Capitulo 1

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Decepción, dolor, rabia, tristeza, estos y más sentimientos se podían observar en los ojos azules de una joven que observaba desde lejos como el hombre que quería y que supuestamente este la amaba a ella casándose con otra mujer. Ella no podía evitar sentir esos sentimientos, pero no era para menos, le había entregado todo a aquel chico y lo único que recibió a cambio fue traición y dolor. Quizás ella pudiera entenderlo si desde un principio él le hubiera dicho que ya no la quería, que no la amaba, que se interesó por otra mujer, entonces ella solo lo hubiera dejado libre, pero no, jugó con ella, se aprovechó de su debilidad, le prometió falsas promesas, un falso amor y para terminar la engaño con la misma mujer que una vez antes que ella fue novia del chico, si, se estaba casando con su exnovia. Esto no solo la decepcionaba más, sino que también la llenaba de ira y dolor pues aquella mujer fue quien dos meses atrás provocó que ella perdiera al bebe que estaba esperando.

La joven estuvo unos minutos observando la "gran" celebración que se llevaba a cabo sentada en una colina, su mirada era perdida, pero en su mente solo había un caos, por un lado, pensaba que ya nada valía la pena que era mejor irse y comenzar en otro lugar, pero por otro lado su mente exigía vengarse de aquellos dos que arruinaron y destrozaron todo de ella, las ganas de terminar con ellos de preparar el arco que tenía en sus manos y lanzarle dos flechas a cada uno.

-Ssss... Ssss...- es sonido de una serpiente se escuchó a su alrededor, cuando miró a un lado de ella en el suelo, se encontraba una serpiente color negra la verdad no era tan pequeña aproximadamente podría decirse que media unos 2 o 3 metros y tenía unos ojos verdes que mostraban mucha maldad- Ssss una dulce jovencita Ssss...- habló aquel animal, esto no la sorprendió mucho ya que era normal encontrarse con criaturas así, o mejor dicho demonios, después de todo la época feudal de Japón es conocida por la cantidad de deidades y demonios que habitaban en el mismo lugar que los humanos. En esa época tanto los humanos como los demonios evitaban relacionarse entre ellos, pero no siempre era asi algunos demonios si llegaban a relacionarse con humanos y viceversa ya sea por bien o por mal.

La joven secó sus lágrimas sin dejar de ver a aquel demonio...

-¿Qué es lo que quiere?

-Ssss no quiero nada... Ssss simplemente me llamó la atención ver a una joven tan linda... ahogarse en lagrimassss...- comentó la serpiente acercándose más a ella, la joven no se movió solo cambió la mirada a otro lado

-No es nada, déjeme tranquila- pidió sin mirar, la serpiente no satisfecha miró el lugar a donde la joven miraba hace rato y sonrió con maldad

-Mmm veo...que algo no te agrada Ssss... no esss asi... pequeña- la serpiente se deslizó hasta quedar sobre el regazo de la chica, esta miró a la serpiente, ambos se miraron por unos segundo- Ssss sufres por esa boda... no es cierto

- ¿Co...como lo sabe?

-Mmm no subestimessss a mi intuición pequeña, con solo ver tu mirada... puedo adivinar qué es lo que te atormenta ssss...- la serpiente subió por el cuello de la chica colocándose sobre sus hombros- Ssss ... por qué mejor... no te desahogassss conmigo.... Yo te escuchare...- en ese momento la joven dudo, pero no tenía con quien hablar y de verdad lo necesitaba, por lo que decidió confiar en la serpiente demonio y contarle sus problemas....

-.... Y eso es todo- terminó contando la chica derramando lagrimas- No sé qué hacer, desearía no ser tan débil...

-Mmm ssss si eso es lo que en realidad deseassss.... Puedo ayudarte, te ayudare a no ser débil.... Y asi podrás vengarte de esos dos- propuso la serpiente ganándose la atención de la chica- Serás fuerte en todos los sentidosss... asi nadie podrá pisotearte y harassss que los que te dañaron paguen por lo que hicieron...

-De verdad lo haría?

-Ssssi... puedo ver en ti algo especial- comentó la serpiente cuyos ojos verdes brillaron- Eres una chica fuerte, pero algo te detiene, te trasformare en tu versión más fuerte, no volverás a sentirte débil nunca más- diciendo esto bajó al suelo- Solo tengo un precio...

-Mmm ¿un precio?...

-Si... ssss- la serpiente se alzó- Te daré lo que deseassss a cambio me traerás las joyas cardinales...

- ¿Qué? - la chica lo miro con los ojos abiertos- eso es imposible.... Esa...esas joyas estan protegidas por los señores demonios de cada punto... no puedo...- la chica fue interrumpida

-Ssssi puedesss.... Te daré todo lo que necesitassss... solo debess aceptar el trato...- hubo unos segundos de silencio- Pero si no lo deseassss no hay problema, ya es hora de marcharme...- dicho esto la serpiente comenzó a irse camino al bosque dejando atrás a la chica. Esta se quedó allí observó a lo lejos como los recién casados disfrutaban su momento, llevó una mano a su vientre y su mirada se endureció, se levantó

-Espere! – llamó a la serpiente, quien se detuvo sin voltear a verla- Lo hare...- habló decidida, la serpiente sonrió con maldad para luego ponerse serio y voltear a verla

-Entoncesss ven

-Si...- sin más la chica siguió a aquel demonio rastrero- Por cierto... ¿cuál es tu nombre? - decidió preguntar

-Ssss.... No le digo mi nombre a todossss.... puedes llamarme Takemaru

-Bien... yo soy...

-Se quién eres... sacerdotisa Aome

-Eh? - Aome lo miro sorprendida- ¿Cómo lo...?

-Ya te lo dije.... Se muchas cosassss- comentó la serpiente siguiendo su camino con Aome detrás de él. Luego de unos minutos se detuvieron en un claro- Mmm

- ¿Qué ocurre?

- Desde aquí seguirásss sola... te veré a medianoche en el lago de la frontera Sur a medianoche, ssss no lleguess tarde- dicho esto y sin dejar que Aome dijera algo la serpiente desapareció entre los arbustos

-Oye... ah... - Aome miro a su alrededor- ¿Por qué me dejaría aquí? - se preguntó asi misma cuando

- ¿Qué haces aquí? - una voz hace que esta se sobre salte volteando a ver detrás de ella, encontrándose a un poderoso DaiYokai, al instante se relajó un poco al ver que se trataba del medio hermano de aquel chico, esto hizo que pusiera una mirada seria y la apartara

-Nada...

-Hmm...- el DaiYokai se acercó un poco- ¿Estás sola?

-Tu qué crees?

-Percibo una presencia rara, algún demonio- comentó, Aome se puso un poco nerviosa, pero trató de no demostrarlo, ya que era mejor que nadie supiera lo que haría, esa era decisión de ella y haría lo que sea, estaba cansada de que siempre la pisoteen, esta vez harías las cosas por su cuenta y vengaría a su hijo. Por lo tanto, debía evitar de ahora en adelante toparse con amigos o conocidos

-Estas equivocado, por aquí solo estoy yo... solo Sali a caminar quiero estar sola por un rato, por favor vete

-Hmm bien...- el DaiYokai comenzó a caminar para irse, pero antes de desaparecer por el bosque- Aome...

- ¿Qué quieres?

-No hagas una estupidez- dicho esto se fue, dejando a Aome sola, suspiro y bajo la mirada al suelo

-No sé si es una estupidez o no, pero a partir de esta noche...- alzo la mirada, una mirada fría- no seré la misma- dejó caer al suelo un collar el cual todo este tiempo había tenido en sus manos, al momento de que este tocó el suelo en los ojos azules de Aome apareció un destello verde brillante y continuó su camino dejando atrás aquel collar con un dije de luna creciente.

De calido a frio y viceversaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora