I'll be your house

Capítulo 3.

Tras llegar a casa luego del desayuno tuvimos una fuerte discusión después de mucho tiempo, y todo culminó con las palabras hirientes por parte de ambos. Odiaba estar molesto con Baekhyun, pero cada vez que lo miraba recordaba sus palabras y las mías. Estaba arrepentido de ciertas cosas y quería disculparme por lo que dije, sin embargo, no me sentía arrepentido de la razón de mi enojo y yo presentía que él esperaba que sí lo estuviera. Pasaron tres días y nuestras conversaciones se basaban en monosílabos. Baekhyun ni siquiera quería dormir conmigo y nunca lo había visto tan molesto antes. Me enfadaba que estuviera tan reacio a hacer su vida aparte de la mía, me sentía frustrado porque él pensaba que estaba bien vivir solo para mí y tenía convicción de ello. En cambio yo sentía que lo estaba drenando, porque aunque él dijera que no estaba cansado o que hacía lo posible para que las cosas funcionaran, él se estaba desgastando y las cosas ya no estaban funcionando tan bien como él creía.

A este punto ya no sabía si yo estaba del todo correcto y Baekhyun del todo equivocado, pues esta situación me hacía pensar que él solo tenía esa necesidad de protegerme, pero al mismo tiempo sentía que le estaba robando todo lo que había anhelado cumplir. Él había abandonado todo por mí. Buenas oportunidades, el reconocimiento que siempre mereció, el amor de su familia, sus pasiones y sueños. Él estaba conmigo y me sentía amado sinceramente, pero me preguntaba cuánto de él mismo había dejado ir para quedarse conmigo y eso me hacía sentir una persona miserable. Cuando me propuse ser alguien y no dejar a Baekhyun cargar con nuestras vidas pensé que él lo veía de la misma manera, y resultó que estaba equivocado, porque parte de él no quería sentir que me perdía. Y resultó ser que Baekhyun tenía mucho más miedo por enfrentar la realidad del que yo tenía al principio.

Baekhyun había ido a Maiden. Estaría ahí hasta media noche. Aproveché ese momento a solas para visitar a mis padres, le pedí a Jongin que me llevara con ellos y él trajo a Sehun. Mi madre preparó una rica cena aquella noche. Estábamos todos juntos en la mesa y mus padres se veían felices por vernos a los tres ahí, especialmente porque sabía lo difícil que había sido para mí volver a sentirme cercano a ellos. Terminando la cena Kai y Sehun se quedaron viendo una película con mi madre en el sofá como en los viejos tiempos. Mi padre y yo fuimos a su oficina mientras tanto y hablamos sobre proyectos futuros. Él me hablaba sobre su proyecto de abrir una segunda librería; sin embargo, él vio en mí el desánimo que sentía en ese momento y dejó de hablar. Yo tenía la mirada perdida en algún lugar mientras pensaba en Baekhyun y en como podríamos resolver nuestro conflicto. Mi padre era perspicaz, así que no dudó en preguntarme qué sucedía.

—Hablando del futuro, he decidido cambiar muchas cosas en mi vida —dije de repente y él se inclinó sobre su silla—. Me sentí muy culpable por haber dejado a Baekhyun cargar conmigo, así que he querido remediarlo y empezar mi propia vida. El problema es que parece que él no quiere que las cosas cambien, no quiere que yo deje de necesitarlo.

—Chanyeol, sabes que él no acepta los cambios fácilmente, lo mismo sucedió cuando le propusiste que se mudaran a Japón —respondió mi padre manteniendo un tono sereno—. Debes demostrarle que puedes hacerlo por tu cuenta y él va a confiar en que puedes hacerlo, no solo se lo digas.

—Me ocultó que le habían ofrecido unirse a otros proyectos y se negó —confesé sin poder disimular mi molestia—. Se negó porque no quiere dejarme solo y yo siento como si le estuviera quitando la oportunidad de ser algo más que el pianista de un restaurante.

—Hijo, no esperes que él vea por sí mismo cuando es en ti en lo único que piensa. —Mi padre me miró con compasión y su comprensión me hizo sentir mucho mejor—. Debes dejarle en claro que él también es importante, que sus deseos también son primordiales. Que él tiene una vida además de ti y debe vivirla por él.