LANDON , LA MANZANA PROHIBIDA.

Capítulo 49.

MAYCOL.

—Señor, nos tienen acorralados.

—Son unos estúpidos, entreténganlos.

—Pero nuestros hombres algunos ya fueron heridos.

—No me importa, dame tus armas y vete. - Manifiesta Maycol enojado.

—Pero...

El hombre me observa, pido ayuda con la mirada, tratando de que al menos tenga compasión y trate de ayudarme, es en vano, se marcha.

Maycol me tiene sujeta del brazo.

—Camina ordena.

—Maycol , te tienen rodeado , entiende no hagas una locura.-Menciono preocupada y temerosa de que me lastime.

—Que parte no entendiste ¡tú eres mía!!mía!, no me importa si morimos ambos, si es la única manera de estar juntos- Me grita.

—Ahora camina— O quieres adelantar nuestro futuro gatita fiera.

No tenía otra opción, mis lagrimas siguen cayendo por mis mejillas, solo veía el camino, después de unos 15 minutos, había unas plantas, había un orificio debajo de una roca enorme.

—Entra —Espeta.

Tuve que acatar sus órdenes.

Al entrar y luego caminar unos minutos observo una cabaña tenía un pequeño pasadizo, había una habitación enorme, se podía apreciar una cascada al frente, a unos cuantos metros. Maycol hizo que me siente en una silla. En un movimiento ágil amarra mis manos, están atadas

—Maycol entrégate a la policía.

—Cierra la boca.

—Vaya, ya demorabas en traerla a este lugar Maycol.

—¿Qué haces aquí?- anuncia Maycol enfurecido.

Mi vista se dirige en aquella persona. Es Denis.

—No me perdería el gran espectáculo después de todo.

—¿cómo entraste? - refuta Maycol.

—Eso no importa, sabes me gusta ser curiosa, este es un bello lugar después de todo.

—La policía llegará dentro de unos minutos. — anuncia Maycol.

—Lo sé

—Te atraparán Denis.

—No me importa, lo que más deseo es ver sufrir a Layla.

—Crees que encuentren este lugar.

—Si eso sucede, yo puedo ayudarte.

—Te atraparán tonta. —espeta Maycol

—Bueno Maycol, también ahora necesitas mi ayuda.

—Yo cuidaré en que no se le ocurra escaparse.

—Esta bien no la dejes escapar, espero que esos inútiles policías no encuentren, si no bam bam. —Manifiesta señalándome con el arma.

Cuando se marcha, observo que Denis saca un cigarillo y comienza a fumar.

—Denis por favor tu no deseas esto, piensa en tus padres.

—Estas locas, tú me quitaste a Landon, el amor de mi vida. Te odio Layla, te detesto. Solamente estaré satisfecha cuando te vea muerta.

—Las cosas sucedieron de otra forma. Landon está aquí en la mansión de Rain.

—Mientes.

—Es verdad.