Destino Inseparable

Una Nueva Vida

Días después la noticia se esparce por todo el Reino. Shigaraki fue condenando a pena de muerte, twice estaba muerto, toga y Dabi fueron encerrados por muchos años por criminales.

Las cosas iban muy bien para todos. Yauyorozu debía regresar a su Reino y por alguna razón a shoto le disgustaba la idea, sentía que estaba desarrollando algunos sentimientos hacia la princesa pero decidió a esperar que era lo que el destino tenía para él, tal vez sería un rey solitario o algún día tendría algún romance de verdad con alguna mujer.

Luego de algunos meses después de la muerte de shigaraki todo parecía ir muy bien para la familia todoroki.

—estoy muy orgullosa de ti, hijo—Rei ya no le temia a Enji y parecía poder convivir con él sin algún problema y la relación entre hermanos mejoró mucho.
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Un día especial, era un día especial. Katsuki le había propuesto matrimonio a Izuku mucho antes pero por fin hoy era el gran día de la boda.

En su aldea en un bosque junto a un lago, se encontraba katsuki frente a todos con un cura a su lado, traía su atuendo de siempre a excepción por algunas joyas extras y una calavera de animal arriba de su capa.

Izuku aparece frente a todos con un vestido de color mantequilla con un gran listón en su vientre, el nudo estaba por detrás dándole un gran detalle al vestido largo.

La boda era realmente inusual, había un poco de las costumbres de la aldea de katsuki y del Reino de donde venía Izuku.

La ceremonia continuo bien hasta que llegó la pregunta tan esperada.

—Señorita Izuku Midoriya, ¿acepta a katsuki bakugo como su esposo?

—¡si!—responde de inmediato la pecosa.

Katsuki ríe y luego le hacen la misma pregunta a él.

—eso es más que obvio, ¡claro que aceptó!—grito orgulloso.

Ambos se besaron y todos aplaudieron. Luego de un rato Izuku lanzo el ramo y Uraraka lo tomó con entusiasmo.

La celebración estaba llena de risas y música, mientras deku y kacchan hablaban junto al lago aparece Aizawa detrás de ellos para despedirse.

—¿de verdad te tienes que ir?—pregunto Izuku.

—si, he dejado mi trabajo mucho tiempo y podría darme problemas, además esta bastante lejos.

—...si...—katsuki parecía querer decir algo—yo...agh, te agradezco mucho que nos ayudaras y que...ayudaras a salvar a izuku y a mi hijo.

—jaja...—los recién casados quedaron atónitos con la risa del mayor—no hay problema, si en algún momento quieren ir, esa casa siempre estará disponible para ustedes o alguno de sus hijos, considerenlo un regalo de bodas—ambos asintieron y Aizawa se fue de allí lentamente.

Al rato llega todoroki con Momo a saludarlos y felicitarlos, mientras hablan izuku se aparta un poco y le pregunta a Yauyorozu.

—¿sucede algo entre todoroki y tú?

—¿eh?—se sonrojo la pelinegra—no, por supuesto que no. Han pasado muchas cosas y a pesar de que Shoto sabe cómo realmente me siento...él se está tomando su tiempo y respeto eso.

La pecosa asintió y sonrio mientras Katsuki la miraba fijamente ya que no parecía soportar mucho la presencia de Todoroki.
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Meses después en un cuarto con izuku quejándose y unos doctores, nacen tres pequeños bebés.

El primero en nacer tenía el cabello Rubio y puntiagudo como su padre, y sus ojos eran verdes, fue nombrado como Hitoshiro. El segundo tenía el cabello rubio pero crespo y sus ojos eran grandes y rojos, su nombre fue Sajiro. Y la última, tenía el cabello verde y crespo, y sus ojos eran de un rojo pasión, su nombre era Kyomi. Lo que más destacaba a estos trillizos eran sus pecas bajo el ojo derecho las cuales solo eran tres y los tres tenían las mismas pecas en el mismo lugar.

Tres hermosos y sanos bebés habían nacido por fin, aunque si, katsuki casi cae de espaldas al ver que tenía tres hijos cuando solo se había preparado mentalmente para uno.

Izuku salió bien del parto pero los doctores le mencionaron una noticia, deku tendria muchas dificultades para volver a quedar embarazada por todo los accidentes y descuidos en su embarazo le sería difícil tener otro bebé.

Ambos se miraron y solo asintieron con tranquilidad. No iban a mentir, con tres hijos les basta y sobra, y si en un futuro les gustaría otro hijo o hija lo hablarían con un médico o un mago pero lo más probable era que no.

Meses después una carta llega a la aldea de Bakugo, era una invitación a la boda de Todoroki y Momo, por fin después de tanto tiempo habían arreglado las cosas y formalizado una relación.

—no... —murmuro el rubio.

—¡si! —exclamó la pecosa.

—no quiero ir a ese lugar, no quiero ponerme esa terrible ropa —se quejaba katsuki, parecía un niño pequeño haciendo berrinche, ni siquiera sus tres hijos se comportaban así.

El día de la boda fue realmente hermosa, muy diferente a la de izuku y Katsuki, la de ellos había sido simple y en la naturaleza pero la de Shoto era otra cosa. La gran iglesia estaba decorada a más no poder, el vestido de yauyorozu claramente podía destacarse con esa falda inflada y el velo parecía más largo que la alfombra.

Luego de la ceremonia Momo con un vestido menos pesado se acercó entre saltos y risas hacia Izuku, más bien...hacia sus hijos.

—¡mira que cosas más hermosas! —grito.

—son encantadores, oh, los tres tienes las mismas pecas —rió.

—no te burles de mis hijos —chasqueo la lengua mientras lo miraba completamente tieso por la ropa que traía puesta.

—esa ropa te queda muy bien —comentó Kirishima en el mismo estado.

Ambas mujeres rieron y la pelinegra tomó a Kyomi.

—Mitsuki dice que tendrá el mismo carácter que Kacchan, solo mira su entrecejo —Momo la miro y así era, tenía el mismo rostro que su padre y para rematar estaba haciendo un puchero.

—¡jajaja! ¡Es verdad! Bueno, dicen que la hija siempre es como el padre pero en femenino.

—no te burles de mi hija... —volvió a murmurar.

Izuku rió, desde que sus hijos nacieron él se comportaba así, era demasiado cuidadoso con los tres, tal vez demasiado...y sin darse cuenta ella amaba eso.