Regresé a casa y me costó bastante concentrarme en organizar la información. Mi mente divagaba de forma incontrolable.
Junpei me había dejado claro que no quería sostener una amistad conmigo y hoy me invita a ver una película el fin de semana.
Estiré mis cabellos y grite contra la almohada, lo que estaba pasando me hacía sentir emocionada y al mismo tiempo confundida.
Pensé que no tenía forma de comunicación con Junpei, las veces que lo he visto ha sido por casualidad.
Arregle los últimos detalles de la tarea y mi cuarto para cenar y dormir temprano, mañana me levantaría más pronto de lo normal y la viva esperanza de encontrarnos caminando como ayer sería suficiente./////////////// /////////////////////////////
Efectivamente desperté temprano y desayuné lo más rápido que mi cuerpo me permitió. Salí corriendo por la puerta y recuperé el paso tranquilo al girar en la esquina de siempre.
Sentía una felicidad crecer en mi pecho y en ese instante, reflexioné ante mis acciones y me pregunté...¿Qué pasará si me lo encuentro? ¿Qué le voy a decir?. Me detuve sintiendo que la sangre bajaba hasta mis pies. No tenía el valor de recordarle lo que platicamos ayer.
Continué caminando hasta llegar a la escuela, posteriormente esperé en la entrada hasta que se hizo la hora, pero Junpei nunca llegó.
Entre a mis clases y Leyna se acercó conmigo a preguntar si había podido copiar la información.Tn: si, te entregaré tu cuaderno.
Caminé hacia mi asiento mientras ella rodeaba mis hombros con su brazo.
Leyna: Tn, siempre eres tan aislada, tendrías más amigos si hablaras más seguido.
Tn: Lo siento Ley, no estoy interesada en hacer amigos.
Ley se separó de mí para tomar su cuaderno y me sonrió antes de irse a su lugar.
Pasé las clases tomando apuntes porque no podía retener la información de forma auditiva. Mi mente estaba llena de preguntas y pena sobre lo que pasó con Junpei.
Al salir del salón sentía los murmullos de mis compañeros y sus risas se colaban en mis oídos. Tragué saliva al darme cuenta de que me miraban a mí, no había duda, ni siquiera evadían mi mirada, sus ojos me observan fijo mientras escucho el sonido del cuchicheo detrás de las palmas de sus manos intentando cubrir sus bocas, como si fuera un secreto. Es evidente que me doy cuenta y actúan como si no existiera mi consciencia, tampoco les molestan mis gestos de desagrado.
Al llegar a la puerta, Leyna me detiene.Leyna: Llega con bien a casa tn.
Me dió una palmada en el hombro y escuché el crujir de una hoja de papel. Inmediatamente supe que ocurría. Leyna puso algo en mi espalda cuando me abrazo antes de clase.
Suspiré con enfado y cansancio para ir al baño.
Estrujé la hoja de papel que colgaba con un trozo de cinta en mi suéter y espere a llegar al baño para leerla."Soy patética"
La nota era la patética, demasiado estúpida. Suspiré y tiré a la basura dicho papel.
Prolongué el tiempo en el baño para no encontrarme con mis compañeros de clase camino a la salida.
Caminé tranquila por la calle y divisé el cabello rosa de un chico que me resultó familiar.Tn: Es él...el chico del otro día.
Lo dije en voz baja y después continúe caminando por la misma acera que él. En pocos pasos lo tendría de frente.
Pensé una y otra vez en saludarlo, pero el sentimiento de vergüenza por lo que ocurrió cuando nos conocimos me lo impedía.A escasos centímetros de él me miró fijo y sonrió.
Itadori: Yo te conozco, eres la chica que cayó al suelo el otro día jajaja. -extendió la mano para saludarme. -No me presenté, mi nombre es Itadori Yuji.
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La última vida
Romance¿Cuántas vidas estarías dispuesta a sacrificar por el amor de tú vida?