UNO PARA SEIS/bts×hoseok

02

Una hora después logré salir de la sala de ejercicios, debo darme una ducha y colocarme pantalones largos, las marcas que me dejó Jungkook se vuelven a cada minuto más notorias.

-¡Hyung!. - sonrió al escuchar la voz de mi dongsaeng favorito, me doy la vuelta y me encuentro con su hermosa sonrisa, dirigida sólo a mi.

-Hola Taehyung. - te acercas y me abrazas, rodeas mi cuerpo con tus brazos y no puedo evitar hacer lo mismo. - ¿Apenas te levantas?.

-Si, ayer dormí tarde. - bajamos a la primera planta, Taehyung decide ir a la sala y prende la televisión, camino hasta la cocina, Jin tiene una taza de cristal entre sus manos y está revolviendo las claras de los huevos, su concentración está en aquella mezcla.

-Hola Jin. - desde hace mucho que no uso los honoríficos con el, ya no es necesario, y a Jin no es como si le importara mucho.

-Hola ¿cómo dormiste?. - me acerco a la barra y me recuesto con ella, el frío mármol me estremece cuando hace contacto con una parte de mi espalda desnuda, solo tengo una camisa delgada blanca.

-Bien, ayer estaba cansado. - Jin sonríe, su mirada fija en la taza. No deja de mover el tenedor dentro.

-Si, lo se.

-¿Necesitas ayuda?. - lo piensas un rato, pero terminas negando.

-No, sólo ve a despertar a los demás.

Me alegó de la cocina, Taehyung se encuentra sentado en el sillón junto con Jimin, este al verme me sonríe, sus ojos desaparecen por unos segundos.

-Hola, no escuche cuando bajaste. - saludo, estoy lo bastante lejos como para notar como reprime sus ganas de correr hacia mi y abrazarme.

-¿Qué vas a hacer?.

-Jin me pidió despertar a los demás, falta Namjoon y Yoongi.

-Namjoon ya se levantó, lo vi cuando salí de mi habitación. - me doy la vuelta y camino hacia las escaleras.

Cuando llego al segundo piso camino hasta la habitación de Yoongi, tocó tres veces la puerta y al no recibir respuesta entró, Yoongi se encuentra aún durmiendo, está tapado hasta la cabeza con sus sábanas.

Me acerco a la ventana y habro las cortinas negras, el cuarto de Yoongi es muy minimalista, no tiene nada más que su cama, una mesa de noche y un pequeño mueble.

-Aghr. - me doy la vuelta y me acerco a la cama, tocó levemente su hombro y luego le quito la sabana.

-Buenos días.

-Hoseok, basta, cierra la ventana. - niego, pero no me ve.

-Vamos a desayunar. - te sientas, tu cabello está revuelto y tus ojos se ven más pequeños que de costumbre. Lindo.

-No quiero. - me tomas de la mano y me acercas a ti. - Prefiero el postre.

-Yoongi, apenas despertaste, estás loco. - sonríes, me tomas de la cintura y me recuestas sobre tus piernas.

Duermes solo con boxers así que tu erección matutina es muy notoria.

-No, estoy adolorido. - susurro, tus labios están besando mi cuello, por suerte en esa área no tengo marcas.

-¿Por qué?.

-Yoongi... - me tomas del cabello, sabes que me exita que me tomes del cabello.

-Debes recompensarme. - susurras cerca de mis labios.

-¿Cómo?.

-Impresioname. - sueltas mi cabello y cruzas tus brazos detrás de tu cabeza.

-Si tuvieras un cigarro en los labios me correría con solo verte.

-Es muy temprano para fumar, Hoseok. - una mueca adorna mi rostro, beso tu pálido cuello y luego subo a tus labios.

Nuestras bocas comienzan una guerra por el control, nunca he podido ganar ninguna.

Después del beso me inclino hasta llegar a la tira de tus boxers negros, beso la punta de tu pene por sobre la tela y comienzo a bajarlos con los dientes.

Tomó la erección y me la meto a la boca, siempre me ha gustado el sabor de tu pene, soy feliz cuando me permites hacerte un oral y soy aún más feliz al ver tu rostro mientras te lo hago.

Se que tratas de no gemir en alto, pero también se que es casi imposible porque soy muy bueno para los orales, todos me lo dicen, pero solo tu eres al que le concedo por más tiempo mi boca.

-Mierda. - tomas mi pelo entre tus dedos y me obligas a moverme más rápido y más profundo, te gusta que devore todo tu pene. - Deberías verte Hoseok, te ves muy bien comiendote mi verga.

Tienes compasión por mi y estiras tu pierna para que tenga algo con que frotarme, mi pene esta gritando por algo de atención, pero se que si lo toco me castigarás.

-¿Por qué usas pantalones? No me dejan ver tus hermosas piernas.

Ignoro el comentario y sigo con mi labor, estas cerca, lo sé, saco tu pene de mi boca y bajo a tus bolas, mi mano ahora es la que se encarga de tocarte.

-Mierda, Mierda. - el agarre en mi pelo se hace más fuerte, me muevo mas rápido contra tu pierna, quiero llegar contigo.

Agarras mi cabeza cuando el semen se dispara, mi rostro se llena del blanco líquido y sonríes al verme, un gemido se escapa de mis labios al sentir mi propia libertad.

-Eres una obra de arte. - pasas uno de tus largos dedos por la comisura de mis labios y tomas el líquido con ellos, luego lo metes a mi boca.

-¿Me comprarías si fuera una?.

-Daria lo que sea por tenerte. - sonrió, pasó mis dedos por mi rostro para luego lamerlos.

-Ya tuviste tu postre, ahora te toca el desayuno.

-Preferiría otro plato de postre, si no es mucho pedir. - me bajo de la cama, gotas de semen se encuentran en las sábanas.

-Ahora no. Vas a tener que lavar eso. - apuntó las sábanas manchadas.

-Las puedo llevar a una lavandería.

-Si sigues haciendo eso, te quedaras pobre. - sonríes, me gusta tu sonrisa.

-Hoseok ¡soy millonario! No voy a quedarme pobre por llevar mis putas sabanas dos veces a la semana.

Me acerco a Yoongi, y lo vuelvo a besar.
Me gusta tenerlo así, porque se que es por mi.

-Daria lo que fuera por tenerte. - repite enmedio del beso, me alegó y sonrió levemente. - De verdad.

-Vamos, Jin nos está esperando. Baja tu primero, debo ir al baño, lavarme la cara y cambiarme, de nuevo. - susurro lo último.

-¿Por qué? Te ves bien.

-Te veo abajo.