Nuestra Familia (Spirk) // (Kirk x Spock)

CAPITULO 4: FRUSTRACIONES

A Leonard McCoy le agradaban los jonquilianos. Eran criaturas honestas y educadas. Por no mencionar que eran demasiado adorables. Nunca lo admitiría, pero los pequeños eran lo más lindo que había visto en su vida, por supuesto, aparte de su hija Joanna.

Ellos incluso le habían enviado una explicación completa del suero de la verdad que les habían dado a Jim y Spock para estar seguros de sus buenas intenciones y que no mostraran alguna intención maliciosa. Eso era simplemente una forma admirablemente e inteligente de garantizar su seguridad.

Sí, al doctor McCoy le gustaban mucho los jonquilianos... Mucho más que el humano y el vulcano porque ambos seguían negándose ferozmente a dejarse examinar por él. Esos dos estaban obviamente decididos a volverlo completamente loco.

Observó cómo el capitán y su primer oficial salían de la enfermería con cierta incomodidad y se preguntó qué haría falta para que finalmente admitieran sus sentimientos el uno al otro.

***

Había sido incómodo el primer día, pero Jim confiaba en que él y Spock podrían reanudar su amistad sin que la noche de sexo inducida por los afrodisíacos los perjudicara. Jim estaba contento de que Spock hubiera reanudado su contacto casual y ya no rehuyera sus caricias.

Spock estaba seguro de que su amistad había salido ilesa. Los primeros días habían sido difíciles, sus escudos eran débiles y se había visto obligado a alejarse de todas las caricias de Jim, a pesar de que parecían alimentar su alma. Y se alegró de que hubieran podido volver a su antiguo patrón.

Pero, Spock no se sintió muy complacido cuando la teniente Nyota Uhura lo acorraló al terminar su turno unas semanas después del incidente en Jonquilius.

"Spock, sé que rompimos porque nada de nosotros era compatible. Pero ¿en serio?", susurró enfadada.

"Nyota, no entiendo el significado de tus palabras", respondió Spock secamente. A menudo no sabía cómo entender los arrebatos emocionales que a veces le obligaba a soportar esta mujer.

"¡Tú y el capitán!", dijo ella entre dientes. "¡Ni siquiera intentes negarlo! Veo la forma en que lo miras, estás completamente enamorado de él".

"Nyota, tus afirmaciones..."

"Mis afirmaciones son válidas y lo sabes", dijo ella en un tono fuerte. "¡Sólo quiero saber por qué ustedes dos se dedican a mirarse el uno al otro y no hacen nada al respecto!"

"Nyota, aunque puedas tener una visión de mis... sentimientos, no tienes acceso a los del capitán, y si lo haces encontrarás..."

"¿Qué? ¿qué no te corresponde? Eso es una tontería". gritó Nyota, haciendo que los alféreces que caminaban por el pasillo la miraran confundidos. "Mira, sé que eres orgulloso y que probablemente estés metido hasta el fondo en la negación, pero confía en mí Spock. Él te quiere. Y creo que él es el adecuado para ti", sonrió. "Lo de nosotros no pudo funcionar, pero lo de ustedes dos... lo de ustedes tiene potencial".

Spock se salvó de contestarle gracias a Jim, que se acercó a ellos sonriendo ampliamente y le saludó con una palmada en el hombro.

"Oye Spock, ¿has oído cuáles son nuestras órdenes? Tenemos que transportar cosas, oh rayos, ¿no es emocionante?", dijo sarcásticamente.

Jim parecía que prefería caer muerto a cumplir las últimas órdenes de la Flota Estelar. Era evidente que iban a ser unas semanas muy largas.

Uhura los vio alejarse y sacudió la cabeza con exasperación. Aquellos dos estaban tan sumidos en la negación porque estaban prácticamente ciegos. Ella iba a necesitar ayuda.

***

"Se a lo que te refieres Nyota, pero realmente no hay nada que pueda hacer", dijo McCoy con una sonrisa. "Esos dos, a pesar de sus grandes coeficientes intelectuales... pueden llegar a ser realmente estúpidos a veces".

"Puedes decir eso una y mil veces", suspiró Uhura. "¿Qué hace falta para que uno de ellos se trague su estúpido orgullo?"

"Aparentemente, nada más que una intervención divina", dijo Bones encogiendo los hombros. "Y sabes, allá en Jonquilius... les dieron un suero de la verdad. Algo les pasó allí abajo... no sé qué, pero se comportaron de forma muy extraña los primeros días que regresaron. ¿Crees que uno de ellos dijo algo?"

"Si han vuelto así, lo más obvio es que no", comento Uhura colocando sus manos en el aire en señal de frustración. "¡Hará falta un milagro para unir a estos dos!"

"Probablemente", coincidió McCoy con una mueca, pensando en lo que daría por un milagro ahora mismo para esos dos.

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Hola a todos! ¿Cómo están?

Espero que le agrade esta actualización. Jim y Spock pueden llegar a ser realmente tonto. Esperemos que pronto digan sus sentimientos.

Abrazos! 💗💗💗💗💗