Un día normal en Los Santos, ciudad llena de personas que vivían el día a día como si fuera literalmente el último desatando el caos a su paso.
El jefe de los mecánicos de la ciudad se encontraba abriendo el taller temprano en la mañana como todos los días sin falta.
Sus ánimos estaban por los suelos, pues ayer se había ido hasta tarde del taller ordenando el desastre que sus empleados habían hecho y había dormido muy poco.
Soltando un suspiro cansado, avanzó a los vestuarios para colocarse su uniforme rojo representativo de jefe del taller.
Avanzó a su oficina donde se preparó un café y se sentó tras la computadora, encendiéndola y esperando unos minutos a que fueran las siete en punto para poder acceder a la aplicación de servicios.
"¡El taller mecánico se encuentra: abierto!"
[•••]
El taller llevaba su ritmo habitual, aunque sus empleados hacían un poco el loco, pero era lo de todos los días.
Ahora mismo Armando se encontraba terminando de reparar el coche de un cliente habitual.
–Ya estaría–
Armando suspiró y cerró el capó del coche comenzando a limpiar sus manos con un trapo.
–Muchas gracias jefe, ¿Cuánto sería?–
–Serían 100 la reparación–
Armando se dispuso a hacer la factura y seguido entregársela al chico.
–¡Ahí tiene!–
El chico pagó y se montó en su coche, marchandose del lugar.
El mecánico estiró sus brazos, y miró como comenzaban con una discusión en la zona de pintura con un cliente y su empleado más probablemático.
Emilio Escobilla.
–Ay no–
Murmuró para apresurarse a cruzar el taller donde Emilio y aquél chico discutían.
–¿Qué pasa aquí?–
Preguntó cruzandose de brazos, colocandose frente a ambos para llamar la atención de los dos.
–¡Jefe, qué éste tipo no quiere pagar!–
Se quejó Emilio apretando en su mano derecha una llave inglesa.
–¡No voy a pagar, es demasiado caro por una simple pintura!–
Exclamó molesto el hombre.
–¡Entonces para que me dice que sí cuando le dije los precios pendejo!–
Armando cubrió su nariz ante el fuerte aroma a tequila de Emilio, se estaba molestando demasiado y ya sabía a dónde iría todo.
–A ver, Emilio, cálmate, yo me encargo, ve a descansar–
Trató de tranquilizar al mexicano, quién simplemente asintió no muy conforme.
–Así es coletitas, déjame a solas con tu jefe anda, vete vete–
¡Clank!
–Me cago en la leche, ¡Emilio!–
Regañó Armando a su trabajador, quién miraba molesto el cuerpo inconsciente en el suelo.
–Lo siento jefe, ya sabe como soy–
Armando miró hacia donde el resto de personas, que rápidamente comenzaron a hacer un escándalo y claro, llamar a la policía.
–Llama a una ambulancia–
Suspiró frustrado una vez Emilio comenzó a sacar su celular para hacer la llamada.
¿No podía haber algún día normal en su taller, acaso era mucho pedir?
[•••]
Un patrulla se estacionó en el estacionamiento del mecánico, donde dos oficiales bajaron para observar el caos que había.
–¿Me repites que decía el aviso Horacio?–
–Un mecánico pegándole a un civil con una llave inglesa dentro del taller–
Leyó en voz alta el de cresta roja.
–¿Cuánto a qué es Emilio?–
Dijo divertido el rubio.
–Siempre es él Gustabo–
Ambos se abrieron paso entre la gente, para ver al jefe intentando socorrer al sujeto inconsciente y a Emilio guardando su celular.
–Ya viene la ambulancia–
Habló Emilio, recibiendo un asentimiento de cabeza de Armando.
–¿Qué pasó aquí?–
Ambos mecánicos voltearon rápidamente, mirando a Gustabo y Horacio de pie frente a ellos.
Armando se relajó al verlos a ambos y no cierto rostro de cierto superintendente gruñón.
–Oficiales, hubo un problema con éste sujeto de aquí, se negaba a pagar y, bueno- –
Intentó explicar Armando, siendo interrumpido por Emilio.
–Me lo cargué, había comenzado a insultarme–
Dijo sin filtros Emilio, pues a fin de cuentas todos lo habían visto, no tenía sentido intentar ocultarlo.
–Bueno señor, va a tener que acompañarnos–
–¿¡Pero porqué!?–
Y una discusión entre los dos oficiales y Emilio se comenzó a dar.
Armando suspiró, escuchando la ambulancia llegar.
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Bueno, este ha sido el primer capítulo de esta historia ^^
Las actualizaciones serán diarias ♡
Qué tengan lindo día!
Besitos!
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Llamado Especial-Armanway
Fiksi PenggemarConway, un alfa gruñón que disfruta de molestar a los mecánicos. Armando, un omega paciente que siempre cuida a sus trabajadores. Ambos atraídos silenciosamente por un llamado especial que hacían sus lobos al verse. __________ ↬Armanway. ↬Omegaverse...