🤍 Un destino y dos corazones💙│ Flexkato │

_#6_

Aquellos dos jóvenes ya estaban en dirección a la casa del peli azul, Musi nuevamente tuvo que guardar ropa para un día. Que era el tiempo que iba a estar, luego llamo a un Taxi que en 5 minutos ya se encontraba ahí, y para no meter tanto detalle o relleno ya habían llegado.

—¡Mamá! Ya llegue! –Dijo dejando sus cosas en un mueble mientras se escuchaba a la señora bajando de las escaleras para saludar a su hijo.— Flex al fin llegas como te-... ¡¿Musi!? –hablo la señora sorprendida yendo a abrazar al "intruso" de su casa—

—Ho-Hola Tía. –Musito mientras correspondía el abrazo, pero Flex se interpuso— Mamá, vas a asfixiarlo. jajajsjs –La señora vega se dio cuenta y lo soltó con una sonrisa  avergonzada por lo que había hecho—

—Jejeje perdón cariño, pero tu madre no me dijo que vendrías, por cierto ¿Cómo esta? ¿Ella también vino? –Musi respondió con un "no" y le conto que llegaría en dos semanas, puesto que tenia cosas que hacer haya—

—Oh vaya, bueno mañana la llamare para saber más y hablar de que hace. Pero bueno hijo, Siéntate que de verdad me diste una gran sorpresa no pensaba en que me vieras así o la casa desarreglada.

—No hay problema con eso. Vine porque Flex me invito y quería darle una sorpresa, aparte que me quedare a dormir aquí y en la tarde me iría o en la noche. –Dio una sonrisa mientras se acomodaba y sentaba en unos muebles de la sala para hablar mas cómodo—

Por otro lado un peli-azul se encontraba escuchando toda la conversación y vaya que no dejaba de ver al de ojos marrones, pero sus pensamientos o mirada se esfumaron al ser llamado por su madre que le pedía servir la mesa (la cena) que ella había hecho rato atrás.

Flex solo bufo un poco molesto y aburrido mientras se levantaba del mueble, aun así no se quejaría después de todo tenia que hacer caso a su madre.

Pero no era lo que esperaba pasar cuando invito a su amigo, hermano y compañero del alma.

—Esta bien ya voy. –fue directo a la cocina mientras buscaba los platos y cubiertos que serviría en la cena junto a la comida que ya estaba hecha, pero luego una presencia se hizo presente ayudándolo— ¿Sabes que podrías estar hablando con mi mamá mientras yo me encargo de esto, no? No es necesario tu ayuda Musi.

Dijo sin despegar la mirada del arroz que estaba sirviendo en un plato.

—Lo se, pero me ofrecí para ayudarte, después de todo ya me ayudaste mucho hoy y también tu mamá me dejo ayudarte, asique caya. –tomo el plato que tenia Flex y sirvió el resto que quedaba—

—Je, bueno, has lo que quieras... Pero sirve la mesa y yo los platos, así también estarías ayudando en algo. Yo seguiré acá que ya termino de servir. –Sugirió quitándole el plato de sus manos y luego siguió sirviendo—

Musi en vez de quejarse o rechistar hizo caso y comenzó a poner los individuales, vasos, cubiertos, etc. sobre la mesa, y rato después ya estaban los platos con la comida servida.

—Wow esto de verdad se ve exquisito. Extrañaba mucho este sabor de la comida. –dijo Musi sorprendido por el sabor y el aspecto que llevaba, sin duda una comida que no dejarías ni un granito de arroz—

En la mesa era sin duda un ambiente muy tranquilo y alegre, esta vez Flex si estaba integrado en la conversación de su mamá y Musi. Todo excelente, había risas, chistes o anécdotas de cada uno de los integrantes.

Y tiempo después ya habían acabado de cenar. La señora vega le pidió a su hijo lavar los platos pero Musi como chico comportado se ofreció a ayudar, pero la señora solo sonrió por la acción de Musi que esta vez le insistió que lo hiciera su hijo pero Musi insistió en ayudar y al final de un tiempo de "discutir" se quedo lavando los platos.