Just another fanfic about the Multiverse

- I -

Song: Baepsae- BTS.

-Un nudito aquí... Listo.

Se escuchan los quejidos y gritos de nuestras protagonistas que intentan liberarse de las mismas ataduras que le hicieron a la narradora.

-Por fin... Espero que eso les enseñe a no meterse con las personas equivocadas...

-Ahora sí, mi gente. Comencemos.

Era un soleado miércoles 17 de junio de 2020, cuando Lara y Ana se encontraban tomando una plácida siesta en la mesa compartida correspondiente del instituto Juan Manuel Belgrano, específicamente, en la clase de Biología con la profesora Martha Colman.

Profesora: ¡Remolacha y Bellota! ¿Por qué no me sorprende? ¡Durmiendo, otra vez!

Las protagonistas se despiertan de golpe y le dirigen una mirada llena de molestia.

Ana: Señora, sin ofender, pero... ¿Qué parte de Remiro y Bellona no entiende? ¿Sabe leer? Lo tiene en la planilla todos los santos días.

Lara: Avise si nos odia. Aprobamos su materia con dieces, tipo mínimo aprenda nuestros apellidos.

Ana: ¿Quiere que le enseñe a leer, profe Mantecol?

Martha -ahora coronada como profesora Mantecol-, roja del enojo dice dulcemente-: Ya que tan orgullosas están de sus notas y su "delicado" vocabulario, pueden retirarse de mi clase. El director va a estar encantado de tenerlas en la dirección, no las quiero ver en lo que queda de la jornada.

Ambas alumnas, sentadas la una al lado de la otra, se levantan de sus asientos caminando hacia la salida de la habitación con una sonrisa llena de satisfacción y cuando ya se encuentran en el pasillo, chocan sus manos en señal de victoria.

Lara: La profesora menos negligente.

Ana: La re tiene con nosotras.

Lara: Si viene de mal humor y se las agarra con nosotras, que se la banque. La graciosa siempre nos termina mandando con Gómez.

Ana: Por lo menos no la vemos mas en la semana, tengo ganas de hablar de la ruta cuarenta por las dos horas que quedan.

Ana estaba siendo de todo, menos sincera.

Lara: Deje la comida en mi mochila... y el mate también ¿él todavía tendrá el termo que te olvidaste el otro día?

Ana: Espero que sí, tengo hambre. No voy a aguantar así.

Lara: No lo dudo.

Caminan por un pasillo con losas grises y paredes blancas adornadas con ventanas de marcos verdes y puertas a juego de un verde más oscuro. En el camino para llegar a la dirección, Ana se detiene con curiosidad al ver qué una de las puertas fue marcada con un símbolo celta en pintura dorada. La forma de nudo triangular que muestra la pintura llega a atraer su completa atención.

Ana: Eu, ayer esta no estaba ¿no?

Ana agarra levemente el brazo de Lara para llamar su atención. Lara frena su caminar extrañada por la pregunta de su amiga. Camina hasta llegar a la derecha de ella para ver la llamativa puerta.

Lara: Creo que no, siempre pasamos por acá. Debe ser nueva.

Ana: Esa marca brillante... Gómez siempre nos cuenta todo, no creo que lo haya visto alguien más que nosotras. Todos están en clases y ayer Mantecol nos mandó con él.