Veamos, mi nombre es Daira Alaia de los Santos ( osea la rayis), realmente no sé qué sucedió, pero se los narraré.
Regresé de la escuela caminando, estaba preocupada debido a una mala nota en mi tarea de matemáticas, realmente no le presté mucha ate...
No sé siquiera qué diablos hice para merecer esto.
¿Estaba caminando distraídamente? si, eso lo sé
¿ Merecía morir? Talvez
¿Debía reencarnar? Si, porque, porfavor, apenas tenía 16
¿ Era necesario despertar en esta mujer? No!, Claro que no!, Una y mil veces un rotundo no.
Aunque debo admitir que me encantaría ser mamá.
Bueno, al parecer, estoy en el cuarto que el emperador me asignó por estar, "disque" lastimada, estoy molesta, no se en qué parte de la historia estoy, este pie duele, pero nada que no pueda aguantar, ni la Rashta original, ni yo hemos salido libre de los accidentes o golpes así que puedo caminar, digo no es como si por estar caminando se me pudriera el pie, o me quedé invalida, que onda con la exagerada preocupación de Sovieshu.
Tengo flojera, pero me levantaré de esta cómoda cama,
-Ah~- me estoy levantando cuidadosamente, porque aunque es cierto que soporto el dolor, nunca había tenido una herida tan profunda - listo!, Lo logré, bien, y ahora pa' dónde, claro, a la puerta
Pov. Normal
Mientras la Rashta reencarnada se dirigía a la puerta, un emperador, furioso se dirigía a su habitacion
- Agh, maldita herida, por lo menos ya llegué
En ese momento la puerta fue abierta abruptamente por Sovieshu. Al ser el movimiento tan bruso, Rashta, quien estaba parada en frente de la puerta, se dió un doloroso sentón.
- Agh, duele
La cara de sovieshu se deformó, de enojo, a sorpresa y posteriormente a preocupación.
- Rashta!!?, Que hacías parada ahí?!- se agachó para ayudarla a levantarse y la llevó a su cama, y hablando con un tono más suave dijo- Rashta, querida, no era mi intención lastimarte, ahora mismo llamaré a un médico para que te atienda.
Rashta estaba estática, no tenía en mente encontrarse con el emperador justo ahora, pero, Daira era estratégica, así que aprovecharía ese momento a solas con Sovieshu al máximo.
- Rashta?, te encuentras bien?
- Ah?, ah, si, me encuentro bien su majestad, no debe preocuparse, no fue algo grave, ahora sí me permite, me gustaría saber el motivo de su visita.
- Ah, bueno, me sorprende lo rápido que aprendes la etiqueta- ( Pov. Rashta: Demonios, se me olvidó que la original hablaba en tercera persona, ne, igual ni siquiera pensaba hablar así parecería una retrasada, ag, no sé cómo sovieshu la aguantó)- y, ah, vine porque quería que supieras que la emperatriz se encargará de buscarte algunas acompañantes para que te ayuden .
- Pero su majestad (Perdón, te recuerdo que soy una simple concubina, mi reina, no necesita ni debe atender este tipo de cosas, cabeza hueca)
- No te preocupes querida, necesitabas ayuda para poder realizar tus cosas personales y ubicarte en el palacio, por ahora descansa, ordenaré que el doctor te revise, y otra vez discúlpame .
Sovieshu se retiró de la habitación, no sin antes dejar un beso en la frente de su amante.
- Okey, okey, he de admitir que sovieshu es atractivo, nah, no es cierto, es un guapetón y de cerca lo es aún más, peeero eso no importante ahora.
Rashta se levanta de su cama y se dirige a lo que considera que es un closet, encontrando en este vestidos que para su gusto eran horribles, recordando que Rashta, al convertirse en amante del emperador empezó a comprar joyas y vestidos desmedidamente.
- Oh, porfavor, esto es un completo asco... de todas formas buscaré algo más simple, cuando me valla de aquí, llevaré todo esto, y las joyas necesarias, y las venderé, necesito tener dinero para comprar los materiales suficientes y construir mi propia casa, mjm, claro que sí estos músculos necesitan entrenamiento, Ian y Glorym necesitarán una casa espaciosa digna de ellos.
Rashta, buscó en el gran armario y encontró un vestido no muy llamativo, simple pero a la moda ( claro que de ese tiempo), de mangas largas, y de largo hasta los tobillos, de un hermoso color esmeralda con un toque de verde pantano.
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- esto es simplemente perfecto, me recuerda a los vestidos de la sultana hürrem en la serie de EL SULTÁN. Bello por aquí y bello por allá.
Terminando de colocarse el vestido Rashta se peino su suave cabello albino con una coleta de caballo
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( Ignoren el vestido, imaginenselo como en la otra imagen)
Sé que ya pasó mucho tiempo pero se me ocurrió está historia, y cabe aclarar que no es original, ya se han hecho otras historias con este tema, aún así espero que les guste y porfavor dejen su voto, si están inconformes con alguna parte porfavor comentarlo
