En opinión de Shirou Emiya, Novum Chaldea fue impresionante. A pesar de lo cavernoso, húmedo y frío que podía llegar a ser, al menos las habitaciones estaban bien acondicionadas. Mejor aún, tenía todas las comodidades para la multitud de Servants que convocarían los últimos humanos restantes de la Historia Humana adecuada. Y aún mejor, el Servant de Sion, llamado 'Capitán' sirvió como personal de limpieza. Aún así, Shirou se ofreció a limpiarse de vez en cuando. No podía dejar que el pequeño Servant manejara todo, después de todo.Lamentablemente, hoy se vio obligado a abandonar sus cómodas habitaciones, ya que los preparativos para el sistema de convocatoria estaban listos. Se las había arreglado para convertirse en Master gracias a Sion y Da Vinci, y por lo tanto podía Convocar servants junto con su ahora compañera Ritsuka Fujimaru. Sin embargo, él tenía mucho menos potencial que ella.
Aun así, había logrado convocar a sus amadas valquirias, y por eso estaba feliz.
Entró en la sala de mando, que ya era impresionante. Una sola pantalla holográfica se encontraba en el centro de la habitación, mientras que algunas computadoras y otros dispositivos estaban esparcidos, algunos contrastando con las paredes de roca de la caverna.
Allí vio a Ritsuka, usando su Código Místico Ártico, Mash usando ropa casual que no sabía que tenía, Sion, Da Vinci, Holmes y las Valquirias.
Ritsuka se dio la vuelta y lo saludó.
"¡Ahí estás, Emiya!" Ritsuka dijo con una sonrisa. Se acercó, devolviéndolo. Tomó un lugar cerca de sus Servants. Thrud, Hildr y Ortlinde rápidamente se pararon cerca de él.
"Bienvenido, Master", dijo Thrud.
"¿Dormiste bien?" preguntó Hildr.
"Esperamos que las runas hayan funcionado bien para calmar tus sueños", continuó Ortlinde.
Los tres hablaron sin pausa, una señal de sus mentes unidas.
"Estoy bien. Entonces, ¿estamos listos?" Preguntó, mirando el círculo de invocación que se había establecido en el medio de la habitación.
"Todos los sistemas son verdes", dijo Sion, subiéndose las gafas mientras tocaba una consola. "¿Tienes el Saint quartz?" Shirou asintió, sacando tres piezas del material.
"Bien señor Emiya. Perdone nuestra falta de fondos, pero parece que alguien lo usó todo durante nuestra última aventura". dijo Holmes, mirando a Ritsuka con una ceja levantada. La chica, notando la mirada de todos, simplemente se sonrojó y se frotó la nuca.
El sudor de Shirou cayó. Ese viaje por Patchwork London había sido una pesadilla. Perder sus recuerdos era algo que nunca quería volver a experimentar.
"Esto es solo una prueba, ¿verdad? No es como si pudiera invocar mucho", dijo. Recordó el parámetro de suerte extremadamente bajo de su yo futuro, así como el de sus valquirias.
"Sí", dijo Da Vinci, dando un paso adelante. "Tu compatibilidad con el Master realmente afecta tus Tasas de Invocación. Nuestra pequeña Ritsuka aquí-"
"-¡Tengo casi veinte!" Ella se quejó.
"¡Hasta que Moriarty se vaya, todavía tienes diecisiete!" Mash argumentó. Ignorándolos, Da Vinci continuó.
"- tiene, en términos que uno puede entender, un potencial maestro A+++, por lo que sus tasas de invocación son escandalosas, al menos fuera de Lostbelts. Tú, por otro lado, tienes un potencial D-. Así que sin catalizadores, e incluso con ellos, es poco probable que convoques mucho".
Shirou suspiró. "Ya veo. Bueno, no es como si fuera a pedir tofu Super Spicy Mapo o algo así. Me llevaré a quien venga", mientras lo decía, Thrud dio un paso al frente.
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Fate: Sabor a Valquiria
FanficAutor original: FactualUnity Las valquirias eran máquinas con un solo propósito, buscar héroes. ¿Qué sucede cuando son convocados por Shirou Emiya, un humano que vive como una máquina e intenta ser un héroe?