La elegida (Creepypasta)

13. Otra Mañana Más - Parte I

*Sueño*
-No me hagas esto, no ahora, ya no, ¡por favor! -escuché unos llantos provenir del cuarto de mis padres, era mi mamá.

Yo me levanté de mi cama, con los ojos aún entrecerrados por estar dormida.

¿Qué tiene mi mamá? ¿Por qué grita?

Caminé hacia al cuarto de mis padres, y de un momento a otro, la puerta del cuarto de mis padres salió volando en miles de pedazos, haciendo que unas cuantas partes de la puerta me golpearan, y fue ahí que me encontré la mirada de mi padre, su cara estaba roja, parecía estar enojado.

Fui corriendo hacia al cuarto para ver cómo estaba mamá, y ella estaba sentada en la cama llorando, mientras se tocaba su vientre, donde cargaba dentro a mi futuro hermano, el cuál ya no tardaba en nacer.

-Mami, ¿por qué lloras? Ya no llores, aquí estoy yo -dije mientras le secaba sus lágrimas, lo cual era estupido, porque salían más, así que mejor la abracé muy fuerte.

Luego se escuchó un golpe en la pared muy fuerte, volteé y era mi papá aventando pedazos de la puerta destruida hacia la ventana, lo cuál parecía que intentaba romperla, pero ningún intento funcionó.

-¡Me tienes harto! -dice mi papá saliendo del cuarto, sin antes golpear la pared de la entrada del cuarto.

-Y yo no voy a llevar a June a la escuela. ¡No puedo!-dice mi padre en algún lugar de la casa.

Mi mamá me mira, y me sonríe de una manera forzada.

-Corre, ve vístete, no quiero que llegues tarde a tu primer día de primaria -dice ella.

No sabía que sucedía, no comprendía mi mente tan chiquita y tan infantil. Antes de regresar a mi cuarto, abracé la panza de mi mamá.

-Te quiero, hermanito -le doy un beso en su vientre.
Me cambié y devoré el desayuno que mi madre me había preparado, y de ahí mi mamá me llevó a la escuela.

-Adiós June, te quiero mucho, y suerte -dice mi madre dándome un beso en la mejilla. La miro, y una lágrima corría por su cara.

Horas pasaron en la escuela, cuando por fin llegó la hora de irme a casa otra vez.

Tomé el camión, y no sabía dónde sentarme, porque todos los lugares estaban llenos.

-Hey, siéntate conmigo -me dice un niño muy lindo de ojos verdes, y con pecas en su rostro.

-Soy Robin Perez, ¿cuál es tu nombre?

-Yo soy June Casanova -entré en confianza rápidamente.

-No tengo muchos amigos en la escuela, ¿quieres ser mi amiga? -me pregunta y yo asiento felizmente.

Cuando bajé del camión, Robin igual había bajado al mismo tiempo que yo, porque al parecer él vivía cercas de donde yo.

Caminé hacia mi casa y toqué a la puerta, la cual nadie me abría. Toqué muchas veces sin parar, pero nada.

¿Ahora qué?

-Intenta subirte a la valla, así por lo menos esperas en el jardín -aparece a un lado mío Demian.

-Pero no voy alcanzar, está muy alto, puedo caerme y lastimarme -dije mientras miraba la valla que estaba a un lado de la casa.

-Yo te ayudo a subir -escucho la voz de Demian a lo lejos, y él ya estaba en frente de la valla esperando a que pusiera un pie en su mano.

Lo miro y me sonríe.

-¡June! -grita la voz de un niño detrás de mí, y miro que es un viejo carro rojo, y adentro estaba Robin y al parecer su padre.