Amarte Como La Primera Vez ⦗taekook⦘

Algunas cosas no cambian

"La felicidad está en las cosas más simples con la persona correcta" -Danns Vega

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Finalmente entran en el apartamento del menor de ambos pasadas las diez de la noche, siendo recibidos por el lugar en silencio, frío por el reciente invierno y oscuro por la hora que era, pero que recobra su confianza a penas Jungkook enciende las luces de la cocina en su tonalidad más débil, permitiendo un ambiente más íntimo y quizás hasta algo familiar.

Taehyung exploró todo el lugar con sus ojos apenas la luz se lo permitió, dándose cuenta que era bastante acogedor y hogareño, a pesar de ser neutro y pequeño. Cargaba a Yoorim entre sus brazos mientras ella seguía durmiendo, descansando su cabecita en el hombro de su padre; ni siquiera se había despertado cuando la sacaron del auto. Taehyung supuso que estaba agotada en todos los aspectos posibles.

—Ven, puede dormir en el cuarto de invitados —Jungkook termina de dejar sus cosas en la encimera de la cocina y mira a su mayor, quien también lo miraba a él, un poco vacilón para ser honestos. 

—¿Y yo? —pregunta con claras intenciones, sonriendo con satisfacción cuando ve que Jungkook se sonroja e interpreta lo mismo que él pero pensando en acciones claramente distintas. 

—T-También... —murmura evitando la intensa mirada de Taehyung sobre sí, pues a veces se le olvidaba lo enamorado que estaba del hombre a unos metros suyo.

Camina hacia la habitación de invitados con la idea de que el mayor lo sigue, siendo esto afirmativo, y cuando entran, Taehyung deja a Yoorim con mucho cuidado sobre la cama para luego quitarle los zapatitos y cubrirla bien con las mantas. Le da un beso en la mejilla mientras le acaricia el cabello y la observa, todo bajo la triste mirada de Jungkook, pues se veía todo el dolor y cariño con el que Taehyung miraba a la pequeña niña que ahora se acomodaba entre las mantas y sábanas para poder dormir cómodamente.

Taehyung la observa durante algunos segundos más, sintiendo su interior nuevamente arder en llamas cuando ve la mejilla roja de Yoorim. Aún no podía creer el hecho de que no pudo proteger a su hija de recibir ese golpe proveniente de su madre, y sin ningún tipo de remordimiento al respecto.  

—Soy un mal padre —susurra para sí mismo con el peor de los ánimos, pero Jungkook al escucharlo, se acerca a él muy lentamente y le sujeta los hombros en una especie de abrazo improvisado.

—No eres un mal padre —afirma mirándolo de costado, dándole ese efecto que nadie más producía en él, subiendo su ánimo con sólo su sinceridad y su profunda mirada de cariño.

Taehyung se siente un poco mejor, pero solo un poco, porque a pesar de que Jungkook le decía la verdad, no puede evitar echarse la culpa de todo lo que le ha pasado a Yoorim últimamente respecto a Yeri, aunque la culpa en realidad era y siempre fue de ambos.

Cuando dejan a la pequeña dormir en la habitación, ambos se sientan en el sofá de la sala sin ningún tipo de incomodidad o vergüenza, solo un poco de timidez y revoloteos ácidos en sus estómagos por estar lado a lado y no saber qué decir en una situación tan común. Tan común, que en sus días pasados, solían por terminar besándose de seguro.

—No sé cómo es posible que cada día la odie más —confiesa con la mente hundida en rencor, pensando en como Yeri era capaz de hacer cualquier cosa por su beneficio personal. Sabe que Yeri intentará hacer todo lo posible por conseguir quedarse con Yoorim aunque ni siquiera le interese realmente. Intentará, porque él no piensa permitir algo como eso.

Jungkook frunce el ceño en cuanto lo oye, apurándose en aclarar la mente del mayor para que su interior no se llene de rencor y odio.—No deberías odiarla tanto, el odio solo trae más odio. Además, no te hace bien ni a ti ni a Yoorim el hecho de que le guardes tanto renco-