MULTIDIMENSIÓN.Parte(20)La amenaza.

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Ya de mañana todos se levantaron.

Lourdes se va a la cocina para desayunar. Y allí también se encontraba Lou.

Lourdes: ¡Buenos días! -dijo mientras se servía un poco de agua.

Lou: ¡Buenos días! ¿Cómo dormiste anoche?

Lourdes: Bien, bien.

Lou: Había algo que no te había preguntado antes.

Lourdes: ¿Qué cosa?

Lou: ¿Qué si te había resultado cómoda la cama?

Lourdes: Sip, muy cómoda, pero... ¿¿Por qué una cama matrimonial??

Lou: ¡JAJAJA! Porqué esa habitación era antes de mis padres.

Lourdes: ¿En serio? ¿Y por qué tengo que dormir allí?

Lou: Porque Adrien se adelantó con el otro cuarto.

Lourdes: Ese desquiciado...

Lou: Pero es mejor, toda esa cama para ti sola.

Lourdes: Ahora que lo dices, sí es mejor.

En ese momento Marinett entró a la cocina.

Marinett: ¡Buenos días!

Lourdes y Lou: ¡Hola!

Marinett se quedó quieta en el umbral de la cocina.

Marinett: ¿Adrien aún no se despertó?

Los dos negaron.

Marinett: ¡Ese dormilón! -se fue corriendo de la cocina a la planta alta.

Lourdes: Mira quién habla.

Rieron.

Lou: Bueno, debo irme -dijo mirando su reloj-. Es casi hora de clase.

Lourdes: ¡No se diga más! -se metió un pan con mermelada a la boca.

Lou la imita y salen de la cocina.

En la clase Lourdes se centró en hacer reír a Lou para hacerlo pasar vergüenza. Lo que consiguió, y este no paraba de reír.

Pasaron a las lecciones, Lourdes ayudaba y dirigía un poco también.
Marinett se encargaba de la enfermería.

Adrien por otro lado, algo de limpieza.

Todo iba de bien todo iba de lo mejor, pero todos sabemos que la felicidad y tranquilidad nunca...es estable.

En la tarde.

Lou: ¡Estoy a-ca-ba-do! ¡El día de hoy fue cansadooor! -dijo con un suspiro al final.

Marinett: ¿Acaso no tienes días libres?

Lou: Mañana es sábado, ya podré descansar.

Marinett: ¡Que bien!

Lourdes: Bien -contestó indiferente.

Lou: ¿Le ocurre algo? -le preguntó susurrando a Marinett y a Adrien.

Adrien: Estuvo buscando la máquina todo el día. Nosotros la ayudamos también, pero no la encontramos por ningún lado.

Lou se acercó dónde se hallaba Lourdes.

Lou: ¿Todo bien?

Lourdes: Más o menos.

Lou: ¿Por qué?

Lourdes: ¿Y a ti por qué te interesa? -le preguntó con un susurro.

Lou: Porque somos amigos y los amigos se apoyan mutuamente, ¿no?

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