En marzo 3/3

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El último sábado de marzo fue un día perfecto de primavera. El clima fresco que no era ni frío ni caliente dio la bienvenida a la mañana, y la gente con ropa ligera salió a caminar por las calles.

Jung-woo, que llegó 40 minutos antes de la hora acordada, observó a la gente en la calle. No me olvidé de mirarme en la pared opaca del edificio una vez cada 10 minutos y comprobar que el sombrero que llevaba puesto no era extraño y que mi ropa no estaba arrugada de estar sentado. Quería verme tan bien como pudiera, al menos tan prolijamente como fuera posible.

Después de llegar al punto de encuentro, Sanha encontró inmediatamente a Jungwoo. Como alfa de un tamaño conspicuo, no hubo nada difícil.

"¿Llegaste temprano?"

"¿Oh? Oh no, solo estoy aquí desde hace poco... ... ."

Jungwoo fijó su mirada en el suelo tan pronto como miró a Sanha. Sanha, tenía el flequillo volteado para revelar su hermosa frente, pero hoy, su cabello negro cubría tranquilamente su frente. Su estilo habitual hizo que su corazón se acelerara porque se enfatizaba su sensualidad, y la forma en que se bajaba el cabello le recordaba a Seyoon de la época escolar, y Jungwoo se mareó.

"¿en que has venido?"

"Vine en el autobús... ... ."

¡Jung-woo, que respondía vacilante mientras miraba al suelo, se confundió al instante! Hizo un ruido extraño y retrocedió. Fue porque la cara de Sanha llenó el campo de visión lleno de mosaicos morados. Inclinó la cabeza al ver a Jung-woo, cuyo rostro armonizaba perfectamente con sus rasgos y su rostro extrañamente distorsionado.

"¿No eres bueno para ver los ojos de las personas?"

"¿Oh? eh, uh, uh, uh."

Sanha, que se había inclinado para hacer contacto visual, escuchó el 'uh' tres veces y volvió a enderezar la espalda.

El viejo hábito de Jung-woo de no ver los ojos de las personas cuando habla no solo se aplicaba a San-ha. Incluso cuando hablaba con otras personas, a menudo miraba al suelo o a la mesa, sin saber dónde mirar. Fue agradable poder cubrir esas miradas hasta cierto punto con la ayuda de lentes en el cabello desgreñado que cubría la vista.

"Bueno. Aquí no venden palomitas ni Coca-Cola... Puedes traer agua. ¿Te gustaría beber?"

Sin escuchar la respuesta de Jungwoo, Sanha caminó hacia la máquina expendedora. Estoy bien, Jung-woo, quien perdió el tiempo para responder, rápidamente siguió a San-ha.

El cine ubicado en el sótano era un poco diferente del cine habitual. Solo se proyectaron dos películas durante la semana, y solo había dos salas con capacidad para unas 30 personas. Además del estreno de la película, se dice que es una sala de cine que solo proyecta películas independientes seleccionadas cada mes.

¿Sanha vino aquí a menudo porque le gustan las películas de arte? Jungwoo tenía curiosidad, pero no podía preguntar.

Jung-woo, que solo tiene una imagen vaga que le viene a la mente cuando piensa en algo de arte, es así cuando imagina a San-ha. Descubrir, analizar y aprender la belleza en el arte. Sanha que vuelve a crear algo más hermoso con sus propias manos. Si me sentaba frente al caballete e imaginaba a Sanha moviendo sus manos, una sonrisa tímida aparecía naturalmente.

Las luces se apagaron tan pronto como nos sentamos en un cine más pequeño en comparación con un cine normal. La película comenzó de inmediato sin anuncios. Mientras Jung-woo miraba a su alrededor, San-ha giró la cabeza y miró la pantalla. Cada vez que Sanha parpadeaba, sus largas pestañas proyectaban una sombra como un toldo.

Forest Gray / VOL 1 [ESPAÑOL]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora