Un secreto
Un abandono
Una venganza
Un unico amor
Novela corta, completamente Sesshome,
Esta historia es 100% mia, excepto los personajes que pertenecen a Rumiko Takahashi
No se acepta adaptacion ni copia
Por el bosque Aome corría a toda velocidad mientras lagrimas gordas bajaban por sus mejillas, llegó hasta un enorme árbol y se abrazó de este, sollozó como nunca dejándose deslizar hasta el suelo aun abrazando el árbol, luego de unos segundo miro las raíces del árbol y con su poder hizo que estas se abrieran mostrando asi a un pequeño bebe recién nacido, el cual dormía tranquilamente, Aome lo cargó en brazos y se sentó entre las raíces, observó al bebe en sus brazos, su cabello era negro como el suyo, y sus marcas eran idénticas a las de su padre, sus regordetas mejillas coloradas, era un bebe hermoso, Aome lo atrajo con cuidado a su pecho abrazándolo, sollozó...
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-Mi bebe... mi hijo...- Aome siguió llorando abrazada a su bebe, cuando de repente siente que alguien se acerca y este ser la abraza con fuerza contra su pecho, Aome solo enterró su rostro en aquel pecho tratando de controlar sus lágrimas mientras acariciaban su cabeza
-Hmm estoy aquí mujer... tranquila, estoy aquí
-Sesshomaru...- paso cerca de 20 minutos cuando Aome se calmó lo suficiente esta se separó de Sesshomaru, levantándose con su hijo en brazos
-¿Qué estás haciendo?- preguntó Sesshomaru al ver que Aome se encaminaba a la aldea
-Volverá a la aldea...
-¿De qué demonios estás hablando Aome?- Sesshomaru se acercó a ella
-Con mas que se parezca a nosotros, que sea nuestro hijo...- Aome miro al bebe en sus brazos- No podrá estar con nosotros... solo estuvo en mi vientre dos meses en cambio estuvo más tiempo con ellos
-Eso que tiene que ver?... es nuestro hijo, se lo darás a esa mujer nuevamente...
-Piénsalo bien Sesshomaru este bebe siempre será nuestro, pero debo dejarlo, por su bien, cuando despierte no me reconocerá como su madre, la reconocerá a ella no a mí, además el necesita alimento
-Aome...
-Tenías razón- Aome lo miro con una sonrisa triste- No valía la pena querer vengarme, lo único que estaba haciendo es lastimar a otros y lastimarme yo misma, después de todo sigo siendo una cobarde, una miedosa que nunca pudo superar que perdió a su hijo
- ¿Y qué madre supera la pérdida de un hijo Aome? Tu no sabias que él seguía vivo...
-Lo se.... Sea como sea Sesshomaru, ella lo pario cuido de el en su vientre, aunque me moleste en lo más profundo de mi ser ella también es su madre...- sin decir más Aome continuó su camino a la aldea, Sesshomaru se quedó un rato allí parado para luego seguirla. Al llegar a los límites de la aldea, se encontraron de frente con Kikio e Inuyasha
-Aome...- Inuyasha comenzó a hablar
-No digas nada Inuyasha, no quiero escuchar más lamentos y disculpas... nada borrara lo que paso- comentó Aome con seriedad, miro a Kikio quien mantenía su miraba baja, suspiro y se acercó a ella entregándole al niño, está la miro con sorpresa- Nunca te perdonare lo que hiciste... pero ahora también eres madre y ya sabes que lo una es capaz de hacer por sus hijos
