✿╣𝘊𝘢𝘮𝘱𝘰 𝘥𝘦 𝘧𝘭𝘰𝘳𝘦𝘴╠✿ {Xiao x Aether}

3.

Pasaron los días y ambos chicos se hacían más y más cercanos.

Hoy estaba lloviendo, así que hoy no podría ir al campo de flores, era una pena. En ese campo pasaba los mejores momentos con el rubio, se le pasaba el tiempo tan rápido cuando está con el rubio, incluso su deuda karmanica es menos insoportable cuando está junto a él.

El adeptus se encontraba en la cocina comiendo un poco de tofu de almendras, su plato favorito, no creía que el viajero iba a venir, estaba lloviendo y seguramente ahora estaría en un lugar cálido para no enfriarse, hasta que vio una melena rubia acercarse hacía él.

—¡H-hola Xiao!– dijo el de pelo trenzado con una sonrisa en la cara, este estaba empapado por la lluvia.

—¿!Aether!? ¡estás empapado!– Xiao se levantó y se acercó al rubio mirándole de arriba abajo.

Xiao suspiró —dejame ayudarte que tus ropas, vayamos a mí habitación– La jefa de la posada siempre tenía reservada una habitación para xiao así que los dos eran hombres así que no verá algo que no haya visto núnca, pero por alguna razón estaba nervioso.

Aether se sorprendió al escuchar esto y no pudo evitar sonrojarse un poco.
—u-uhm, está bien, gracias–
El Yaksha guío al viajero hasta su habitación y ambos entraron.

Aether no sabía lo que tenía que hacer así que se empezó a desvestir delante del Adeptus y este se puso rojo de inmediato.
—¡A-aether espera! Primero te prepararé ropa y toallas para secarte–
El rubio soltó una risita al ver la reacción del pelinegro aunque fuese una persona seria, es muy nervioso para estas cosas, le gustaría molestarle un poco más pero sería demasiado para el pelinegro.

El azabache cogió algunas toallas y ropa seca para después dárselas al rubio.
—aquí tienes– momentos después el azabache se dio la vuelta para darle privacidad al rubio mientras este se ponía la ropa que le había dado.

—Gracias, Xiao– Aether le sonrió y el pelinegro se estaba dando la vuelta para verle por fin.

Al viajero se le ocurrió algo ¿Y si se quedaba a dormir con Xiao? Seguro sería divertido.

—Oye Xiao– en cuanto pronunció ese nombre el contrario le miró.
—¿Hoy podría quedarme a dormir contigo? Sería divertido– Aether sonrió y el Yaksha no pudo evitar sonrojarse, iba a dormir con el viajero, aunque no creía que iba a dormir en la misma cama con él.

—Claro, por mi bien– el rubio daba saltitos de alegría, podría pasar más tiempo con unos de sus mejores amigos y no pudo evitar abrazarle cosa que a Xiao ya no le sorprendía, él ya estaba acostumbrado a los abrazos del rubio.

Aether se tumbó en la cama del Adeptus, era cómoda, muy cómoda, además se notaba que esa cama apenas era utilizada seguramente el Adeptus lo menos que hacía era dormir o descansar y obviamente hoy le iba a obligar a descansar, estos días lo veía un poco cansado así que será lo mejor.

Xiao miró al viajero y se sentó en la cama a su lado, este bostezó eso era un señal de sueño y no le extrañaba, ya era un poco tarde y el viajero debería de estar agotado de tantos encargos que le pedían.

—Si quieres, duerme ya– el pelinegro no apartaba la mirada del rubio.

—Está bien pero túmbate conmigo- el rubio lo jaló del brazo obligando a tumbarse a su lado, parecía que no tenía opción.

El de pelo trenzado sonrió y cerró los ojos, Xiao no dejaba de quitarle el ojo de encima, poco a poco se iba acercando más al de pelo trenzado para verlo con más detalle, le llenaba de curiosidad, se acercó tanto que podía notar su respiración. Se veía bastante tranquilo ¿Se habrá dormido ya? Pensó el adeptus.
Por alguna razón quería acercarse más y más, quería abrazarle quería demostrarle afecto al viajero pero no sabía cómo.

Antes de empezar a comerse la cabeza cerró los ojos también y se quedó cerca de Aether, el azabache se empezaba a quedar dormido hasta que el sueño lo consumió por absoluto.