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Estaba en mi última clase del día, específicamente de literatura, mi profesor llevaba una hora entera sin parar de hablar. Para ser sincera no se en que momento deje de ponerle atención, estaba más concentrada en el ruido de la lluvia cayendo, siempre me había dado tranquilidad, sentía una sensación de calidez y nostalgia al mismo tiempo.

-Leah

-¿Mande? –voltee hacía Jessia.

-Ya se acabó la clase, vamos –volee hacía mi alrededor percatándome que Jessia y yo éramos las ultimas en el salón.

-Lo siento, no me había dado cuenta –me levante del asiento, agarre mis cosas y salimos del salón.

-Chiara ya nos está esperando en la entrada de la escuela.

-¿Tan rápido?, pensé que tardaría un poco más en su clase.

-Salió antes que nosotras de su clase por eso ya está lista.

-Oh, eso es raro –normalmente nosotras la esperábamos a ella.

-Lo sé.

A lo lejos pude ver a Chiara usando su celular, estaba sentada en una de las bancas que se encuentran fuera de la escuela. Llegamos rápido hacía ella, nos saludó y minutos después nos pusimos en marcha para ir al centro comercial.

○○○○

-Jessia es como la décima ves que te decimos que ese conjunto se te ve muy bien –dijo Chiara mientras se sentaba a mi lado –verdad Leah.

-Concuerdo con ella –señale a Chiara –de hecho todos los conjuntos que te has probado te quedan súper bien.

Jessia soltó un suspiro y se nos quedó viendo a través del espejo –Lo siento por preguntar tanto –hizo una mueca –es que quiero verme bien para la cita, creo que Noan me gusta más de lo que debería.

-Que te guste Noan no tiene nada de malo –hablo Chiara –pero hay que admitir que Noan no tiene fama precisamente por durar en las relaciones.

-Chiara eso no ayuda sabes –creo que ha puesto más nerviosa a Jessia.

-Pero si no he dicho nada malo –comento en su defensa –hasta Jessia sabe que él no es un príncipe azul sacado de un cuento de hadas –la señalo.

-Aunque me duela Chiara tiene razón –con una mueca en su rostro, Jessia se giró hacía nosotras.

Después de esa pequeña conversación no volvimos a tocar el tema de Noan y su reputación. Estuvimos una hora más en esa tienda de ropa esperando que mi querida amiga escogiera un conjunto para su cita, al último se decidió por algo formal pero a la vez casual, una buena decisión ya que no sabía el lugar en donde se llevaría acabó la cita.

Empezamos a vagar por el centro comercial un rato hasta que nos dio hambre, habíamos decidido ir a una cafetería que habíamos visto unos momentos atrás. Caminamos de regreso para ir a la cafetería y una vez que la hayamos nos adentramos y fuimos directo hacía el mostrador a pedir nuestra orden, habíamos pedido algo sencillo, un café y una rebanada de pay.

-¿Nos sentamos en aquella mesa vacía cerca de la entrada? –voltearon a ver el lugar que había señalado.

Asintieron con la cabeza y nos dirigimos hacía el lugar, yo me senté viendo hacía la ventana, Chiara y Jessia se sentaron a mis costados. Nuestra platica había empezado con quejarnos de la escuela, de las tareas y algunos de nuestros compañeros pero por una cosa u otra terminamos hablando de lo genial que sería hacer una fiesta con temática mexicana, más bien con temática de Latinoamérica; la razón era simple, mis amigas aquí presentes nunca habían ido a Latinoamérica y yo siendo una persona con raíces mexicanas quería mostrarles lo genial que eran las fiestas allá, necesitaba verlas bailar reggaetón.

Algo Inesperado Donde viven las historias. Descúbrelo ahora