Billete de Vuelta

dos

Observo por la vetanilla, Arizona por lo que tengo entendido es un lugar seco y caluroso; al igual que su paisaje, desde la carretera se pueden ver montañas. Montañas secas, áridas, de tono anaranjado.

— Te gusta? — dice Tyler observando mi perfil, lo miro.

A ver, no soy de paisajes secos, pero es bonito.

— No estoy segura, no estoy acostumbrada a estos paisajes, no se si me gustan demasiado — tampoco quiero ser tan sincera y directa, un poco mas sutil.

— No te preocupes, es normal, mi ex era de Florida; y odiaba Arizona — la verdad es que no se que pretende Logan, pero no lo está consiguiendo ni de coña.

— Tío si pretendes ligar, no le hables a nadie de tus exs, mucho menos de la última — me río.

— Espera, espera — se callan y me miran, menos Tyler que está conduciendo — adivino, se llama Jessica, Tiffany o Brittany — por su cara de sorpresa creo que he adivinado.

— Cómo? Pero, como coño lo sabes? — río por sus reacciones y me miran perplejos.

— Es ley de vida, cuál fue la afortunada? —

— Jessica, una grandísima hija de su madre, me puso los cuernos con su novio actual — auch, debió doler — no lo pasé demasiado mal, no llevábamos más de dos meses, no había casi sentimientos, no me va eso — carcajeó.

— Axel, hemos llegado — vaya, ni me había dado cuenta. La casa de Axel, supongo, es grande, más bien enorme.

Parece casi como una mansión, es de ladrillo de una especie de marrón muy oscuro, con el tejado negro, ventanas y columnas blancas; es alargada, de dos pisos creo. Tiene un porche al que se accede por un par de escalones, tiene dos sillones y una mesa de cristal.

— Hasta mañana Axel— dijo Logan, él solo asiente y se va.

Observo cómo se aleja, va con pasimonia hacia la entrada de su casa, abre la puerta y va hacia su interior.

— No te lo tomes muy a pecho, no le cae bien nadie — asiento y volvemos al camino.

— Es un poco ehh antisocial? —

— Sí, y un aguafiestas también — responde Logan.

— Te toca — dice refiriéndose al amigo que faltaba por llevar a su casa, al parar el coche frente a una casa de parece que dos pisos pequeña y bastante cuadrada.

También tiene porche, pero a diferencia de la otra, esta es muchísimo mas pequeña. Aún así no pierde el encanto de típica casa americana.

— Adios Logan — digo sonriente.

— Adios peli negra — ambos reímos — me has caído genial, espero que bajes con nosotros algún día — asiento y me despido con la mano.

— Genial, ya tienes tu primer apodo — dice mientras volvemos a la carretera camino a su casa, la que supongo que será mi casa durante los próximos 9 meses.

***

Ya hemos llegado, estamos aparcando en el garaje de la casa, el exterior es precioso, es muy parecida a la de Axel , pero un poco mas pequeña y blanca. Tejado negro y detalles en negro.

Nos bajamos del coche y fui directa al maletero para coger mis maletas pero Tyler se me adelantó y me las cogió él.

— Si mamá me ve con las manos vacías me mata — asiento y entramos juntos por la puerta del garaje — nerviosa? — pongo mala cara — no lo estés, mamá es un coñazo pero seguro que te caen genial —