Entono contigo - GiyuuShino

Entono contigo

—Cariño, pórtate bien y cuidado con lo que agarres ¿entendido?

—Mamá, no soy una niña.

—Shinobu, suelta ahora mismo ese florero.

Madre e hija estaban en la sala del hogar de los Tomioka.

—Si se porta mal, dale una palmada en la cola, Shoko-san.

—¡Mamá!

—No te preocupes, Nana-san, la pondré a lavar la loza si se porta mal.

Las dos madres se entendían muy bien.

Y tras despedirse, Nana Kochou deja a su hija, Shinobu, a cuidado de sus vecinos.

—Nana-san es tan linda.

—Cuando se enoja te dirá las peores verdades a la cara.

Shinobu hace muecas mientras se tira en el sofá doble que los Tomioka tenían en la sala. Su pequeña mano se desliza por las hendiduras de éste hasta toparse con el control del televisor, el cual estaba frente al sofá.

—¡...venceré antes de pase el ocas-!

Pasa el canal.

—¿Makoto-san volverá en la tarde?

La madre de la familia Tomioka, Shoko Tomioka, responde su pregunta con un "mhm".

—¿Todavía no te entrega el frasco?

—Kanae-nee-san me está preguntando por eso.

—Le recordaré hoy, seguramente ha olvidado vaciarlo.

Shinobu rápidamente se aburre de no ver nada entretenido en los 120 canales de la tv, al final se levanta del sofá y camina hacia la mesa en donde la mayor escribía.

—¿No hay avances?

—Nada relevante. Pensé que Kanae-chan encontraría algo más, pero si no es así...

—Mm...

Shoko Tomioka era farmacéutica y su trabajo actual era la investigación del último fármaco, el cual decían producía algunas alteraciones en personas con gripe. Su asistente era Kanae, la hermana mayor de Shinobu, quien ya cursaba segundo semestre de medicina.

—Bueno, algo encontrarán si es verdad.

Shinobu se rinde. Ella realmente no era de gustarle la investigación de fármacos.

De un vistazo rápido alrededor del salón, Shinobu se da cuenta que sobre uno de los muebles había un abrigo de color azul oscuro. Ella conocía su dueño.

—¿Giyuu-senpai está en su habitación?

—No ha salido desde que llegó esta mañana ¿puedes sacarlo?

—¡Déjemelo a mí!

—Cuando te cases con él te lo dejo.

La facilidad y seguridad con que lo dijo, aunque leía su investigación, causó en Shinobu una mueca de nerviosismo.

—Él es muy asocial.

—Solo le gusta estar solo.

La madre del joven "asocial" le sonríe.

—Acompáñalo.

—S-, Solo lo sacaré de su cueva.

Y antes de sufrir más vergüenza, Shinobu caminó por la casa y subió al segundo piso.

Avanzó por el pasillo, pasó por la segunda sala/comedor y tras girar a la derecha, llega a la habitación del joven de pelo negro e hijo de Shoko.

Sin tocar, abre la puerta.