Hay un espejo en casa.
Es grande, enorme.
Abarca toda mi figura
y me hace sentir incómodo.
Siento un escalofrío
cuando me miro en él.
Esos ojos que me devuelven
la mirada no pueden ser míos.
Se notan fríos, indiferentes,
y ojeras violetas los adornan como
aros de oscuridad a su alrededor.
Hay un espejo en casa.
Soy el único inquieto por ello.
Y es que cuando miro
mi reflejo no es mi rostro
quien me regresa la mirada.
Pero nadie me cree, piensan que
estoy loco, quizá de tanto oírlo
puede que empiece a creerlo.
Loco, loco, loco. ¿Es la locura
la desgracia que todos creen?
Puede que sea real lo que ellos ven.
No estoy loco, hay algo mirándome ahí,
se parece a mí pero no soy yo.
Eso está cubierto de sangre,
y por alguna razón, parece odiarme.
Hay un espejo en casa.
Aunque no recuerdo que sea mi casa.
Me negué a verlo, pero no era una alucinación, estoy lleno de sangre.
Fue un error intentar ignorar la realidad.
Eso soy yo. Él soy yo.
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Voces
PoetryEmpecé a escribir porque nunca aprendí a hablar, me sentía perdido y solo, de alguna forma me tenía que expresar. Aunque esos sentimientos nunca se han ido, y realmente yo sigo sin saber cómo platicar. escritos y poemas al azar. © delilah, 2022.
