Todos tienen un pasado sea bueno sea malo, el mío me enseñó que sea familia, amigos,amores siempre terminarás traicionada.
*Recuerdo*
Ese día puedo jurar que fue el peor de mi vida, estuve llorando como nunca lo había hecho por esa estúpida traición...
En la mañana me despierto más temprano de lo común, 37 minutos para ser exactos, como no tengo nada que hacer hasta que pase el tiempo para que suene el despertador me pongo a observar por el ventanal sentada en el piso, entre tantos coches puedo ver qué hay uno que es diferentes a los demás, es negro completamente mientas que los demás son colores vivos este solo se puede observar como un punto negro alejándose.
Regreso a la realidad al escuchar el desesperante sonido del despertador para así poder seguir con las actividades que me quedan por hacer en este “maravilloso día” [nótese mi sarcasmo], arreglo mi cama y hacer lo mismo conmigo no es la excepción una vez realizado bajo por mi desayuno, pero al hacerlo me doy cuenta de que mi madre no esta ya que todo esta muy silencioso y conociendo a mi madre ella no es nada silenciosa, después de ponerme a discutir conmigo misma acerca del porque madre no se encuentra en la casa noto que hay una nota en la mesa con algo escrito por mi madre.
Hija me hablaron de la empresa para decir que me necesitaban ya que era una emergencia, no quería despertarte así que opte por dejar una nota y el desayuno en la isla. A otra cosa, de llegar temprano o antes que yo a casa, no abras la puerta. ( Orden de tu madre)
Valla manera de despedirse la de mi madre, sin más que hacer me pongo a desayunar un omelette con jugo de naranja uno de mis desayunos favoritos, después de desayunar agarro mi mochila y reviso que la casa esté cerrada como se me dijo al principio, una vez hecho esto salgo para ponerme en marcha hacia esas cuatro paredes, solo espero no encontrarme con alguien como Elena.
En el camino solo puedo pensar en como será el estar allí así son mis pensamientos hasta que un carro totalmente negro llama mi atención y como me toca luz roja, solo puedo apreciarlo de lejos, a decir verdad me da cierta curiosidad saber quién es la persona que maneja ese auto: como dicen, la curiosidad mató al gato, pero por lo menos murió sabiendo.
Después de tener ese debate con mi mente me pongo en marcha de nuevo, al llegar estacionó el auto en un rincón alejado de la entrada para así poder calmar mis nervios antes de entrar.
Los pasillos están repletos de alumnos desconocidos y tampoco es como que quiera que eso cambie.
Camino hacia la dirección y saludo al director Jones.
-buenos días señor Jones-
-buenos días Thomson-
-vengo a recoger mi horario-
-claro es este- dice señalando un hoja -y este es tu número de casillero-
-gracias-
-buen día -
Salgo para mi primera clase que es Matemáticas genial a lidiar con los números.
Al llegar noto que he llegado un poco tarde por eso de ir a recoger mis cosas a dirección, nunca había tenido que pasar por una vergüenza tan grande, me mentalizo y decido por tocar la puerta.
-he tenido que recoger unas cosas, perdón por la tardanza¿Puedo pasar?-
-pasa...-
-Thomson- la corto antes de que pregunte
-claro pasa-
-bueno chicos sigan con lo que estaban, ah y Thomson, última vez que llega tarde-
No llevo ni media hora y ya he recibido una atención, por lo menos nadie dijo nada, que más falta ¿Qué llamen a mi madre? Después de pensar me pongo a anotar lo del pizarrón si no quiero que eso se haga real.
DOS horas estando a la maestra con su cara de pocos amigos hacia mi y valla que tenía bonito apellido(Coleman).
Después de esas desagradables horas me dirijo hacia las demás clases al igual que Coleman los demás no perdieron su tiempo en presentarme se los agradezco, pero pudieron haber sido más amables, en fin, el hambre me gana así que voy a la cafetería que se encuentra repleta de estudiantes, pido un hamburguesa y jugo de manzana.
Desde que puse un pie en este lugar supe que podría esperar paz por tanto tiempo y como si fuera magia aparece Ava por la puerta, no es que le desee el mal pero tampoco el bien no llevo de conocerla un día y ya está en contra de mi.
*ricordare* (clase de literatura)
-eso es todo, para antes de las ocho quiero ese trabajo así que a trabajar-
En eso siento que alguien está parado enfrente mío.
-pero claro tenía que llegar la nena que me jodiera el día con tan solo tener su presencia-
-lo que quieras decir dilo claro Morgan-
-aparte de que te tomas el honor de llamarme por mi apellido, molesta- - si sabes que esta institución no es para ti ¿Verdad cariño?-
-lo siento querida pero no necesito tu opinión para estar aquí-
-pues deberías, vestida así no llegarás muy lejos, otra cosa nena no te metas conmigo si no quieres terminar sin tu bequita- dicho esto se va.
*fine del ricordare*
Cuando se sienta con su clan no para de buscarme con los ojos, cuando me encuentra me ve tanto que hasta siento como si viera lo que pienso, así que aparto la mirada para poder comer en paz.
Al salir de esas cuatro paredes me pongo en marcha para mi casa, en el camino lo único que puedo hacer es cantar sin importar las miradas una vez en casa estacionó el carro y me quedo pensando en lo pesado que fue el día de hoy menos mal que es el primer día.
En el momento de entrar noto que en la isla de la cocina ay un sobre negro algo que llama mi atención ya que no estaba cuando salí, lo abro pero solo hay un papel negro con algo escrito que me deja sin palabras.
Te encontré bonita.
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