Cap 7

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-haaaa por fin terminamos... y justo a tiempo. Bien me voy. -Nephrite se levanta se estira y se mira en el espejo del baño, se acicala el cabello y se lava las manos y sale.
-¿a donde iras?
-quede de salir con Lita. ¿Tu que aras?
-me iré a casa.
-hay vamos, ¿porque no invitas a salir a Mina? Podríamos ir los cuatro, las chicas se sentirán más cómodas estando juntas.
-No Creeo que Lita tenga problemas con la comodidad estando con tigo. -le responde Kunzite tomando su saco, las llaves y saliendo los dos juntos de la oficina. Se dirigen platicando al estacionamiento.
-Mira allí van Lita y Mina. ¿Quien será ese chico? ¿Será novio de Mina la lleva tomada del brazo. Vamos.
-No, estás loco. Qué tal si es su novio, me miraré como un tonto.
-hay hermano, mira ya se fue, hmm. Bueno si no quieres... Nos vemos hermano. -Nephrite se despide y se dirije a las chicas, Lita al mirarlo se abalanza a él y lo besa apasionadamente, Mina se aleja de ellos y se despiden a la distancia ella sigue caminando y Kuznite cerca de ella y sin pensarlo decide ofrecerse y llevarla a su casa. Le cierra el paso sin importarle los demás carros.
-¿te llevo? Será mi forma de pagarte por mojarte. -Kuznite con los vidrios abajo la llamo.
-No es necesario, tomaré un taxi, muchas gracias. -le responde con una linda sonrisa.
-anda, vamos, me siento mal por lo sucedido, por favor... -un claxon de otro vehículo sono y Mina dio un saltito aceptando la invitación del peliplata, subió al coche y Kunzite comenzó a manejar.
-muchas gracias, pero no hace falta, puedo tomar un taxi como siempre. -le dice la rubia sin mirarlo.
-claro que si, me da mucha pena lo sucedido y no quiero que pienses que soy mala persss...ona. -se muerde el labio.
-No Creeo que lo seas. Me conseguiste ropa seca, y claro que te la pagaré, o mejor te la devolveré para que la cambies y tú escojas algo para ti. La he estado cuidando mucho. Muchas gracias por eso. -Mina lo miro y Kunzite casi choca con el auto de enfrente por no mirar el semáforo en rojo. Valla que lo distrajo.
-lo siento... yo... no se hacia donde vives...
-haaa? Haaa era hacia el otro lado... pero...
-entonces te invito a cenar, hace rato no comiste nada y yo muero de hambre ¿te parece? Sushi, tengo ganas de comer sushi.
-No... nunca he comido sushi... aparte, no como mariscos y el pescado crudo no... yo estoy bien Gracias. -Mina apenada le respondió y al escuchar la risa de Kunzite se sonrojó.
-tranquila, estoy seguro que te encantará, y no solo tienen pescado crudo, también... mejor espera que lo pruebes. -Kunzite siguió manejando y luchaba por no mirarla, llegaron a una zona del centro algo solitaria y entraron aún establecimiento con fachada de madera antigua, Mina se aferró al brazo de Kunzite, el lugar la puso nerviosa y miraba a todas partes. al entrar una chica de rasgos asiáticos los recibió y al reconocer al joven los guió a un privado, recorrió una puerta estilo japonesa y los invito a entrar, el interior estaba muy iluminado y tenía una mesa casi al ras del suelo color miel, unos cojines con estampados verdes, blancos y naranjas, la chica que vestía una especie de kimono les llevo una pequeña jarra blanca y dos pequeños vasos. Kunzite se sirvió un poco del líquido transparente hiso un gesto y tomó otro.
-perdon Mina no te ofrezco porque él sake es algo fuerte, y a lo que noto no eres de beber... ¿o si?
-No, no bebo solo una que otra vez. Gracias.
-pediré por ti ¿está bien? confia en mi se que te gustará. -kunzite la Mira fijo, Mina solo se rasca el cuello y baja la mirada.
-está bien, no tengo problema con eso, no conozco esta comida así que... está bien.
-Gracias Mina.
-porque?
-por disculparme por mojarte.
-solo fue un accidente no fue a propósito,
-tranquilo. -le sonríe, Kunzite suspira anonadado por la sonrisa de Mina. -y cuéntame ¿cómo es eso de los nachos con carne? -Kunzite comenzó a narrarle la historia, y reían por esta.

Kunzite
Note como se relajaba mientras le contaba la historia, jamás había estado con una chica platicando de cosas triviales en ves de besarnos y terrminar en la cama, sin duda Mina es diferente, otras chicas se me abalanzaban al saber quien era yo y querer pasar una noche fogosa con migo. Noto como se rasca en la parte de atrás de su cuello insistentemente, y miro la etiqueta de la ropa, me acercó a ella y como si la fuera abrazar, su perfume me llena de nuevo, le arrancó la etiqueta de la ropa de la tienda y ante su protesta tomó la chaqueta y también quitó la otra etiqueta.
-No, qué haces! Pensaba devolvértela.
-es un regalo por mi torpeza
-pero... es que ...
-¿no te gusto la ropa?
-esta hermosa, pero es demasiado... -la cena llegó, haciendo que Mina dejara su protesta. unos platos alargados como si fueran cortados directos de unas rocas, se miraba hermosa la presentación, como siempre. La chica nos deseo buen provecho y salió cerrando la puerta...
tomo los palillos y disfruto de uno de los rollos, está exquisito, noto como Mina apenada no logra acomodarse los palillos y me atrevo a sentarme junto a ella. Le ayudo a acomodarse los palillos y torpemente se lleva uno a la boca, abre sus ojos asombrada y me dice lo rico que está.
-está delicioso. Como pude perderme de esta comida Exquisita. -Mina saboreaba cada bocado yo con pesar regrese a mi lugar frente a ella. Tome otro rollo y se lo di en la boca, su sonrojo volvió a aparecer pero la sentí más relajada.
-dime que esto no es para secuestrarme. -me pregunto y me tomo por sorpresa. (Si supiera que es ella la que me a secuestrado a mi).
-No. por supuesto que no...
Volvimos a reír y a platicar tan a gusto, la verdad me divertí con ella, quiero volver a salir con ella, quiero conocerla...
La llevo a su casa, el lugar luce algo deplorable, hoyos en la calle que debo esquivar, algunas luces no funcionan y... se ve algo peligroso, me dan escalofríos al pensar que alguien como ella tiene que vivir en un lugar así... no conocía este lugar. Llegamos a un edificio, ella bajo sin darme tiempo a abrirle la puerta, sin duda no está acostumbrada a las atenciones de parte de un hombre o con los que ha estado no han sabido tratarla.
Se despide de mi tomando su distancia,
-muchas gracias por esto. Te prometo que te pagaré la ropa. tomó su mano y la acercó a mi, cuando estoy a punto de darle un beso en sus labios me limito y solo se lo doy En la comisura.
-Nos vemos mañana Mina. -le digo y ella entra al patio del edificio, me recargo en mi auto y miro como sube las escaleras, me mira por el balcón del segundo piso, y sube más, llega al balcón del tercer piso y miro como saca sus llaves me dice adiós con su mano, me despido de igual manera y entra, sonrió. Subo al auto y conduzco por donde vine. No puedo creer que estuve a punto de besarla...

Amores Peligrosos "ellos"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora