Ya han pasado 3 días, desde que vi a Andres besando a Lucia, los mismos días en los que no he dejado de llorar. Y tampoco he dejado de pensar ni un segundo en él. En lo que me hizo. En odiarlo casa día mas. Andres ha tratado de hablar conmigo en la escuela, me llama, me manda mensajes. Pero no se lo he permitido, no quiero saber nada de él.
Fernando,mi mejor amigo, hablo conmigo ayer. Trató de animarme, pero simplemente no pudo. No estoy de humor para nada. No he dormido bien. Me he dormido llorando, no la estoy pasando para nada bien. Para colmo; tengo mucho sin ver a mi papá en la casa. No se que pasa y no quiero preguntarle a mi mamá. Por miedo a la respuesta. Tengo miedo de que me diga que se fue. El solo hecho de pensarlo me aterra.
Hoy Fernando me hablo. Me invito a una fiesta en Nuevo León, una prima de él cumple sus XV años y no quiere ir solo. Dudo en ir, no tengo ánimos; ademas es media hora de camino. Pero me alentó a ir diciéndome que así despejaría mi mente. Y que me serviría salir para dejar de pensar tanto en todo.
Acepte no muy convencida. Y de mala gana comencé a ver que me podía poner para la fiesta. Encontré un vestido, que compre y no había podido usar. Es negro, sencillo de maga sacada, a la rodilla, con vuelo; algo simple. No me gusta lo extravagante; eligió unas zapatillas rojas junto con aretes y una pulcera roja que me regalo mi mamá en mi cumpleaños 14.
Me gusta como me veo, el vestido me sienta bien. Me pongo un poco de maquillaje. Por que no soy de las que les encanta ese tipo de cosas; y dejo mi cabello rizado suelto.
Me gusta la imagen que veo de mi. Aunque en realidad es otra yo. Esa yo que vida en el espejo era, depresiva, triste, melancólica, no sonreía y la yo que solía ser antes de la muerte de mi hermano; antes de lo que Andres me hizo. Me deprime saber que he cambiado tanto en tan poco tiempo. Para colmo he cambiado para mal.
A las 8 de la noche Fernando pasa por mi. Hicimos media hora de mi camino en su auto. No cruzamos ninguna palabra solo el "hola" cuando llego por mi y fue todo. No me sentía con ánimos de venir. Poco antes de llegar me dijo.
-No querías venir, ya lo se. Pero, no puedes seguir así.
-No quiero hablar de eso Fernando, no quiero hablar de nada.
-No quieres hablar de nada, te cierras en tu burbuja invisible. Nada entra, nada sale. Como permites eso? No puedes seguir así. Sé que lo te hizo Andres fue duro mas lo de tu hermano. Y aunque no lo admitas odias no ver a tu papá en tu casa, siempre fuiste una niña encaprichada con él, pero. Tienes que seguir-las lágrimas empezaron a correr por mis mejillas, las limpie de inmediato.
-No me gusta hablar por esto, me pongo mal, no quiero saber de nadie eso es todo. La verdad es que mi vida cambio de forma radical en tan poco tiempo. Y eso es lo que no puedo entender por que.
-Tal vez en lugar de "porque" deberías preguntarte "para que" para que te paso todo esto? Que vas a aprender? Que es lo que en realidad debes de hacer-sus palabras me dejan pensando. Ya no quiero llorar. Y reúno toda mi fuerza de voluntad para ya no hacerlo.
Para cuando llegamos no parece que he llorado, salvo por que se me escurrió un poco el maquillaje. Pero solamente lo limpio y lo retocó. Ya me veo bien, pero me gustaría sentirme bien.
Entramos a la fiesta en un salón, que es bastante amplio y a penas comienzan a llegar los invitados. Es un lugar con una enorme pista de baile. El grupo versátil esta por empezar a tocar. Al fondo hay una mesa donde sirven bebidas.
Nunca he probado el alcohol, y prefiero que sea así.
De pronto Fernando toco mi hombro con su mano.
-Ven-me pide-quiero que conozcas a mi familia.
-Vamos-le digo y lo acompaño a una mesa que no esta muy lejos de donde estábamos.
Al llegar me presenta con toda su familia que ahí estaba y me agradaron, a algunos ya los conocía a otros aun no.
Nos sentamos con ellos. Fernando a mi lado. Pero, conforme fue llegando mas gente, se fue a recibirlos a todos.
Un primo de Fernando me pidió que fuera con él a la mesa de bebidas y por no ser descortés lo acompañe, pero de pronto también me dejo sola. Iba caminando rumbo a la mesa y sentí que alguien toco mi hombro. Pensé que era Fernando o su primo. Pero me equivoque. Era un muchacho como de unos dieciocho años, era guapo. Ojos color café claro, mas alto que yo, su cabello guero corto.
-Hola-me dijo sonriendo, si de he ser sincera, tenía una sonrisa hermosa- como estas?
-Hola, bien-respondi algo confundida. Por que me hablaba a mi?
-Como te llamas?-se mostraba intrigado-no eres de aquí verdad?
-No, no lo soy.
-Aun no me has dicho tu nombre.
-Si, yo. Lo siento, me llamo Anjulisse.
-Anjulisse? Que nombre tan raro-rei nadie me había dicho que mi nombre fuera raro.
-Pues no tengo idea de donde lo sacaron-bromee y también él rió.
-Yo soy Octavio. Mucho gusto Anjulisse-lo dijo exactamente como Andres decía mi nombre. Sentí un vacío en mi, todo me recordaba a él.
-Mucho gusto Octavio.
-Nos sentamos?-me propuso y acepte. Caminamos poco y nos dirigimos a una mesa. Tomamos asiento. Comenzó a plsticarme de él y yo de mi.
Bailamos la gran parte de la noche. Pero cuando menos pensé y quise buscar a Fernando. Ya no estaba! No puede ser me dije a mi misma. Fernando tiene que estar aquí. Lo busqe por mas de 10 minutos y no lo encontré.
-Se te perdió algo?-me pregunto Octavio, asenti-Que sucede?
-Fernando, mi amigo con él que venia, ya no esta.
-Y no tienes quien te lleve a tu casa?-prrgunto curioso, no quería que se ofreciera a llevarme. No! No lo conocía, bueno si pero no tanto como para que me llevara a mi casa.
-No-respondi con la verdad a pesar de lo que podía venir.
-Bueno, yo te llevo-me dijo. Ahí esta lo que temía.
-No, yo...
-Vamos, no hago nada, solo te llevare a tu casa lo prometo.
-Esta bien-no tenia mas opción que aceptar. No podía quedarme ahí.
-Vámonos entonces.
Lo seguí hasta su auto, era un audi color negro.
No supe cuando llegue a mi casa. Pero cuando quise bajar me jalo del brazo y me hizo voltear hacia él. Lo mire desconcertada y de pronto sentí sus labios sobre los mios. No lo esperaba. Como es que de pronto eso pasaba? No sabia que hacer pero por impulso me aleje de él.
-Lo siento-me dijo sin pena-tenia que hacerlo. No aguantaba las ganas de darte un beso.
Lo mire desconcertada. Como era que me decía eso? A penas me conocía.
-Gracias, adiós-le dije y baje del auto molesta. No alcanzaba a comprender lo que acababa de pasar. Eso fue realmente extraño.
Hola soy yo otra vez. Espero que les guste. Wow! Nuevo pretendiente? Amigo? Creo que a cierta persona no le va a gustar para nada esto. Y Anjulisse no se imagina lo que esto traerá jn su futuro.
Muchas gracias por leer mi historia. Cada vez son mas. Este capítulo va dedicado a ti lector de mi historia. Muchas gracias.
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Inesperadamente sucedio
RomanceEsta historia, narra la vida de una joven de 17 años llamada Anjulisse, que a su corta edad, pasa por muchas cosas inesperadas, mas los efectos de la adolescencia y la influencia de terceras personas, harán que tome decisiones que van a cambiar el r...