Omegacember ೀ『 💜 ChengYao 💛 』

💜 Cuello 💛

Jiang Cheng había llamado a su asistente para que los recoja, cargó a su Omega en brazos mientras este se quejaba como un niño y su asistente atrás traía al acompañante de GuangYao.

— Wen Ning, depositalo con cuidado en el asiento de co-piloto, yo llevaré a A-Yao en los asientos de atrás. — ordenó, su asistente asintió y obedeció.

Jiang Cheng ingresó con GuangYao, depositando a este primero en el asiento, colocándole su cinturon de seguridad y luego subió él, su asistente acomodó al otro Omega en el copiloto y se dirigió a el asiento de conductor para iniciar su rumbo.

Jiang Cheng se quedó viendo al Jin ebrio, que parecía un niño peleando con el cinturon de seguridad, jaloneandolo pero sin la fuerza necesaria como para quitárselo, haciendo un pequeño berrinche, sonrió ligeramente.

— Joven Jiang, — habló mientras conducía lento el Wen. — ¿a dónde me dirijo?

Jiang Cheng suspiró, ¿debería llevarlo a su casa? Pero.. No sería apropiado llevarlo en ese estado, y a aquel amigo menos, ¿llevarlo a su casa? No, definitivamente los Jin lo matarían si ven entrar a GuangYao en ese estado, en especial Jin ZiXuan, quería evitarse esos problemas y tenía que pensar en algo rápido.

—¡A mi guarida! — exclamó de pronto el Jin ebrio. — quiero ir a mi guarida.

Jiang Cheng se alegró ligeramente de que el contrario tenga un segundo plan pero también le pico la curiosidad de aquello, ¿Jin GuangYao tenía una segunda casa?

— ¿Dónde queda? — preguntó, GuangYao como pudo sacó su celular de su bolsillo, tecleo algo y luego le cedió el móvil.

— GPS...  Ahí es... — habló sonriendo ligeramente, Jiang Cheng sintió ternura por su prometido, sujetó el móvil y se lo dio a Wen Ning, quien lo sujetó y empezó a conducir. — Desconocido...

— Soy Jiang Cheng.

— Uy, ajá... Mi A-Cheng no se vestiría así.. Él siempre usa traje... — GuangYao aún ebrio sonrió imaginándose a su prometido con aquel traje formal que siempre miraba, como este se ceñia bien a su cuerpo, lo bien que le quedaba, lo hizo suspirar. — tu no eres él... Pero debo admitir... Te pareces a él... Jejeje...

Jiang Cheng rodó los ojos, se veía tierno en tal estado que no se animaba a reprocharle algo.

— Pero... — olfateó ligeramente el Omega al Alfa. — hueles rico... Hueles a lotos... Como A-Cheng...

— A-Yao, soy Jiang Cheng.

— No me digas así, ¡no me digas A-Yao! — reclamó haciendo un puchero, apuntó al "desconocido".— ¡Sólo mi A-Cheng puede llamarme así! Tú no.

— A-Yao...

— Si eres A-Cheng... ¿porqué eres tan duro conmigo? — preguntó, bien, había pasado de estado tierno a estado triste de alguna manera, Jiang Cheng no tenía experiencia lidiando con alcohólicos o borrachos pese a tener un club que sin duda tenía un sin fin de estos, así que ahora... ¿qué debía hacer? — Dices que soy una obligación... Pero... Yo te amo... ¿porqué tú no me amas?