sunflowers for you -espressline

🌻🌻

3:45 a.m.

el viento fresco soplaba, espresso no podia dormir pensando en lo ocurrido ayer (aparte de porque tenia insomnio) ¿realmente son amigos? ¿realmente quiere ser amigo de el?

4:05 a.m.

seguia sin poder dormir, asi que fue a la cocina por una taza de cafe, si no podia dormir no iba a desperdiciar valiosas horas de trabajo y estudio simplemente mirando hacia el techo. Se puso de pie y caminó hacia la cocina, se detuvo a el escuchar un sonido de una puerta abriéndose, el no creia en fantasmas, pero...

-¿que mierda fue eso?- penso asustado- talvez se trate de una broma de mal gusto. O talvez fue mi mamá...pero el cuarto de mi mamá esta de el otro lado...ok pudo haber cambiado de cuarto, pero...- las preguntas no dejaban de surgir en su cabeza- mierda espresso! desperdiciaste minutos valiosos de trabajo, imbécil!- penso dando media vuelta y empezó a caminar a su habitación.

6:00 a.m.

despues de largas horas de trabajo, su madre le llamo para ir a desayunar, tomo sus zapatos y se bajo a la cocina.

-al parecer no te enfermaste por la lluvia de ayer, ¿saldrás hoy?- preguntó su mamá.

-probablemente. hay un lugar que queria ver, al parecer este pueblito no esta tan mal después de todo.- respondió dandole un sorbo a su taza de cafe.

- te lo dije- contesto con una sonrisa- me alegra que te haya gustado, solo recuerda llevar un paraguas, no ha parado la lluvia.

9:08 a.m.

espresso salio de su casa dispuesto a ir de nuevo a ese campo de girasoles. cuando llegó notó que no estaba el chico rubio de ayer ahí, lo busco por el campo de amapolas y tampoco estaba. se sento en una roca abajo de un arbol dispuesto a esperarlo. cuando vio una silueta a lo lejos acercándose ahí. supuso que era madeleine, pero al verlo de cerca vió que era un señor, al parecer un granjero de una granja que quedaba no tan lejos de ahí.

-buenas días niño! nunca te habia visto aquí. ¿estas esperando a alguien?- cuestionó el amable granjero deteniéndose enfrente de el.

-uh, si... si estoy esperando a alguien- respondió con timidez

- supongo que esperas a madeleine ¿cierto? el es un chico muy social jaja- afirmó aquel hombre -bueno, no le he visto tan temprano por aquí, normalmente viene entre las doce y la una de la tarde.

-oh, ya veo... bueno, muchas gracias

-por nada! fue un placer- hablo aquel hombre para después dirigirse a su destino.

a lo lejos espresso ve otra silueta, esta vez ve que se dirige mucho mas rapido que la otra, cuando la ve mas cerca nota que es madeleine, venia corriendo con dos mochilas en cada mano y un paraguas que lo sostenia su cuello. se sorprendió al ver a espresso ahí.

-espresso! se supone que yo deberia haber llegado antes que tu, de hecho pase por tu casa y tu madre me dijo que habias salido!- exclamó agitado madeleine- pero mira! traje comida, agua, algo para sentarnos, una casita de acampar para taparnos de la lluvia, dos paraguas y-

-espera espera espera, ve mas lento rubio, ¿todo eso lo trajiste solo para los dos? ni que fuera una cena, pero se agradece el motivó- expresó con una sonrisa- todo esto lo compraste tu?

-no, algunas cosas estaban en mi refrigerador o ya las tenia en mi casa, también me desvelé preparando galletas! la mitad se quemaron... ¡pero estan buenas!- afirmó madeleine- ¡también compre dona glaseadas! debes probarlas, son la cosa mas deliciosa que puede existir en este pueblo!- aseguro sonriente madeleine

empezaron a preparar la casa de acampar y la comida bajo el mismo arbol para estar un poco mas secos.

-y dime espresso, ¿porque decidieron venir aquí?- pregunto madeleine