Su llegada a Suna no fue lo que esperaba.
Él llegó a la Aldea Oculta de la Arena cuando el sol ya estaba puesto y el calor empezaba a quemar. En la entrada se encontró a la hermana del Kazekage, Temari, y junto a ella, dos ninjas que parecían ser jounnis. No había ninguna señal del chico pelirrojo, por lo que en parte de tranquilizó un poco.
Sin embargo, la chica rubia no le dio chance a seguir calmado pues de una, además de revisarle todo, lo amenazó y si de algo conocía la chica, era que no decía meterse con ella.
La mayor lo guió hacia la torre donde seguro se encontraba el Kazekage, y tuvo que pasar otra revisión antes de ingresar a la oficina de Gaara. Una vez ya hecha la inspección, el jounnin le señaló la puerta, lo cual él entendió que debía ingresar.
Empujó la puerta roja y lo primero que sintió fue la mirada sigilosa proviniendo de unos ojos colores turquesa claro. Se adentró y a sus espaldas cerraron la puerta, dejándolo solos a Gaara y a él. La tensión se sintió de inmediato, y Sasuke decidió mantener su expresión neutral.
-Hola, Sasuke. Ven, siéntate.- saludó e invitó con gentileza el pelirrojo, señalando las silla que tenía adelante del escritorio.
Él correspondió el saludo con un pequeño asentamiento y se acercó hacia el sitio que había indicado el otro.
-Al parecer estás en problema, otra vez.- fue lo primero que dijo una vez ya en su asiento.
-Eso parece.- fue una respuesta corta pero no sonó grosero, así que se encogió de hombros y se cruzó de brazos, esperando a que Gaara continúe.- El Hokage debe haberte ya dicho la situación por la que atraviesa Suna y la situación no hace más que empeorar.-lanza un suspiro el mayor y lo mira fijamente.- desde la última vez que hablé con el Hokage, a través de Naruto, las cosas han ido empeorando para los ninjas que hacen guardia en las murallas. Al parecer, la mayoría de ellos, han sido envenenados por componentes que conocemos, pero la reacción del veneno en el organismo es tan rápido que es imposible salvar a todos los que fueron dañados.
-Esta pequeña "rebelión" de renegados ya está comenzando a cobrar vidas. Lo más conveniente sería que no sólo solicites ayuda de Konoha, sino de tus demás aliados.
-He tratado, pero ninguno de mis halcones entrenados han llegado a los demás Kages. Él único que ha llegado es a Kakashi-san pero no tuve que mandar a tres halcones para despistar a quien sea que esté interfiriendo mis mensajes.- Sasuke asintió y lo dejó seguir.- por otro lado, Konoha es la única en la que puedo confiar por ahora.
El pelinegro entrecerró los ojos y comentó.
-No deberías confiarte tanto de Konoha por saber que alguien ha imitado un kunai de la Aldea. Podrían ser ellos mismos y solo tratan de despistarte. Además, es la Aldea más cercana a ti, no veo por qué no podrían atacarte de forma más rápida como lo hacen estos renegados.
-No sabía que habías venido en contra de Konoha.
-No lo estoy, solo soy objetivo.
-Pues no creo que sea Konoha quien esté ayudando a los renegados. Para empezar, con Kakashi-san tenemos un tratado confidencial que le es casi imposible romperlo. Y si piensa hacerlo, no solo un sector muy importante de Konoha caería, sino que su hospital sería tan ineficiente que no soportaría un ataque en respuesta de mi Aldea.- contestó un poco egocéntrico Gaara, ya que en cierta parte, tenía un poco de su mano al sector de salud de Konoha.- Además, tanto como para Konoha y para Suna, nuestro acuerdos son los más sólidos y beneficiosos que sería perjudicial romperlos.
-Tienes un poco de la cuerda a Konoha con su sistema de Salud, eh.
-Tras la Guerra, muchos de los recursos que tenían han sido gastados y sus abastecimientos no han logrado cubrir las necesidades de Konoha. Yo solamente ví la oportunidad y la aproveché.- respondió con una pequeña sonrisa burlona y se recostó en el respaldar.
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CORAZONES LASTIMADOS / SASUGAA
ФанфикLa nueva paz entre las Aldeas había sido impuesta tras la victoria de la Alianza Ninjas sobre Kaguya. Sin embargo, no todos están de acuerdo con la nueva Alianza. Los ataques empiezan y nuevos grupos rebeldes se forman. Los primeros altercados comie...