✓ | lyra y el misterio del príncipe [6]

34 | sin tranquilidad

:. CHAPTER THIRTY-FOUR .:.
( WITHOUT TRANQUILITY )

-¡ALTAÍR VOY A ROMPERTE LA NARIZ! -se quejo la rubia entre risas.

Lyra había estado esquivando a Hermione quien la queria obligar a hacer la tarea y se había encontrado con el rubio de causalidad, ambos habían terminado en los jardines del castillo mientras veian jugar a Apolo.

-¡Tu comenzaste ahora te lo aguantas! -dijo Altaír sin dejar de hacerle cosquillas.

Harry habia estado buscando a la rubia para pasar un poco de tiempo juntos. Pero cuando la encontro no le gustó en absoluto lo que vio.

Altaír se encontraba sobre Lyra haciendole cosquillas y la distancia entre ellos dos era mínima. Los celos se apoderaron de su cuerpo pero cuando dio un paso para acercarse hasta ellos Ron lo detuvo mientras negaba, no queria que tuvieran otra pelea.

Apolo que habia estado mirando como su dueña gritaba se acerco hasta ellos y mordio a el rubio para intentar alejarlo de Lyra.

Despues de calmar su risa, Lyra sorio con orgullo.

-Lo eduque bien, ¿verdad? -preguntó haciéndole caricias a su perro.

-Si, bastante creo. ¿Pero era realmente necesario que me mordiera el trasero?

-En realidad, papá lo educó para que mordiera la parte delantera -informo- Lo entreno especialmente para que lo hiciera con Harry, pero Apolo ama a Harry.

-¿Entonces tu perro me odia? -preguntó Altaír tratando de quitarle unas hojas de la cabeza a la rubia.

-Si, a la unica persona rubia que puede amar es a mi -se burlo empujando la mano el chico para que dejara las hojas en su cabeza.

Altaír se rio y se levanto para después ofrecerle la mano.

-¿Como esta tu primo? -preguntó mientras ambos caminaban hacia el castillo.

-Bien -dijo recordando lo que habia hablando con el Draco.

Al armario solo había que darle unos ultimos toques para que estuviera listo, pero Draco le había dicho a la rubia que todavia se sentia mal por lo que había pasado con Harry y que queria descansar.

Asi que Lyra no insistió y supuso que él le iba a avisar para volver a la sala de menesteres.

-Me alegro -dijo el rubio sonriendo verdaderamente- Ese día te vi en el pasillo de casualidad y toda tu ropa estaba llena de sangre.

-¿Que? ¿Te asustaste? -preguntó en un tono burlon mientras lo empujaba.

-Si un poco, pero no más que Rolf, creo que estaba apunto de entrar en una crisis nerviosa hasta que le avisaron que todo estaba bien.

-Si -se rio- Rolf tiende a preocuparse demasiado pero le sale del corazón... ya sabes, se preocupa mucho por las personas que quiere. ¿Que hay de ti, tienes primos?