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Disney...
¿Quien no sabe que es Disney hoy en día?
Donde lo primero que viste fueron a las hermosas princesas cantando y bailando, a los príncipes altos y guapos, y a los vil...
-entonces, escapaste de un malvado rey para luego subirte a un barco al azar, caminar sin rumbo alguno y llegar aquí ¿No?-dijo Cendri.
Yo asenti.
Resumiendo, le dije una mentira.
-¿Y no tienes donde quedarte y tampoco de comer?-pregunto.
-lastimosamente, no-dije bajando un poco la mirada.
El iba a hablar pero una voz algo aguda grito.
-¡Cendri!-
Mire hacia mi costado y vi a un chico peli-rojo y otro peli-negro.
-¡Cendri! ¡Apúrate en buscar...!-el peli-rojo dejo de hablar al verme.
El peli-negro también me miró, sus miradas son demasiado penetrante. Dios soy yo de nuevo... En eso la mirada de los dos cambio a una de interés.
¡¿Dios que te hice?!
-hola preciosa, soy Anastasio, y el es mi hermano Griseld-dijo.
-soy T/n-
Okey, el nombre Anastasio ya de por si es algo gracioso, pero en fin de cuentas sigue siendo un nombre.
-¡¿Estabas tratando de coquetear con esta hermosa chica?!-dijo, o más bien grito Griseld.
-¡¿Qué?! ¡Por supuesto que no!-dijo nervioso Cendri.
-por favor, les pido que no saquen conclusiones tan rápido, el solo me estaba ayudando-dije para luego acomodar un poco mi vestido-bien, muchas gracias Cendri, espero volver a verte otro día-hable mientras lo miraba.
El sonrió levemente entendiendo que trataba de no meterlo en problemas.
-no es nada señorita-hablo haciendo una mini-reverencia.
-fue un gusto conocerlos, Anastasio y Griseld-dije para luego comenzar a caminar.
Camine pensando en comida, hasta que me acordé de la panadería que había en la segunda película. Aceleré un poco mi paso, en dos minutos ya había llegado a esa panadería, entre y una campanita sonó, el olor de pan recién hecho invadió mis fosas nasales.
-me dio más hambre-dije para mi misma.
-¿Quieres probar?-dijo una voz tranquila.
Abrí mis ojos sorprendida al ver qué el "panadero" si cambio de género. Era una chica bonita, algo rellenita pero aún así es realmente hermosa.
-am...me encantaría-dije regalándole una sonrisa.
Ella se acercó y me estiró el pan, yo lo agarre y meti un pedazo a mi boca, rápidamente cerré mis ojos para saborear mejor.
