El Cordyceps, un hongo que toma el control de la actividad cerebral de su víctima, se ha esparcido por el mundo entero, infectando a miles de personas y dejando millones de muertos a su paso.
Esta nueva crisis mundial hará que los Vengadores deban o...
Tras su pequeña charla con Natasha, Wanda se metió a la habitación que compartía con Kate. Lo primero que vio fue a la arquera recostada en su cama, tenía la mirada fija en el techo con una expresión frustrada.
– ¿Por qué la cara larga? – preguntó Wanda, se quitaría la blusa para ponerse algo más cómodo, quedando en sostén frente a Kate. No era nada raro, compartían habitación por lo que ya tenían esa confianza.
– Ya sabes porque – respondió fríamente.
– Y tú sabes que estuvo mal lo que hiciste – Kate no dio respuesta alguna, solo observó de reojo como Wanda se acercaba hacia ella – Dime una cosa Kate, ¿Tú lo sabías? Lo de Yelena –
La castaña resopló y se levantó bruscamente – ¿Por qué todos aquí piensan eso? – dijo con un tono molesto.
– Solo pregunté ¿De acuerdo? –
– Dime Wanda ¿Tú lo crees? – la castaña daría un paso al frente, quedando a centímetros de la bruja.
– No lo sé, Kate – bajó la mirada un segundo para ver como la arquera se mordía el labio frustradamente.
– Mira, tú puedes saber lo que siento con tus poderes, úsalos conmigo – diría en un intento de que la bruja creyera en ella.
Wanda suspiró pesadamente, cerró los ojos y levantó la mano, dejando salir un aura escarlata que iba desde la punta de sus dedos hasta la frente de Kate.
Meses atrás
Los Vengadores se estaban alistando para lo que quizás sea su última misión. Algunos ya estaban esperando en el Quinjet. Steve se encontraba fuera de este cuando vio a Tony llegar con un pequeño obsequio para él.
– Creo que esto es tuyo Cap – sujetaba con ambas manos un nuevo escudo para Steve, este lo miraba un poco indeciso.
– Tony, no lo sé – dijo dudando.
– ¿Por? Lo hice para ti – se lo extendería y tras meditarlo algunos segundos acabó aceptando.
Clint llegaría en ese momento, con su arco en mano y el carcaj repleto de flechas. Traía puesto un nuevo traje, era negro y tenía detalles en dorado.
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– Te queda ese look, Barton – bromeó Tony, pero Clint hizo caso omiso y subió al Quinjet sin decir ni una palabra – ¿Y a este que le pasa? –
– Perdió a su familia Tony, al igual que todos – dijo el Cap y seguidamente subió al jet, dejando a Stark un poco pensativo.
Tony ocultaba su angustia, pero eso no quería decir que fuera alguien frío. Empezaba a recordar a los que había perdido, Happy..... Pepper..... y deseaba que Parker no haya tenido el mismo destino.
