XIV

1K 96 17
                                    

Harry tenía cinco meses de embarazo cuando su segundo tour terminó, había una clase de nuevo ambiente en el último concierto, en parte por que Harry no dejaba de hablar sobre Louis.

Era especial por que usualmente trataba de evadir cualquier pregunta sobre su relación con Louis, quería mantener en secreto todo lo que pudiera sobre su vida con Louis, prefería decir que era el amor de su vida y dejar ese punto claro, antes de explicar por qué se sintió atraído por un omega. Sabía que la gente malinterpretaria sus palabras y decir él es el amor de mi vida no podía malinterpretarse de ninguna manera.

- Eres muy bonito- dijo al ver a Louis en su camerino sentado resolviendo un crucigrama. Usualmente Louis se encontraba en alguna parte de la audiencia hasta la última canción, a veces estaba paseando por detrás de bambalinas hablando con las personas a cargo y con la seguridad del lugar. Siempre volviendo al camerino de su omega en la última canción.

- ¿Estás hablando con tu reflejo otra vez?- Harry rió un poco mientras Louis lo volteaba a ver- Gracias, tu te ves hermoso Hazz-

- Oh calla- Louis se acercó para besar los labios de su omega- Quiero ir a casa omega- murmuró, estaba cansado y quería comer, era lo que más ansiaba últimamente, comer y dormir

- Vamos a casa bebé-

Harry sonrió. Louis colocaba su mano en su espalda baja para caminar a su lado, ese toque relajaba en demasía a Harry, en especial después de un concierto, era la forma en la que se aseguraba de seguir en ese mundo con su omega al lado y no perder los pies de la tierra después tener el mundo en sus manos. Louis lo regresaba a su ahora y su ahora era Louis, y Louis era todo.

Su teoría de cuerdas y su teoría de relatividad, daban sentido a su vida, en todo momento y en cada posibilidad que podría imaginar.

Louis siempre encontraba la forma de tocar a Harry, debía tener algún tipo de contacto con su omega, lo ayudaba a sentirse completamente suave y brillante, era extraño. Pero solamente entendía que tocar a Harry era tocar a su mundo.

- Tienes los ojos más hermosos que he visto- Harry alejó la mirada de su libreta donde estaba escribiendo para ver a Louis quien estaba acostado en el piso, sobre la alfombra azul claro, aún dibujando.

- ¿Alguna vez has apreciado los tuyos?-

- ¿Que quieres decir con eso?- Harry sonrió- ¿Estás insinuando que mis ojos son más lindos que los tuyos amor?-

- Creo que mi punto fue claro-

- Oh cariño, sé que no eres tonto, pero no has visto tus ojos desde mi punto de vista y desde que estás en estado cobraron más vida-

Harry dejó su libreta para acostarse de lado y ver a su omega un poco más cerca, sus ojos realmente adoraban ver a su omega y solamente sentir montones de amor, era precioso a sus ojos, jamás podría hacer algo más que ver a Louis y ser demasiado obvio para que todos se dieran cuenta cuanto adoraba a su omega.

- ¿Me amas tanto?-

- Oh mi amor, pensé que lo sabías desde el principio- Harry sonrió y cerró los ojos al ver a Louis avanzar hacia él, lo besó, Harry sabía que lo haría.

Louis solía tener esta mirada en los ojos antes de besarlo, entendió con el tiempo que esa mirada venía cuando Louis escribía, cuando Louis estaba frente a la audiencia que estaba de pie después de haberlo visto bailar por casi dos horas, era una mezcla de agradecimiento, con amor y admiración.

La discusión sobre quién tenía los ojos más lindos concluyó después de un par de besos más. Donde Harry se trago sus comentarios al igual que Louis.

My Thoughts Will Echo Your Name Until I See You AgainDonde viven las historias. Descúbrelo ahora