let's talk about sex ; 𝘀𝗮𝘁𝘇𝘂

009(Be Mine)

Como muchas parejas que tienen un noviazgo con altos y bajos, peleas y reconciliaciones, abrazos y besos, de todo un poco ¿No?. Todas a la final deben llegar a un punto en el que se tiene que elegir esas dos palabras que aceleran el corazón de una y hacen llorar a la otra, la mayoría de las personas no creen en ello y otras si.

Ahora mismo había una llorando mientras veía a su princesa azul con una rodilla en el duro asfalto en medio del estacionamiento de la JYP, el lugar en donde se conocieron, todas las chicas las veían en silencio algunas con lágrimas rodando por sus mejillas y otras con una gran sonrisa orgullosas de esa pareja que por más que paso por cosas terribles, momentos en los que parecía que ya no estarían juntas a esto, una relación que tomaría la mejor decisión de sus vidas.

— Por supuesto que sí —Mina fue la primera en aplaudir y luego le siguió Chaeyoung, era como su perrito faldero pero no la juzguen estaba a los pies de la japonesa a su completa disposición y obvio que estaba a lamiéndole las botas pero no hay que recordarselo, Sana sabe perfectamente lo que sucede cuando decides en medio de una cita en un programa hecho para los fans y, "ayudar con el compañerismo del grupo", nombrar a Mina, ese día Chaeyoung no le hablo después que las cámaras se apagaron.

Además ¿Como iban a juntarlas más?. Sana estaba segura que en ese tiempo si las hacían más cercanas estarían caminando desnudas por la casa sin ningún problema, sucedía, pero no tan seguido.

Volviendo al tema principal Sana se levantó feliz por ese sí que tanto espero y las fundió en un gran beso de película, lo único que faltaba era ese primer plano y la canción de fondo, eso iba a suceder pero Sana a escuchado tantas veces la misma canción que Tzuyu le prohibió terminantemente hacerlo en una ocasión especial, luego estaría tarareando todo el día y se infectaria de ella.

Era bastante dramática cuando se lo propone, miró a sus amigas y les enseño la mano— Wow Sana tuvo que gastar una fortuna en eso, ahora ¿Cuando se casen que anillo te va a dar? —Todas quedaron en silencio por lo que dijo Momo, últimamente había estado demasiado distraída y no quería decirle a nadie que tenía.

— Amor Sana le acaba de pedir matrimonio —Murmuró con las mejillas sonrojadas ya que todas las miradas estaba puestas en ellas dos— Es muy lindo el anillo, es como del tamaño del cerebro de mi novia —La mayor asintió.

— ¿Será que dejan de hacer bromas? —Se quejó la ahora rubia— Jeongyeon —La llamó y la peli azul volteó enseguida para mirarla, otra más que estaba loquita por una chica fría, según ella porque todas sabían que entre las dos Nayeon era la más melosa— Nosotras tenemos mucho tiempo de novias... —Llevaba tanto tiempo esperando que le pidiera matrimonio.

— Y seguiremos así bebé —Chaeyoung se iba a reír pero al ver como estaba Im prefirió callarse.

Todas parecían que querían discutir, hasta Mina y eso que estaba en silencio mirando todo super confundida ya que se perdió en el sí, las que estaban en su propio mundo y no se dieron cuenta de lo que hablaban eran Sana y Tzuyu, iban a casarse y seguramente tener cinco hijos como la mayor quería.

Ella no tenía hermanos y aunque su infancia no estuvo mal siempre quiso que alguna personita le hiciera compañía— Sabes que te haré feliz —Chou sonrió y asintió, estaban tan enamoradas y ensimismadas que no se dieron cuenta cuando las demás se fueron, les querían dar su espacio además no les estaban prestando atención así que prefirieron irse.

— Tú sabes que yo haré hasta lo imposible para hacerte feliz —Para Sana no había alguien más que la hiciera tan feliz como su pequeña, pero alta, novia, era su bebé y no iba a dejar de serlo incluso si las cosas volvían a oscurecerse como hace algunos meses.

Era la chica perfecta para ella, la misma que cambió para bien cuando se lo pidió volviendo a ser la misma de antes no esa máscara que se había puesto— Ya que las chicas se fueron deberíamos ir a otro lugar —Sana movió ambas cejas al mismo tiempo, tenía ansías de celebrar ese compromiso que había estado esperando por tanto tiempo, es que los nervios no la dejaban absolutamente para nada.

— Me gustaría pero... —Se quedó callada cuando Minatozaki tomó su mano y la acerca hasta sus pantalones, ahí habla algo que no era de la japonesa y sus ojos brillaron, la curiosidad la estaba matando así que entrelazó sus manos y dio media vuelta directa a su auto, el único de los nueve que tenía papel oscuro— Sí Jihyo nos encuentra —Guardó silencio gracias a como la contraria le sonreía, estaba siendo demasiado atractiva para la poca cordura que tenía en ese momento— Nos va a matar —Los besos en su cuello se extendían hasta sus clavículas, la estaba marcando en un lugar en el que si las veían tendrían serios problemas.

— Efectivamente se metieron en problemas —Se separaron con rapidez, ambas voltearon al mismo tiempo y se encontraron a una pelinegra de brazos cruzados— ¿Quien fue la de la idea? —Se señalaron al mismo tiempo, Tzuyu miró a Sana y entre cerró los ojos, era la culpable de que haya caído tan rápido y ahora le estaba echando la culpa a ella— Vayan rápido a la puerta, si no llegan antes que yo les voy a poner una sanción —A ninguna de las dos les gustaría lave los platos así que con todas sus fuerzas salieron corriendo, siendo perseguidas por la que parecía ser una corredora profesional.

En medio de la carrera se miraron y rieron, éste tipo de cosas les hacía saber lo divertida que era su vida juntas, hasta eran perseguidas por la líder a la mitad del estacionamiento de un edificio.

Sana sonrió recordando todo lo que vivieron en todo ese tiempo, como estuvieron al borde del final de su relación pero que pudieron resurgir, hubo llanto, risas, gritos y demás pero a pesar de todo ella seguía siendo de Tzuyu y Tzuyu de ella.

— Me acabo de dar cuento que sexo se escribe con S de Sana —La mayor se quedó callada para luego reír, esa pequeña si que tenía una gran imaginación.

Fin.

Todavía no tengo ganas de soltar a las Satzu así que tal vez más adelante haga unas preguntas para que me ayuden a decidir una o dos temporadas más.

Se me cuidan.