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14/07/14
4:15 p.m.

Salí de mi habitación en busca de comida, moría de hambre.
No encontre nada mas que galletas y café, no es que fuera muy amante de este pero en climas tan fríos como estos si lo disfrutaba.

Creo que el dulce sabor y la acogedora sensación del café me hizo sentir un poco más aliviada.

Mire por la ventana atenta a la lluvia  caer, el sonido que producia esta al impactar con el techo y la ventana me agradaba demasiado, me hacia sentir realmente comoda, sin embargó una tristeza inundaba todos mis adentros sin conocer el motivo, aveces las personas se deprimen por nada.

Sacudí mi cabeza al igual que negué con la cabeza rápidamente y mire a las personas correr apuradas mientras algunas tenian paraguas y otras no, tal vez algunos tenian una cita, o otros se dirigian a sus casas, universidades o incluso sus trabajos.

Pero es impresionante la forma tan rápida en la que se mueven. Varias veces ignorando señales de tránsito o los mismos coches que se aproximaban con la misma o más rapidez. Provocando accidentes y muerte como resultado.

Aparte lentamente la mirada de la ventana y me levante de la silla en la que me encontraba viendo por la ventana y agarre mi taza con un poco de cafe adentró y la deje en la cocina para lavarlo mas tarde tal vez.

Me vestí y sali de aquel departamento el cual no era el mejor de todos pero si el unico que podia pagar. No tenía destino, ni siquiera sabia a dónde me estaba dirigiendo, simplemente caminaba sin rumbo, de todos modos queria salir de mi departamento y despejar un poco mi mente.

Decidí dirigirme a un parque que habia visualizado a unas calles adelanté, no estaba tan lejos de mi departamento al parecer. Me sente sobre el algo mojado césped y contemplé mi alrededor. En un columplio no tan lejos de donde estaba se encontraba una chica de cabello rojo y corto con piel blanca, muy blanca, que hacía contraste con su melena. Llevaba sueter negro, un ancho jean gris rasgado y un gorro rojo. Se encontraba viendo el suelo, seria noté que esta estaba llorando.

Me acerqué confiada
_hey, hola. Mi nombres es sakura miyawaki.

_¿Qué quieres?_se notaba bastante triste. Observé que tenia las ojeras bastante marcadas y sus ojos muy hinchados, como si hubiera llorado por horas tal vez.

_Se nota que necesitas a alguien en estos momentos....¿Puedo ayudarte?_le mostré una calida sonrisa y toque su hombro con suavidad y suma delicadeza.

_B...bueno, mi nombre es l...lee chaeyeon_me miró confundida.

_Bien, chaeyeon. ¿Ahora dime qué ocurre?

_Mis padres me echaron de mi casa, todo por decirles que soy lesbiana.

_¿Cuánto llevas aquí?

_tal vez 3 horas, no lo se realmente.

Ahora entendía el por qué sus pequeños ojos estaban tan hinchados.

Me miro y le sonreí. La abracé y comencé a caminar con ella, se dirigían hacia su departamento.

_puedes quedarte en mi departamento si deseás_ le dije.

Solo asintió con una sonrisa débil.

De las pocas que me regaló.

solo yo cumplí la promesa  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora