Mediodía
El día que te vi por primera vez, yo acababa de salir del instituto.
Era mediodía, el sol estaba brillando y no había rastro de alguna brisa refrescante. Recuerdo que la radio de la camioneta de mis padres estaba encendida, el locutor decía algo del equipo de futbol estadal y no estaba prestando nada de atención al programa; tenía la cabeza apoyada en la ventanilla del auto mientras esperaba a que mi madre terminara de devolver mi instrumento a la academia de música a la que había pertenecido toda mi vida.
El sol pegaba justo al lado del auto donde estaba, bajé la ventanilla para que el aire seco me azotara en la cara y saqué la cabeza para observar más de cerca a un gato negro pequeñísimo que estaba hecho bolita en la acera de la calle.
Recogí al gato, y tú pasaste a mi lado. Tenías la cara roja y un montón de sobres en una mano; hablabas por el móvil con los auriculares puestos. Apretaste los labios y tiraste el aparato a una cartera tejida que tenías guindada en el hombro.
Miraste hacia el sol un segundo y seguiste caminando.
Ningún sobre se cayó al suelo.
Porque los terminaste tirando a los contenedores de basura.
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La música habla si la escuchas de noche
Teen Fiction"¿Cuándo fue la última vez que escuchaste música, Zoë? ¿Alguna vez has escapado de la realidad para evitar el dolor? Porque todo comienza cuando tus audífonos se quedan en silencio; las sensaciones emergen desde los más profundos recuerdos que tení...