Capítulo 1 • Piloto

1.9K 93 64
                                    

Al igual que muchas catástrofes, todo comenzó con un acto de amor y de esperanza. Hank Pym viajó al reino cuántico en busca de su esposa perdida, Janet Van Dyne, pero en los 30 años que habían estado separados, Janet sufrió los peligros que yacen en ese microscópico lugar. El Cordyceps, es un hongo del reino cuántico que crece alrededor del cerebro de su víctima y acaba apoderándose de su mente y de su cuerpo. Janet fue víctima del Cordyceps, ya no era la misma y fue ahí, cuando ambos regresando al mundo normal, que todo empezó...

Meses Después

– Hay un pueblo al noroeste. Quizás ahí podamos encontrar medicinas para él – Steve estaba observando el mapa de brazos cruzados.

– Bien, haremos una expedición mañana ¿Qué tan lejos está? – Natasha tenía ambos codos sobre la mesa y podía notarse la preocupación en su voz.

– Un par de kilómetros, no muy lejos – respondió el Cap.

– ¿Y a quién enviaremos? – preguntaría Clint, quien observaba el panorama desde el sofá.

– ¿Qué tal a Parker y a Bishop? – la propuesta haría que los tres le lanzaran una mirada incrédula a Tony.

– ¿Enserio Tony? ¿Quieres enviar a los niños solos? – se notaba la disconformidad en Barton y el motivo era claro.

– No estarán solos, yo iré – dijo Steve, era algo importante y sabía que él debía ir.

– Yo también iré – Natasha no iba a quedarse sin hacer nada en una situación así.

– Solo decía que el chico araña y flechitas hacen un... buen equipo – se levantaría de su asiento para empezar a caminar alrededor de la habitación.

– ¿Por qué tanto interés en enviarlos a ellos juntos? – la pregunta era retórica, la pelirroja sabía bien lo que pasaba entre ellos.

– Si no les gusta la idea entonces enviemos a Belova junto a Bishop – diría encogiéndose de hombros.

– Sabes que ambas se acabarán matando entre sí y también sabes cuál es el motivo... ¿O debo decir "quién"? – Nat cambiaría su postura para recostarse sobre el respaldo de la silla.

– A mí no me miren. Parker es un baúl de emociones – se excusó Stark para después recargarse en la pared.

– Que raro, porque conmigo es muy abierto – Nat le lanzaría una mirada incrédula a Tony.

– Suficiente. Belova y Parker vendrán con nosotros – sentenció Rogers, ya un poco hartó de la charla. Sentía que estaban perdiendo el tiempo y no podían darse ese lujo – Saldremos mañana a primera hora. Si nuestras suposiciones son ciertas, no sabemos cuanto tiempo le quede – 

– Iré a avisarles – la pelirroja se levantó de la silla para encaminarse hacia la puerta.

Salió de la cabaña y dio algunos pasos cuando una brisa gélida recorrió su cuerpo haciéndola tiritar del frío, metió sus manos en los bolsillos de la chaqueta y empezó a caminar velozmente hacia la otra cabaña. Por el frío que tenía no se molestó ni en tocar la puerta. Entró en un abrir y cerrar de ojos para después empezar a frotar un poco sus heladas manos.

Ahí dentro se encontraba el resto del grupo. Kate estaba acurrucada en el sofá, junto a Peter y este la envolvía con uno de sus brazos. En el otro extremo del sofá se encontraba Yelena, con una expresión que denotaba su incomodidad. Wanda estaba sentada en el sofá individual, sosteniendo una taza de té entre sus manos y Hope, por su parte, estaba recargada sobre la pared.

Todos observaban los clásicos trucos de magia de Scott, a excepción de la rubia, quien hacía la mirada a un lado. El hombre hormiga empezó a hacer gestos de que iba a vomitar y acabó escupiendo la baraja de cartas que anteriormente había hecho desaparecer, lo que generó algunas sorpresas y risas entre los demás

Hope | Marvel Zombies Donde viven las historias. Descúbrelo ahora