Capitulo VI

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Estuve un rato hablando con diente rojo, al parecer nos volveremos buenos aliados.

Me causa curiosidad que diente rojo piensa que jefe tiene otros planes además de aliarse con los asesinos más fuertes.

No creo, jefe es leal me ah mantenido a su lado todo este tiempo.

- ¡cero! -

Después de estar con diente rojo regrese y como ven, el jefe me ah llamado.

- vamos, hay reunión -

¿De nuevo?

[...]

Estuvueron hablando, más bien, jefe hablaba sobre a quienes matar y porque convenía o si sólo eran un estorbo.

Cada quien se encaminó a su misión y nosotros nos fuimos.

A nosotros me refiero a él jefe y yo...
Ah y su secretaria.

Jamas la conocí, solo se que es como yo, al lado del jefe y en silencio, no interrumpe almenos que jefe lo pida.

Regresamos a dónde siempre, yo lo llamo casa ya que aquí vivo prácticamente, pero jefe siempre sale o tiene asuntos.

- cero -

- ¿si?, señor -

- ve a ver a seven, solo a él, analiza cada movimiento -

- si señor -

Hise una reverencia y me retire de ahí.

[...]

Fui a la ubicación de la misión de seven, observando a lo lejos.

Era un maestro de artes marciales, thumbs-up de zanquan son... Pacifistas

En campo abierto comenzaron a luchar, seven con su espada lanzaba los golpes, mientras que el maestro sólo esquiva.

El maestro trataba de acercarsele para tocar los puntos débiles y así debilitarlo y ensestar un golpe.

Pero seven jamás cedía, es increíble verlo luchar así.

Después de varios intentos por parte del maestro terminó cansado con rasguños, sólo mantenía su defensa.

Seven lanzó un corte que le dio al maestro por su pecho, fue profundo y este solo cayó.

En ese preciso momento llegó un joven de cabello verde y ojos verdes un poco más claros que su cabello.

Vaya, presenció la muerte de su mentor, quedó estático.

Seven solo le dirigió su mirada y se retiró.

[...]

- así fue la pelea señor -

- Gracias cero, al parecer nuestro nuevo integrante es muy rápido en sus misiones -

Asentí.

- puedes marcharte -

Me fui de ahí.

Salí a pasear donde siempre.

Oh, pero me volví encontrar a alguien.

Este solo sonrió y yo me senté al lado de él.

Se recostó en el pasto suspirando.

- lindo cielo ¿no? -

Gire a verlo, estaba en un morado oscuro, me encantaba, solo asentí.

Me quito mi gorro...

Me gire a verlo molesta.

Otra vez me agarro desprevenida.

Me tomó del mentón y me descubrió la cara.

Solo lo paté en el pecho y con mi katana empeze a atacar.

Apunte a su cabeza, se agachó, apunte a sus pies, salto, hise un doble ataque, los ezquivo.

Volví a apuntar a su cabeza y a sus pies en un rápido movimiento para en lo que está en el aire encestarle un golpe y así lo acorrale.

Le puse mi katana en su cuello.

Y el puso su espada en mi estomago.

Nuestros ojos se veían fijamente y las caras estaban más cerca que nunca.

Deslize un poco mi katana en su cuello el solo se quejo y el enterró un poco más su espada en mi abdomen.

No hise nada mas, solo continúe viéndolo.

Este sonrió.

- asique... ¿Eres una chica eh? -

Lo seguí mirando de igual forma, esos ojos tan serios son irritantes.

El en un movimiento rápido me golpeó en el estómago y me hizo caer con sus pies.

Tosi y empeze a a respirar agitadamente me faltaba el aire.

El río.

Y me ofreció su mano para levantarme.

La aparte y me recupere yo sola.

- ¿Por qué me sigues? -

Lo mire incrédula.

- ya dignate a hablar -

- ¿Tienes algún problema? -

Sonrió.

- sí, ¿para quien trabajas? -

- creo que sabes exactamente para quien -

- esta bien -

Me quede en silencio, se me ah hecho incomodo esto.

- eres fuerte -

Lo mire sorprendida.

- ten -

Me regreso mi pañuelo que me quito de la cara.

- nos vemos -

The Seventh Killer And You (Seven × Tu) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora