Capitulo 7

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Por otro lado, en una aldea, una mujer se encontraba en labor de parto mientras su esposo esperaba impaciente afuera...

-Por kami, ¡¿dónde está la partera?! - exclamó el chico cuando ve llegar a una mujer cuyo rostro era cubierto por una capa, esta hizo una reverencia

-Saludos señor, eh venido porque me dijeron que necesitan mis servicios- habló esta

-Si por favor entre, mi mujer está a punto de dar a luz

-Si, con su permiso- con una sonrisa burlona que nadie notó la mujer entro a donde estaba la mujer embarazada siendo atendida por un par de mujeres- Saludos, eh venido a asistir el parto de esta mujer... - habló mirando a la mujer en el suelo y sus ojos ahora verde brillante casi completos brillaron

-Ahhh por favor dese prisa, ya no aguanto

-No se preocupe todo pasara muy rápido...

Mientras tanto fuera de la cabaña, el joven caminaba de lado a lado esperando alguna noticia del nacimiento de su hijo, cuando de momento siente que alguien llega, miro para encontrarse a su medio hermano

-Inuyasha

-Sesshomaru! ¿Qué haces aquí?

-¿Dónde está tu mujer? Grrr

-Que es lo que quieres? Escucha Kikio está de parto ahora, no tengo tiempo para discutir contigo

-Imbécil tu mujer y tu hijo corren peligro! ¡Aome viene para acá! - esto último desconcertó a Inuyasha

-¿Qué?

-No hay tiempo para explicaciones, Aome quiere vengarse de tu mujer porque ella fue la causante de que Aome perdiera a su hijo

-Grrr eso es mentira!! ¡Aun asi no permitiré que ella venga! ¡No dejare que se acerque a mi mujer e hijo! - bramó molesto Inuyasha, cuando en ese momento llega una sacerdotisa

-Hola a todos- saludo está haciendo reverencia

-¿Y usted quién es?

-Oh soy la sacerdotisa Kari, me enviaron para asistir a la señorita Kikio en su parto soy la partera que mandaron a llamar- ante lo dicho Inuyasha palideció

-e...espera un segundo...si...si tú eres la partera... entonces quien...- volteo a ver la cabaña- Ay no... Kikio!!- antes que alguien hiciera algo se escuchó un pequeño estruendo seguido de un grito

-No!!! Inuyasha!!!- ante este gritó el mencionado entro rápidamente seguido de Sesshomaru, grande fue su sorpresa al encontrar a su mujer aun sin ser completamente atendida, las mujeres que anteriormente estaban con ella inconscientes y un hueco en la pared de la cabaña

-Kikio! - Inuyasha se acercó rápido

-Inuyasha, esa mujer... se llevó a nuestro hijo- habló Kikio en un mar de llanto

-¿Qué?

-¡¡Se lo llevo, era ella...era Aome!! ¡¡Se llevó al bebe!!

-Tranquila, la encontrare...- Inuyasha trató de calmar a su mujer, por otro lado, Sesshomaru salió por el hueco de la cabaña siguiendo el rastro de Aome

-*Aome, no hagas una locura*- Sesshomaru corría rápidamente con este pensamiento, procurando llegar a tiempo.

Mientras Aome ya se encontraba a unos kilómetros lejos de la aldea en la orilla de un barranco con un bulto en sus brazos, el frio viento sopló agitando su cabello, su mirada era fría y seria solo miraba un punto fijo al horizonte, estuvo asi por unos largos minutos hasta que...

- AOME!!!...- Sesshomaru llegó hasta donde ella estaba quedando a tan solo dos metros de distancia, Aome lo miro de reojo- No es necesario que hagas esto...

De calido a frio y viceversaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora