'°•Just He•°'

⟨‹|² Who Are You? ²|›⟩

¿Por dónde empezar?
Por el principio es lo
Más justo, ¿Verdad?

Pues, en ese caso, empecemos ablando del trato que obtienen los omegas de Gimpo.
Éstos, apenas se presentaban, tendrían el rol de "ama de llaves", ya que se les veía utilidad solo para tener hijos y servir en la casa.

Los que no se casaban tendrían que ir a trabajar al palacio real, osea que tenían oportunidad de elegir:

Ser esclavo en un palacio y trabajar allí toda su vida, o ser amo/a de llaves y cuidar de su casa, esposo, hijos, etc.

Muy pocos Omegas pueblerinos tenían oportunidad de elegir con quién casarse; la familia tendría que ser muy comprensiva y, a decir verdad, no había muchas de ellas;
Ya que, los padres de el o la Omega, obligaban a sus hijos a casarse para no tener que vivir como esclavo.

En el caso de los Alfas, si podían elegir con quién casarse y formar una familia, en realidad, podían enamorar a un Omega y luego pedir su mano, pero no todo es color de rosa para los Alfas.

Verán:

Luego de que los Alfas eligen con quién formar una familia y pasar el resto de su vida, deben subir a "La Gran Montaña" y estar en la cima de ella, soportando el frío, por dos semanas y casi ninguno volvía de ese largo viaje, ya que la montaña era demasiado fría para estos.
Por eso, debían ser cuidadosos para elegir, y entrenarse duro desde pequeños.

Ahora hablemos de la realeza:

Los Alfas hijos del rey, tienen derecho a elegir con quién casarse, pero a quién elijan debe ser proveniente de la realeza.
Luego de cumplir los 15 años de edad, deben alistarse para el ejército y así dar ejemplo al símbolo de lucha del pueblo, para que así más Alfas pueblerinos se unieran a éste y notaran que no hay ciertas indiferencias entre la realeza y el pueblo.

Los Omegas, provenientes de la realeza, tienen prohibido opinar sobre ciertos temas, se limitan a estudiar literatura ( a petición de la reina, antes de que su matrimonio colapsara ), deben aprender obligatoriamente a tejer, bordar y coser; deben siempre mostrar una amable sonrisa y deben hablar sólo cuando se les de permiso.

Y, sinceramente, a Minho todo eso le parecía una mierda.

Aunque le gustaba leer varios cuentos de Shakespeare.

Se encontraba leyendo uno de sus hermosos y significativos libros cuando su madre lo mando a llamar, pues, la ventaja de ser un Omega de la realeza, es que debes ayudar a tu pueblo, ¿Verdad?.

Si, A Minho le encantaba ayudar a las mucamas del palacio a cuidar del mismo.

Las ayudaba a tender las camas, lavar los trastes, barrer y trapear los pisos, extraer las telas de arañas, acomodar la alacena, cocinar, etc.

Siempre las veía tan cansadas al final del día cuando era pequeño, ahora ya las ve con más energía ya que las ayuda.

Para quitarles un peso de encima, todas las mañanas, él solo limpia su enorme y espacioso cuarto, el cual siempre portaba su dulce y delicioso olor: Menta y Arándanos.

─ ¡Saemin-Hyung!─ Llamó el Omega emocionado de verlo después de tanto tiempo, pues, el Alfa ya tenía 18 y hoy regresaba después de haber hecho el entrenamiento del ejército ─ ¡Que bueno que regresaste!