Perdón, perdóname, a mi, que me perdí en un mar de lagrimas, hundiéndome sin poder salir, sin saberlo.
Perdón, me perdono, por no haberme dado el valor que tengo, que necesito y que exijo, por haber dejado que me hirieran.
Perdón, por haberte olvidado, por haberme olvidado de mi, de quien era, de lo que quería, me olvidé acordándome de que teníais que seguir, y yo poco a poco ir cayendo.
Me perdono, porque esto es un punto y aparte, porque me prometo que no volveré a olvidarme de mi, me perdono porque me priorizo, me perdono porque me quiero, porque ahora si que se quien soy, y tu?
Y justo en ese momento donde creía que nada podía ir a peor, donde lo daba todo por perdido apareció al fondo del océano un velero, la calma en medio de la tormenta, un rayo de sol en una tempestad, un Ángel de la guarda, mi ángel de la guarda, y fueron ellos los que me sacaron adelante, sin saberlo, a quienes les debo mi presente mi pasado y mi futuro, mi mejor casualidad.
Perdónate y sigue, no necesitas la aceptación de nadie más, solo la tuya. Priorízate, porque tú eres tu primera opción no la segunda de nadie.
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CONMIGO MISMA
SpiritualLa vida, con sus más y sus menos nos da lecciones, y nos enseña a aprender, escribo sobre ello, lo que es para mi el tiempo, el amor, el humano.... escribo para llegar a las personas, así que te invito a que les eches un vistazo.