeto a la hija de un Sultan.

- Hatice: Oh mahidevran porque te reverencias, tu eres descendiente de la noble dinastía Giray.

- Mahidevran: Yo no soy hija del Sultan ni de la Valide Sultana mi linaje no estan noble.

- Hatice: Tú eres la madre de tres şehzades y de dos sultanas.

- Mahidevran: esta conversación se hará infinita, comamos.

- Hatice: Esta bien Gülbahar.

Se sientan y justo cuando se disponen a comer aparece el Sultan, rápidamente se levantan de sus muebles y hacen reverencia.

- Mahidevran: Su majestad, ¿a que se debe este honor?.

- Suleiman: he decidido comer con ustedes también vine a anunciar una nueva orden.

Suleiman da la orden de traer más muebles y comida, parecía un banquete y este ve a sus sobrinos y hijos cojidos de criadas.

- Suleiman: Dame a Celam y Bülent.

- Criada 1: Su majestad, aquí tiene a nuestro príncipe Celam.

-Criada 2: Su majestad, aquí tiene a nuestro príncipe Bülent.

- Hatice: Son unos hermosos Príncipes dignos de su majestad, Ojalá nuestro padre pudiera ver a Bülent se parece mucho el.

- Mahidevran: Nuestro difunto sultan se ubiera alegrado mucho de ver a nuestro príncipe valiente.

- Suleiman: Bülent es un digno príncipe como ninguno, ansío ver su crecimiento así como con mis otros hijos, también he decidido que tú tendrás a nuestro pequeño príncipe Selim y de el próximo miembro de la dinastía.

- Mahidevran: Su majestad es un gran honor que me confíe el bienestar de nuestros Príncipes y los cuidaré con mucho amor.

- Suleiman: Eso es lo que espero de ti.

- Hatice: Su majestad cenemos.

Los presentes se dispusieron a cenar mientras las criadas les daban dulces a los pequeños miembros de la familia imperial.

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