Capítulo ⁴

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Era un lunes y ya había pasado al menos una semana y media, el peli-plateado siempre buscaba a la pelinegra a la hora del receso para comer con sus amigos aunque ella aún sentía algo de pena pues no estaba acostumbrada a convivir con tantas person...

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Era un lunes y ya había pasado al menos una semana y media, el peli-plateado siempre buscaba a la pelinegra a la hora del receso para comer con sus amigos aunque ella aún sentía algo de pena pues no estaba acostumbrada a convivir con tantas personas, y si para ella cuatro personas es mucha gente

La hora de salida había llegado y ambos chicos estaban en el salón de arte, la más baja estaba pintando en un lienzo mediano mientras el otro chico estaba sentado mirando su celular en una de las mesas más cercanas a la chica

—¡Oh genial!—Ese grito rompió bruscamente el silencio que había, ocasionando que la chica se asustara y tirará el pincel que llevaba en mano, ella lo miro con un puchero pequeño y el ceño levemente fruncido—L-lo siento

—...—Ella relajó sus facciones y levanto el pincel para luego mirar al causante de sus susto—¿Que viste?

—¡Esto, mira!—Yatora se acercó a ella mostrándole la pantalla de su celular—Es una competencia de dibujo, ¿No sería bueno entrar?

—¿Competencia?— Ladeó su cabeza a un lado mostrando su confusión—¿Quieres participar?

—No no, lo decía por ti— Ella aún más confundida se apuntó a si misma con su dedito indice— Si, aún no me has dicho en qué universidad estarás, sería bueno que entraras, los primero lugares aparte de su premio, recibirán distintas solicitudes para diferentes universidades de arte

Anna aún no entendía el porque Yaguchi quería que ella participará, la verdad era que aún no se decidía donde quería estudiar, aún dudaba de ella misma, tenía el miedo de participar y no quedar ni siquiera cerca de los primeros lugares

—Uh, no lo sé, no estoy segura—Le menciono la bajita— ¿Y si no gano?

—Lo importante es que vean tu talento— Respondió entusiasmado—¿Que dices? Eres increíble para esto, mira acabas de terminar de pintar un conejo casi realista, esto es perfecto para ti

—Aun no lo sé, pero déjame pensarlo

—Esta bien—Miro su celular una última vez— Ya está tarde ¿Te acompaño a tu casa?

Ella asintió suavemente y comenzó a recojer y guardar sus cosas, ambos tomaron su mochila y se dirigieron a la salida, cuando estaban cerca se fijaron en una silueta masculina en la entrada, la más bajita la reconoció y suspiro pesadamente, esto no paso desapercibido para Yatora

Al estar a unos pasos la silueta de dio vuelta para reflejar a quien menos quería ver ahora

—Al fin sales, te estabas tardan- ... ¿Quién es el?— Se interrumpió a si mismo el dueño de dicha silueta, Kuroto

—Ah, soy Yatora Yaguchi, un placer soy amigo de Anna—El platinado se presentó extendiendo su mano para apretarla

¿Su amigo? Si claro—Susurro para si mismo pero igual Yatora lo escuchó, rechazo la menos del platinado— Si como sea, soy Kuroto, bueno andando tengo una nueva idea de un cliente

"¿Cliente? ¿Acaso ella vende sus dibujos?" Fue lo que pensó Yaguchi, aún con sus dudas los tres se encaminaron a la casa de la fémina mientras que Kuroto hablaba hasta por los codos de sus ideas, que claramente era ignorado por la única chica

Estando cerca a la casa de Anna, pudieron apreciar como de está salía un muchacho más alto que ellos, sus rasgos faciales eran casi idénticos a los de la chica solo cambiaba el color del cabello que era de un color café, este chico tenía una mochila en la espalda y una maleta en mano, en la puerta estaba parada una mujer con el cabello café y ojos negros

Los tres chicos se acercaron hasta la puerta llamando la atención de las otras dos personas, el más alto sonrió cuando vio a la pequeña chica y se acercó a ella no sin antes dejar en el suelo la maleta

—Mi pequeña Nana, menos mal que llegaste para despedirte de mi—Se agachó a su altura y comenzó a acariciar los cabellos negros de la chica— Pensé que ya no iba a estar cuando volvieras

El chico dejo de prestar atención a Anna para miras atrás de ella, y cuando vio a los dos chicos cambio su semblante a uno serio, reconoció a Kuroto pero desconocía totalmente al otro chico, su mirada se poso en el y Yatora se puso nervioso pues era mucho más alto que el

—Y tu ¿Quién eres?—Estando frente a el cruzó los brazos sin apartar la mirada del platinado

—¡E-eh! Soy Y-yatora Yaguchi—Se presento con nerviosismo

—Suyiko, lo intimidas—Le dijo la bajita y el la miro—Es mi amigo, Yatora el es mi hermano mayor

—Suyiko Isikawa, tal vez sea un gusto—De ahí los ignoro a ambos para ahora acercarse a su hermana otra vez— Bueno Nana me tengo que ir ya, o perderé el vuelo, nos vemos y cuida a Tutso por mi ¿Si? Bien, adiós, ¡Adiós mamá!

—¡Adiós cariño!—Dijo la mujer que había estado ahí todo el rato presenciando los celos de su hijo mayor, quien ya había agarrado su maleta y estába camino al aeropuerto— Y dime pequeña, ¿Quién es tu nuevo amigo?

Anna dejo de ver el camino donde había ido su hermano para mira a Yatora, se acercó a él, tomo la manga de su uniforme y comenzó a jalarlo para acercarlo a su madre, Kuroto también se acercó a ellos

La bajita se le quedó viendo unos segundos tratando de decirle que se presentará, el entendió

—Buenas noches señora Isikawa, soy Yatora Yaguchi un gusto

—Es también un gusto—Luego miro a Kuroto y lo saludo algo fastidiada con una sonrisa no tan real—Hola Kuroto

—Buenas, señora

Luego la mamá de Anna miro a Kuroto y después a Yatora, así por unos segundos hasta que se le ocurrió una idea, los miro con una sonrisa a los tres

—Me gustaría conocerte más Yatora, así que los invito a cenar a ambos ¿Que dicen?

—Si está bien señora—Dijo Kuroto

—Y-yo...—Anna le jalo suavemente la manga de su uniforme, con seguridad acepto—Esta bien, acepto su invitación

—¡Bien! ¿Les parece mañana?

—Yiko se enojara si no está presente—Menciono la pelinegra

—Oh es verdad, y tampoco estará tu padre, bien ¿Que les parece el sábado?—Ambos aceptaron— ¡Excelente! Entonces nos vemos el sábado a las 7:00 PM, bueno mi niña despídete de tus amigos

—...—Ella asintió y volteo a ver a sus dos amigos— Nos vemos mañana Yatora, adiós Kuroto

Ambos también se despidieron de las mujeres, los varones tomaron un camino diferente, Anna se adentro a su casa pero su mamá se quedó observando el camino donde había ido Yatora

"Veamos si tú también eres igual a ellos, te pondré aprueba Yatora" y con ese último pensamiento entro a su hogar

"Veamos si tú también eres igual a ellos, te pondré aprueba Yatora" y con ese último pensamiento entro a su hogar

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