Una sola misión hizo que te conociera. Nunca me imaginé ser padre. Ni mucho menos cuando era un cazador, pero estoy seguro que todo el tiempo que estuviste a mi lado fue el más maravilloso de mi vida. Espero volverte a ver... Marin.
Kimetsu no Yaiba...
Paso dos día después de que Tanjiro le dio un cabezaso a Zenitsu. Las cosas ya se habían calmado un poco y ahora estamos en la habitación donde está Marin y Zenitsu. Desde ayer Zenitsu no ha podido ver a Nezuko, así que está un poco deprimido.
-Vamos papi. Si nos portamos bien el tío Tanjiro nos dejara ver a mami por un tiempo- Marin animaba a Zenitsu con una sonrisa. Ella era demasiado positiva.
-No creo. Ahora Nezuko duerme con el y ya casi no la deja sola. Es imposible que la veamos- Zenitsu volvió a hacer pesimista -¿Por qué no puedo ser feliz con una chica?-
-No te preocupes. Tengo la presencia que en otro mundo estás disfrutando tus días con una chica- Marin empezó a animar a Zenitsu.
-¿En serio? ¿Pero que tipo de chica se enamoraría de mi?- pregunto Zenitsu con la mirada baja. No esperaba una respuesta de Marin.
-Tal vez... Una chica pelirroja con dos adornos de estrellas en el cabello, y también que sea glotona- Marin se lo saco de una novela, donde un chico enamoró a unas quintillizas.
-Eso sería un sueño. Pero aunque eso sea verdad, ninguna chica del mundo se compara a Nezuko-chan- Zenitsu se deprimió más. Cuando recordaba a su novia hacia que se deprimiera más.
La puerta de la habitación fue abierta por alguien. Zenitsu no quiso mirar ya que pensaba que era Aoi o alguien de la finca. Marin por otra parte miraba con curiosidad al hombre que entró por la puerta. Vestía el uniforme de los cazadores de demonios, pero lo más curioso del cazador es que su nichirin era igual al de Zenitsu solo que de color negro.
-Quien lo diría. Así que las cartas que me enviaste no decían estupideces de que tenías una hija- dijo el hombre con burla -Estoy ansioso de ver cómo se te muere tu "hija"-
-Kaigaku...- Zenitsu frunció el ceño al ver a su compañero. Kaigaku miro con seriedad a Zenitsu.
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-Compadecerse de la vida de una niña no es tu prioridad. Eres un cazador de demonios, no una niñera- Kaigaku se acercó a Marin, Zenitsu al ver qué su compañero iba hacerle algo a su hija simplemente detuvo a Kaigaku.
-Dejala. No tienes el derecho de tocar a mi hija- Zenitsu estaba demasiado enojado. Kaigaku solo chasqueo con molestia la lengua.
-Imbécil ¿Con quién crees que diriges tus palabras? Recuerda que yo soy tu superior. No me importa una mierda que esa mocosa sea tu hija ¡Tú debes de cumplir con tu puta obligación de matar demonios!- dijo Kaigaku muy enojado. Agarro del haori a Zenitsu para golpearlo, pero el rubio detuvo con facilidad el golpe.
-¡No permitiré que me humilles otra vez, Kaigaku!- Zenitsu golpeó en la cara a Kaigaku, este último se quedó atónito al ver qué Zenitsu cambio mucho desde la última vez.
-Bastardo...- Kaigaku notaría que tenía un poco de sangre en su boca, por otra parte Zenitsu solo se maldecía ya que Kaigaku lo iba a matar - Solo recuerda esto... Si no entrenas adecuadamente nunca lograrás proteger a esa mocosa de los demonios. Cuando sepa que su padre es un inútil que solo llora se va a decepcionar-
