Las tazas tintineaban en la cocina, y el ruido de la cafetera no cesaba, era una tarde bastante común en aquella cafetería.
Las personas que la frecuentaban siquiera habían notado que en ese mismo instante una foraz tormenta iba a desatarse, una que absorbería a cualquiera que se cruzara en su camino.
Ninguno podía negar que extrañaba estar en los brazos del otro, aún si el tiempo los había cambiado y no eran aquellos jóvenes esperanzados.
—Jungkook— Park puso sus manos en el pecho del nombrado, para tomar distancia— eres tu, después de tanto tiempo.
No fue mas que un susurro, era un momento suyo, nadie tenía por qué saberlo.
—Si, soy yo. Y estamos en un mismo lugar después de cuarenta años. ¿Suena loco no? Estuviste junto a mi durante años, y siquiera podría imaginar que todos esos libros eran tuyos- los halagos de JungKook lo hicieron sonrojar.
—Estamos grandes ya, pero sigues sin perder el encanto Jeon.
No pudo resistirse a sentir el calor suyo entre sus brazos, lo había soñado tantas veces, pero nunca se asemejaría a aquella situación.
—¿Puedes solo quedarte un segundo más acá?, soñé el momento donde nos reencontrariamos por años, miles de veces, y casi olvido lo que lo añoraba.
Jeon no dudó en sonreír, era la esencia de Park que lo había vuelto loco aquella vez, la que salia a flote.
—A menos que el famosísimo escritor quiera ser descubierto por algun adepto a tus novelas, podríamos sentarnos ¿No te parece mucho mejor?
Los jovenes los esperaban ansiosos en la mesa, sin saber que era lo que los mayores iban a decirles por la pequeña sorpresa.
—Ustedes sabian que ambos ibamos a encontrarnos, ¿no?— Jimin tomo asiento al lado de JungKook, justo en frente de Yoongi.
—Espero que no les haya molestado el atrevimiento, pero necesitabamos a ambos aquí para concluir lo que tanto investigamos.
Taehyung sacó una libreta de su bolso, y un bolígrafo, sabía que Min ya tenía preguntas dando vueltas en su cabeza.
—Antes que nada, quiero saber si ustedes estan dispuestos a siga con esto. Su historia. Es algo totalmente suyo, pero si me lo permiten me gustaria, ocultando sus identidades obviamente, poder escribirla.
Ambos de miraron por un segundo, ninguno estaba al cien por ciento seguro, sin embargo asintieron.
—Hay muchas cosas por contarles, y eso que nuestra historia no fue larga. Pero imagino que tienes alguna pregunta exacta para hacernos, ¿O me equivoco?
—Esta en lo correcto, señor Jeon.
—Solo JungKook, odio las formalidades.
—Jungkook, entonces— Kim miró a su compañero, atento a cualquier cosa que pudiera escribir— es el que escribió la carta que encontramos, y nosotros pudimos leer que se despedía en esta. Pero estaba en el libro, después de cuarenta años— Yoongi hizo énfasis en esa última oración, ya que era lo que más les desconcertó durante esos meses.
—Si, la escribí justo días de irme. Teníamos que escaparnos de Busan con mis padres, y esperé una respuesta de Jimin. Antes de tomar el autobús fui a la librería para saber si había algo, pero la carta seguía ahi. No iba a quitarla, siempre tuve la esperanza de que la leyera y me buscara, pero nunca lo hizo...
El tono en la voz de JungKook fue bajando conforme hablaba, y así tambien lo hizo su espíritu tan enérgico.
—La última vez que lo vi a los ojos— esta vez lo miró, como si en estos todavía estuviera guardado aquella imagen— Fue cuando prácticamente corrió hacía el auto de su padre, quizás internamente sabía que no lo vería más. No miró hacia atrás ni por un segundo y eso me destrozó.
Jimin lo observó detenidamente, ninguno supo todo lo que cada uno había afrontado aquella última semana.
—Señor Jimin, imagino que usted también tendrá su historia. No creo que lo haya dejado ir siemplemente.
—Soy el hombre que ustedes ven ahora, por todo lo que viví, y cada una de mis novelas estan cargadas de esa libertad que tanto busque por años.
Hubo un punto en mi vida donde la soga en mi cuello me asfixiaba. Y fue ahí donde tomé la iniciativa de irme de aquí, había estudiado para una licenciatura en Literatura inglesa, y nunca había podido ejercer, fue mi oportunidad.
Mi padre fue la soga que siempre me ató, cuando por fin pude escaparme comencé a buscarlo, a buscarte— Jimin giró su rostro hacia su derecha, dónde el atento rostro de JungKook lo observaba— Pero los años pasan y uno tiene que seguir adelante, imaginé que nunca más iría a verte.—Pero hay algo que no comprendo señor Park— fue TaeHyung quien habló, el cual estuvo atento a todo lo que decían— ¿Usted se fue con su padre y no regresó más a Busan?
—Mi padre fue un militar activo durante el último golpe de estado. Había sido ascendido de puesto y temía que alguien nos dañara a nosotros por esa razon. Era un hombre que toda su vida creyó hacer lo correcto, y esperaba todo eso de mi. Esperaba que tuviera su temperamento, sus ideales políticos, e incluso esa asquerosa insensibilidad que lo caracterizaba.
Sin embargo hubo algo que hizo que sus planes se aceleraran, el se enteró de lo nuestro— Jimin todavía podía sentir la sangre caliente correr por aquel golpe que había recibido— El hijo de un general, de ideales poco conservadores, salía a escondidas con un rebelde. Hubiera sido un comentario fatal para él, fui su mas grande vergüenza. ¿Lo ven? La historia es mucho mas complicada de lo que parece, todos teniamos nuestros demonios detrás.—¿Y sus padres señor JungKook? ¿Lo sabían?
—Claro que lo hacían, pero a ellos tampoco les agradaba la idea. El era hijo de un hombre que causo tanto dolor y tristeza en la vida de cientos de personas, que no podían concebir que Jimin no fuera igual a él. Y siendo sincero al enterarme también fue algo difícil de digerir, pero el era el rayo de luz en mi vida, era feliz hasta con verlo desde lejos, no iba a permitir que eso fuera un impedimento aún sabiendo a todo lo que nos enfrentábamos.
—¿Cuándo fue que se enteraron en qué estaban involucrados cada uno?
El sonido rítmico del tono de llamada de un teléfono los interrumpió.
—Lo lamento, es mi pequeño debo contestar— tomó el móvil y giró hacía la ventana.
~¿Qué es lo que sucede cariño? Ya te dije que papá está en una reunión importante, cuando termine voy para allá.~
...
~Lo sé bebé, pero si no haces enfadar a Mimi, prometo que voy a llevarte unos dulces de camino y veremos juntos la película que querías ¿Te parece un buen plan?~
...
~Así me gusta pequeño, ahora papi tiene que colgar. Envíale un beso a Mimi de mi parte y cuídense ambos.~
—Lo lamento, él me extraña mucho cuando no estoy en casa. ¿En dónde nos habiamos quedado?
—¿Tienes un hijo JungKook?— Jimin no sabía que cara poner, era lo que menos se esperaba luego de todo lo que había ocurrido.
—Si, tiene cinco años. Es realmente un torbellino de energía, creo que es lo que me mantiene así.
Los minutos corrieron en el reloj, cuando el teléfono volvió a sonar.
—Creo que estaba vez si tengo que irme jóvenes, además ya se esta haciendo un poco tarde.
—Señor JungKook, este es el número de Junhyun. Imagino que lo recordará, le prometimos que si lo encontrabamos le dariamos su número.
Le dieron el papel doblado y los ojos del nombrado brillaron.
—Se los agradezco mucho, en serio se los digo. ¡Que tengan un buen día!— justo antes de salir por la puerta giro y le dio a Jimin un papel— Éste es mi número, por si algun día quieres hablarme, sin cartas de por medio esta vez.
Claire ♡
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This Thing Called Love [Kookmin/Taegi AU]
Fanfic"1983" ⤷Ésta quizás sea mi última carta... Min Yoongi, un estudiante universitario, encuentra una carta de un tal "gguk" dentro de su nueva adquisición, un libro. ¿Por qué nunca había llegado a destino? Kim TaeHyung, su mejor amigo y la persona qu...