1️⃣

492 27 13
                                    

Amor, cuidado, cosas principales que brindan padres a sus hijos, lo que mantiene a un niño con una sonrisa en su rostro evitando que conozcan lo cruel que puede llegar a ser este mundo donde nacemos y moriremos en algún momento.

REINO DEL TRÉBOL

Los habitantes de tal lugar pasaban al rededor de una pequeña niña que se encontraba tomada de la mano de Mimosa Vermillion, varios estaban observando de manera curiosa y otros murmuraban uno que otro chisme, inventando toda clases de cosas.

-Es una niña malcriada –murmuraba una señora de cabello oscuro.

-Y usted es muy vieja –Respondió la niña que estaba tomando la mano de Mimosa.

Las personas miraron atentamente la expresión que había puesto la señora al escuchar tal comentario proveniente de la niña.
Mimosa en cambio tenía su rostro rojo por la vergüenza, no esperaba que tantas personas se detuvieran a mirar o escuchar lo que sucedía.

-Liss, no debes decir esas cosas, pídele una disculpa -Dijo Mimosa sintiéndose observada por varias personas.

-Le pido una disculpa, pero usted dijo que yo era malcriada, no porque sea menor que usted significa que puede hablar de mí de esa forma –Soltó la mano de Mimosa y continuó hablando - Mí nombre es Liss Vermillion y soy de la Realeza.

Todos los presentes miraban de manera sorprendida hacía Liss, pero la mirada de Mimosa se estaba nublando, su pecho de sentía apretando y un sollozo se escapó de sus labios.
La manera en la que había hablado, las expresiones de su rostro, la manera en la que se había defendido. Todo lo había heredado definitivamente de Noelle.
Mimosa limpiaba sus lágrimas con sus manos de manera rápida para que nadie la viera, sobre todo Liss.

Liss, la niña dónde varios veían el reflejo de Noelle Silva y Asta. Su cabello plateado hasta los hombros, sus ojos color verdes, su personalidad algo arrogante, su estatura bastante baja, su magia de agua, cada detalle de ella cautivaba los corazones de las personas que habían logrado conocer a sus padres.
Ella había crecido en el hogar Vermillion, considerando a Mimosa y Yuno sus padres, ambos no se negaron a nada, la aceptaron y le brindaban el amor que necesitaba. Lo único malo que hacían era nunca haberle hablado sobre su verdadero origen y quiénes eran sus verdaderos padres, es más habían prohibido a muchas personas que hablarán sobre ese tema.

¿Como había pasado todo?
Esa era la pregunta que varios se hacían, pero los únicos que sabían la verdad eran los difuntos padres de Liss.
Lo que si se podía saber con exactitud era como esa pequeña niña había llegado hasta los brazos de los Vermillion.

El día de la Gran batalla en el Reino del Trébol, el mismo día dónde se estaba realizando la boda de Noelle y Asta.
Había quedado a cuidados de Lolopechika la bebé Liss. Lolopechika había asignado que varios estuvieran atentos por si atacaban el Reino del Corazón.
Por primera ver sentía mucho miedo, no se imaginaba los despiadados que eran esas personas que buscaban dañar a una inocente bebé que no había hecho ningún mal.
Undine el espíritu que acompañaba a Lolopechika trataba de distraerla hablándole de algunos regalos que podía hacerle a la pequeña bebé.
Al darse cuenta ya habían pasado varias horas y no había ningún comunicado por parte del Reino del Trébol. Pero un sonido de pisadas alertó a los presentes del castillo posicionadose para pelear pero lo único que vieron llegar fue la silueta de dos personas, una mujer y un hombre. Yuno y Mimosa, ambos con su ropa totalmente sucia y en mal estado.
Lolopechika los miraba atentamente esperando que dijeran algo sobre la batalla, pero lo único que se escuchó fue como Mimosa rompía en llanto mientras se acercaba a su sobrina para abrazarla, entre sus llantos y sollozos logró pronunciar "Perdón por no haber podido salvarlos"
En ese momento Undine miró a Yuno y entendió lo que estaba ocurriendo. De los ojos de Yuno bajaban pequeñas lágrimas deslizándose por su mejilla, sus puños estaban apretados y se mostraba en su rostro como el sentimiento de tristeza y enojo se combinaban.

Desde ese día Mimosa se había prometido a si misma proteger a Liss de cualquier cosa que pudiera dañarla. Se volvería más fuerte por ella y solamente por ella.
Mientras que Yuno solamente estaba decidido a encontrar aunque sea una pista de Asta y Noelle, porque la realidad era que sus cuerpos no habían sido encontrados pero si el cuerpo de Cony totalmente sin vida. Yuno tenía la esperanza de que aún se mantuvieran con vida y que él los encontraría, aunque tal vez eso fuera mentira mantendría vivo ese granito de esperanza hasta que su vida llegará a su fin.

-Tú no eres una Vermillion, niña, tu eres... –Todos miraban horrorizados a la señora, ella se había quedado totalmente muda al sentir una gran cantidad de maná provenir de sus espaldas.

-Papá Yuno! -Liss ignorando el comentario de hace unos segundos corrió hasta donde estaba Yuno saludándolo con un abrazo.

Yuno le dió un pequeño beso a Liss en su cabeza pero aún así no despegaba su mirada seria hacía la señora que estaba enfrente suyo dándole la espalda.

-Mimosa podrías comprarle a Liss el muñeco de alienígena que te estaba pidiendo antes de que esta mujer con sus malos comentarios interrumpiera?

Mimosa solamente asintió y nuevamente tomó de la Mano a Liss dirigiéndose a una tienda.
Las personas que estaban en el lugar se mantenían en silencio tal vez pidiendo en sus pensamientos que Yuno no hiciera nada malo con esa mujer.

-Capitan Yuno... Yo...

-Ni una palabra, si no quiere ser ahora mismo reportada con el Rey Mago guarde silencio.
Solo lo diré una vez y espero se le grave en la cabeza de todos. Liss es una Vermillion porque ella optó a llamarse así, pero aunque no tuviera ese apellido sería de igual forma alguien de la Realeza porque se que varios conocen la historia de esa niña. Hoy se cumplen 15 años desde la supuesta muerte de sus padres biologícos y digo supuesta porque aún no se han encontrado sus cuerpos. Creo que deberían tener más humanidad y saber lo que dicen sobre una niña que no a hecho más que ayudarlos desde antes de obtener su grimorio. Y si mal no recuerdo su nombre es Ritta –Habló refiriéndose hacía la señora -No fue Liss la que la ayudó hace unos días con sus bolsas de compras? La que utilizó su magia para regar y cuidar sus plantas?
Hablan de que la Realeza se muestra superior hacia ustedes, que los tratan de una manera arrogante o los desprecian, pero ustedes podrían ser mejor que ellos al no comportarse hablando mal de esa forma.

Todos seguían sin pronunciar ni una palabra, Ritta seguía con su mirada en el suelo sintiendo la mayor vergüenza que había sentido durante toda su vida. No sabía que decir o como reaccionar, se sentía mal porque todo lo que había dicho Yuno era cierto.

-Espero que esto no se repita porque aunque me quiten mí título, me exilien del Reino o me condenen a muerte, yo mismo me haré cargo de acabar con personas así.











•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•

Liss SilvaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora